El pianista Fazil Say podría ser condenado a quince años por insultar al islam

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«La democracia no significa libertad para insultar. Fazil Say insulta a todos los creyentes con todo tipo de insultos, uno tras otro», asegura Sinem Tezyapar, presentadora de televisión y portavoz de la organización de Harun Yahya, un conocido predicador turco famoso por sus ideas creacionistas. Este grupo ha saltado a la palestra después de que dos de sus miembros hayan conseguido llevar a juicio al pianista turco Fazil Say por «ofender los sentimientos religiosos del pueblo».

La acusación fue formulada tras unos comentarios realizados por Say en su cuenta de Twitter, en los que se declaraba ateo, se burlaba de un muecín llamando a la oración, o citaba los versos del poeta persa Omar Jayam, que comparan el paraíso musulmán con un prostíbulo: «Dicen que sus ríos fluyen con vino. ¿Será que el Jardín del Edén es un bar? Dicen que cada creyente tendrá dos huríes. ¿Será que el Jardín del Edén es un burdel?».

Para sorpresa de muchos, un tribunal de Estambul admitió a trámite la denuncia el pasado abril. A pesar de que en Turquía no existen leyes contra la blasfemia, el pianista ha sido acusado bajo el artículo 216 del Código Penal turco, que castiga la incitación al odio por motivos raciales de clase o religiosos, y el insulto a «los valores religiosos de un sector importante de la población», según fuentes jurídicas consultadas por ABC. Además, la fiscalía invoca el artículo 218, que duplica la pena para este delito si ha sido realizado a través de un medio de comunicación, por lo que pide para Say un total de quince años de cárcel. El proceso se inició la semana pasada en Estambul.

Harun Yahya –cuyo nombre verdadero es Adnan Oktar- es el creador de la Fundación de Investigación de Ciencias, una institución religiosa privada dedicada a refutar el darwinismo y a propagar la interpretación de Yahya sobre el islam. Su organización es considerada una secta por algunos (el Partido Justicia y Desarrollo de Erdogán, por ejemplo, evita todo contacto con ella), a pesar de lo cual goza de cierta influencia en Turquía y Oriente Medio. Oktar ha escrito títulos como «El engaño del evolucionismo» o «El darwinismo social, el arma de los opresores», e incluso tiene su propia página web en sesenta idiomas, entre ellos el español. https://www.harunyahya.es/

«Somos muy meticulosos en lo que respecta a la religión y los valores sagrados», asegura la portavoz de la organización en un comunicado. «La razón por la que Fazil Say ha sido llevado a juicio es porque está incitando al público al odio y la enemistad. Esta situación ya ha causado la polarización en el público y arruinado la paz social», insiste, asegurando que no se trata de penalizar el ateísmo de Say.

«Esta persona no está siendo juzgada porque es atea o declare su descreimiento. La razón es que está provocando a la sociedad hacia la hostilidad con sus insultos», afirma.

En defensa del pianista –uno de los mejores del mundo, que ha tocado con las Orquestas Filarmónicas de Nueva York, Israel y San Petersburgo, y las Sinfónicas de Baltimore y Tokio, entre otras muchas- han salido numerosos intelectuales turcos, entre ellos el conocido escultor Mehmek Aksoy. «Hoy, este tribunal no está juzgando a Say sino a Jayam. Él escribió estos poemas hace 800 años, pero nunca fue juzgado por ello en su época. Tras nueve siglos, es muy triste ver este deterioro de la libertad de expresión», declaró Aksoy al diario «Hürriyet Daily News» en la puerta del tribunal. La siguiente sesión del juicio tendrá lugar el próximo 18 de febrero.