“Hay que aprovechar este momento para relanzar las negociaciones”: Gabriela Shalev; ex embajadora israelí en la ONU

EL MUNDO.ES

El que fuera uno de los diplomáticos israelíes más importantes, Abba Eban, declaró en su día que la “ONU puede aprobar por gran mayoría que la Tierra es plana si eso ayuda a los intereses de los enemigos de Israel”. El Gobierno de Benjamín Netanyahu recurre este miércoles a estas palabras ante la petición palestina de un Estado de pleno derecho en la ONU.

En una entrevista a ELMUNDO.ES, la ex embajadora israelí en la ONU, la profesora Gabriela Shalev, confiesa su preocupación por estar “en el punto más bajo de la deslegitimación de Israel. A nivel de la ONU, peor no se puede estar y se podría equiparar con el año 1975 cuando Haim Herzog rompió el papel de la infame resolución que comparaba sionismo y racismo. Lo positivo es que de aquí sólo se puede mejorar”.

¿Quién tiene la culpa del estancamiento del proceso de paz y la iniciativa palestina que han conducido a este laberinto diplomático?

“Todos somos culpables. No comparto la opinión de algunos israelíes que culpan siempre de todo a Israel pero tampoco estoy de acuerdo con mi Gobierno que afirma que toda la culpa es de la otra parte. Nosotros no hemos estado bien pero los palestinos huyen de las negociaciones y no quieren llegar a un acuerdo. EEUU también ha cometido errores”, nos contesta Shalev.

Esta académica opina que “los palestinos han conseguido con una diplomacia muy astuta convertir su cuestión y su dolor en lo único que trata la ONU. Hay violaciones de derechos humanos en todo el mundo, represión de Siria, Libia, revueltas en la región, Irán se nucleariza, hambruna, numerosos contenciosos, etc., pero parece que lo único que preocupa al mundo es el conflicto entre israelíes y palestinos”.

Sus dos años (2008-2010) como embajadora en la sede de Nueva York fueron muy intensos. “En la ONU sentí una hipocresía muy grande. En la tribuna escuchabas discursos radicales contra Israel pero por otro, embajadores de países amigos y de aquellos que no mantenemos relaciones, incluyendo árabes, me decían en privado que apreciaban Israel por ser una democracia, con grandes avances tecnológicos, científicos, etc.”.

Pero Shalev no está de acuerdo con el desprecio que muchos israelíes sienten hacia la ONU. “No es un organismo perfecto pero no se puede vivir sin él. Es el Parlamento del mundo y es muy importante que escuchen tu voz”, sostiene.

Cuando le preguntamos por su ministro de Exteriores Avigdor Lieberman, es mucho más cautelosa que en sus entrevistas en Israel donde le critica sin reparos definiendo su nombramiento como “error”. “Israel habla con dos voces. Por un lado, Netanyahu en el discurso de Bar Ilan aceptó la creación de un Estado palestino. Por otro, Lieberman intervino en la ONU con un mensaje completamente diferente. Es un grave problema. La mayoría de los israelíes desea la solución de dos Estados para dos pueblos y está dispuesta a ceder para esta fórmula adoptada por Obama”.

Un Obama que se moviliza contra la iniciativa palestina pese a su profundo malestar hacia Netanyahu. Shalev cree que “no hay crisis pero debemos siempre reforzar la alianza con EEUU. La intervención del presidente Obama salvando la vida de seis israelíes atrapados en nuestra atacada embajada en El Cairo refleja su importancia. Israel no tiene en el mundo un amigo tan cercano como EEUU. No debemos arrastrarle a que esté aislada con Israel y por eso espero que no tenga que usar el veto”.

¿Los palestinos tendrán mayoría en el Consejo de Seguridad?

“Cada día hay novedades, y algunos países aún no saben qué hacer. Hay mucho doble juego, países que dicen a las dos partes la misma cosa. Incluso si tienen mayoría, el veto de EEUU lo abortará. En cualquier caso, no es un proceso rápido y en ese plazo de tiempo hay que aprovechar para relanzar las negociaciones directas.