11 de septiembre 2011- El XIV Dalai Lama, Tenzin Gyatso, recalcó hoy a los mexicanos que en realidad ‘lo más importante es que somos una unidad humana, y el mundo está totalmente interdependiente.
Por eso, debemos desarrollar en cada uno de nosotros sentimientos de responsabilidad universal’.
Lo anterior, luego de inaugurar y recorrer la exposición ‘Tíbet: Recuerdos de la patria perdida’, en el Museo de la Tolerancia, que muestra los crímenes de carácter étnico y cultural por los que ha pasado ese pueblo a lo largo de los últimos 61 años, lo cual cuenta con pocos precedentes en la historia reciente.
‘El mundo es totalmente interdependiente, y por lo tanto es necesario conocer qué es lo que sucede en distintas partes para estar al tanto de nuestro planeta. Nuevamente digo esto para expresar mi agradecimiento porque existen estas exposiciones, ya que nos dan información de lo que sucede en todos lados’.
El Dalai Lama reiteró que es importante que existan museos que muestran lo que sucede en distintas partes del mundo, porque es necesario que todos sepamos qué es lo que sucede en nuestro planeta.
‘Esto es distinto de lo que sucedió con nosotros en el Tíbet en los últimos siglos’, subrayó el visitante.
El recuerdo asistió a su mente, y así lo explicó: ‘Estábamos rodeados de los Himalaya por un lado, y cordones de montañas por otro, y nos mantuvimos aislados. Distinto era en la época antigua del Tíbet, en la cual siempre se extendían lazos hacia el este, el sur, norte y el oeste’, añadió el líder espiritual.
Pero, abundó, ‘en los últimos siete siglos eso no ocurrió y terminamos aislándonos, sin conocer qué es lo que pasaba en distintas partes del globo. Como consecuencia de esto, ocurrieron desgracias como las que conocemos en nuestro país que tienen su raíz básica en estar tan aislados’.
El Dalai Lama, quien cumple una visita de Estado por México, subrayó que, consecuentemente, ‘eso creo que para todos los países, y en particular en este caso para México, que esta aislado geográficamente de otros países, y aunque conoce lo que sucede en los países vecinos, desconoce qué pasa más lejos’.
Ejemplificó al decir que en México se tienen noticias del acontecer en naciones como Estados Unidos o Argentina. ‘Esas noticias seguramente ustedes las conocen, pero quizá conocen poco de lo que sucede en África y en otras partes del mundo’, enfatizó en la que es su tercera visita al país.
‘Qué está sucediendo, cuáles son las causas que dan lugar a las situaciones que se están viviendo en esos países es importante, por eso creo que es necesario tener un conocimiento de lo que pasa en todo el mundo, que cada vez se achica más desde el punto de vista económico y ecológico’, advirtió enseguida.
Consecuencia de lo anterior, agradeció a los organizadores y a la gente que ha contribuido a esa exhibición del Tíbet y de los acontecimientos que ahí suceden en estos tiempos. ‘Como saben, esta es una visita corta y el programa muy ajustado; ya me tengo que ir, nuevamente les agradezco’, concluyó sonriente.
La exposición ‘Tíbet: Recuerdos de la patria perdida’ fue abierta hoy y permanecerá hasta el 13 de noviembre en el Museo Memoria y Tolerancia de esta ciudad. Ahí se refiere que en 1949, China invadió el Tíbet y con ello, llegó a su fin el esplendor de la civilización clásica tibetana.
Poco después, el Dalai Lama, líder espiritual y temporal del Tíbet, huyó al exilio a India, seguido por más de 100 mil tibetanos.
Un sexto de la población, 1.2 millones de personas, murieron como consecuencia de la ocupación militar, víctima de enfrentamientos, hambrunas, ejecuciones y campos de trabajo forzado.
La ocupación llegó acompañada de políticas destinadas a destruir la identidad y la forma de vida tradicional tibetana. Más de seis mil 200 monasterios, corazón de la herencia cultural y espiritual del país, fueron destruidos. La gran mayoría de sus tesoros artísticos y literarios han sido quemados o saqueados.
La política de transferencia de población china a la zona, ha convertido a los tibetanos en minoría dentro de su propia tierra, trabajando al servicio de los nuevos migrantes. Esto, aunado a la continua violación de los derechos humanos, obliga a los tibetanos a huir de su de su tierra natal, por la cordillera del Himalaya.
El Dalai Lama, líder espiritual de los tibetanos en el exilio, de 76 años, se ha visto en los últimos años aquejado de problemas de salud, lo que le ha obligado a relajar su agenda oficial, aunque aún son habituales sus viajes al extranjero, reuniones con mandatarios y bastantes seminarios de filosofía budista.
Hoy, el Nobel de la Paz 1989 inauguró la exposición ‘Tíbet: Recuerdos de la patria perdida’ y posteriormente participó en la actividad ‘Consejos de un amigo espiritual’, en el Teatro Metropólitan. Este domingo asistirá al Estadio Azul y por la tarde tendrá una reunión privada con maestros para compartir su filosofía educativa.
CON INFORMACIÓN DE CASA TIBET MEXICO.COM. NO TE PERDAS EL VIDEO RELATIVO AL EVENTO QUE PRESENTAREMOS PROXIMAMENTE.
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