Los funcionarios de seguridad dieron el visto bueno para buscar cuentas de correo electrónico de los viajeros “sospechosos” a pesar de la petición sobre la invasión de la privacidad consigna el períodico inglés The Guardian.
Israel cuenta con poderes para inspeccionar las cuentas de correo de viajeros por parte de los oficiales de seguridad con o sin permiso y sin las contraseñas de la demanda.
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La Agencia de seguridad interna de Israel ha sido autorizado a exigir “sospechosos” los viajeros extranjeros abren sus cuentas personales de correo electrónico para su inspección en la entrada al país.
Funcionarios del Shin Bet ha dado su aprobación para tal acción en lo que ellos consideran como casos excepcionales por parte de Israel, el fiscal general, Yehuda Weinstein, a pesar de una petición de anular la medida por un importante grupo de derechos civiles.
“La amenaza de la utilización de los ciudadanos extranjeros con fines terroristas es una tendencia cada vez mayor”, dijo Nadim avod, abogado en la oficina del fiscal general. “Búsqueda de una cuenta de correo electrónico debe ser llevado a cabo sólo en casos excepcionales después sospechosa o pertinentes se ha identificado.”
Sin embargo, el examen de las cuentas de correo electrónico debe llevarse a cabo en presencia de la persona.
La autorización llegó a permitir que oficiales de seguridad de las contraseñas de demanda u otra información que permita a cuentas de correo electrónico para tener acceso a los agentes del Shin Bet.
Los correos electrónicos pueden ser examinados para información incriminatoria, que puede ser relevante para la seguridad pública o nacional, escribió avod. Los viajeros extranjeros pueden negarse a cooperar, pero se le puede negar la entrada como resultado.
La aprobación del fiscal general de la medida sigue a una denuncia presentada por la Asociación de Derechos Civiles en Israel (ACRI), basado en informes de los medios de los individuos que se solicita a revelar correspondencia por correo electrónico durante el interrogatorio en el aeropuerto de Ben Gurion.
Un caso reportado por Associated Press en cuestión Sandra Tamari, de 42 años de edad, ciudadano estadounidense de origen palestino, que era sospechoso de ser un activista pro-palestino. Tamari se negó a dar a los funcionarios del Shin Bet acceso a su cuenta de correo electrónico y se le negó la entrada a Israel.
Lila Margalit, abogado de ACRI, dijo: “Consentimiento”, dada bajo la amenaza de ser deportados, no puede servir de base para una invasión tan drástica de la privacidad en el mundo actual, el acceso a la cuenta de correo electrónico de una persona es semejante a acceder a sus pensamientos más íntimos y sus vidas personales. Permitir que los agentes de seguridad adopten las medidas invasivas a su propia discreción y sobre la base del consentimiento endeble no es digno de una democracia “.
La seguridad en el aeropuerto de Ben Gurion es notoriamente rigurosa. Los pasajeros son interrogados rutinariamente en el propósito de su visita, el equipaje se busca con frecuencia a mano y algunos viajeros se ven obligados a someterse a un registro corporal.
Fuente:impulsobaires.com.ar
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