Cómo la Unión Europea agarró desprevenido a Israel

Un alto funcionario israelí calificó de “terremoto” las nuevas directrices de la Unión Europea- que condicionan futuros acuerdos de la UE con Israel sobre el reconocimiento de este último de que Cisjordania, Jerusalén Este y los Altos del Golán son territorios “ocupados”.

Las directrices, que fueron elaboradas por la Comisión Europea, se publicarán oficialmente el viernes. Haaretz reveló el martes que el documento se distribuyó hace dos semanas entre todas las instituciones de la UE: fundaciones, fondos de inversión y organizaciones de ayuda; así como a los 28 estados miembros de la UE. Entrarán en vigor el 1º de enero.

En una respuesta mordaz, el primer ministro Benjamin Netanyahu dijo: “No vamos a aceptar edictos externos acerca de nuestras fronteras.” La mayoría de los ministros del gabinete fueron tomados por sorpresa. El ministro de Economía Naftali Bennett calificó la decisión como un “ataque terrorista económico.” El ministro de Finanzas Yair Lapid dijo que era “lamentable e inoportuna”, y añadió, “cada día que Israel no está negociando, se perjudica aún más su posición internacional.” Mientras tanto, Shelly Yacimovich, que preside la oposición, pidió una inmediata reanudación de las conversaciones.

Un alto funcionario del Ministerio de Relaciones Exteriores dijo que la información (de que la UE planea emitir nuevas directrices) alcanzó el ministerio hace 10 días, cuando el jefe de la Subdivisión de Oriente Medio del Servicio del Exterior de la UE, Christian Berger, llamó al embajador de Israel ante la UE, David Walzer, le informó de la medida, y sugirió la realización de charlas sobre el asunto antes del 19 de julio. Esto es, cuando se haga la publicación oficial de las mismas.
Walzer informó de la noticia a la Cancillería y los contactos diplomáticos se pusieron en marcha para tratar de entender el significado del movimiento y las características específicas de las directrices.

Tras la publicación del informe, un alto funcionario del gobierno de EE.UU. que participan en los intentos por reanudar las conversaciones de paz entre Israel y los palestinos, advirtió que si los esfuerzos del Secretario de Estado John Kerry para reiniciar las conversaciones fracasaran, los países de la UE adoptarían medidas adicionales contra los asentamientos en Cisjordania y Jerusalén oriental.

“Los europeos nos están dando tiempo de completar los esfuerzos para reanudar las conversaciones”, dijo el funcionario, que habló bajo condición de anonimato. “Pero si no tenemos éxito, querrán ir en otra dirección y tomar medidas. Los israelíes lo saben muy bien “.

Una fuente del Ministerio de Relaciones Exteriores dijo que la información inicial del embajador de la UE habló de directrices que inserten una “cláusula territorial”- acuerdos que obliguen a Israel a reconocer que no es soberano en los territorios más allá de la Línea Verde. “Pero ellos lo habían dicho antes, y no sabíamos exactamente lo que quería decir”, dijo el funcionario.

Sólo una semana más tarde, la gravedad de la situación se hizo patente ante los diplomáticos israelíes. El lunes, un documento preliminar esbozando las consecuencias de las nuevas directrices aterrizó en el escritorio del vicecanciller Zeev Elkin, en el cual se mostraron mucho más detalles prácticos.

Después de leer el documento, Elkin inmediatamente se lo envió a Netanyahu. Según el alto funcionario del Ministerio de Relaciones Exteriores, Netanyahu estaba en shock.

“Sólo tres semanas antes se había reunido con el ministro de Exteriores de la UE, Catherine Ashton, y ella no dijo una palabra sobre este movimiento”, dijo el funcionario. “En retrospectiva, no está claro hasta qué punto incluso Ashton estaba enterada.”

El funcionario agregó que Netanyahu estaba particularmente sorprendido porque Ashton había accedido a la petición de Netanyahu de evitar la emisión de una declaración sobre el proceso de paz de los cancilleres de la UE a finales de junio, a fin de no poner en peligro los esfuerzos de Kerry para reanudar conversaciones.

“Creemos que esta medida [las directrices] es el resultado del trabajo de los burócratas de la UE que trabajan debajo del radar de las autoridades diplomáticas”, dijo el funcionario del Ministerio de Relaciones Exteriores.

Reunión extraordinaria

Netanyahu dijo que tenía la intención de celebrar una reunión sobre el tema el miércoles por la mañana, pero después de que el informe del martes apareció en Haaretz, Netanyahu decidió celebrar una reunión de emergencia la noche del martes, en su despacho.

Dos funcionarios de alto rango que estaban presentes dijeron a Haaretz que, durante el debate, los representantes de los ministerios declararon que, en esta etapa, no había manera de dar una estimación precisa de los daños económicos que la empresa privada israelí y estatal podrían sufrir. Sin embargo, todos los profesionales que asistieron a la reunión, dijo que si las normas entren en vigor, sus consecuencias podrían ser muy graves y perjudiciales para la economía, la ciencia, la cultura, el deporte y muchas otras áreas.

El principal problema que se presentó en la reunión fue el tema de las conexiones indirectas que las empresas israelíes, como los bancos y las grandes empresas, tienen con los asentamientos. Se teme que la UE, en uso de las nuevas directrices, deje de cooperar con los bancos, los supermercados y las grandes empresas en Israel que tienen sucursales más allá de la Línea Verde, o que participen en proyectos en los asentamientos. Las empresas de construcción e infraestructuras israelíes podrían sufrir aún mayor daño.

Bennett y Elkin adoptaron una línea muy dura, pidiendo una respuesta fuerte a la Unión Europea. Sugirieron que Netanyahu presentara a la UE un ultimátum: si se aplican las directrices, Israel prohibiría a la UE operar en Cisjordania, congelaría sus proyectos en la zona C, y no la incluiría en el proceso de paz. Livni dijo, durante la reunión, que Israel no debería tomar medidas extremas que puedan sabotear los esfuerzos de Kerry. “La única manera de neutralizar estas medidas europeas es reanudar el proceso de paz.” Netanyahu también se opuso a la escalada, diciendo que el asunto debe ser contenido: “No olvidemos que necesitamos a Europa para asuntos delicados de seguridad y en particular en relación con el programa nuclear de Irán”, dijo a Bennett y Elkin.

La reunión terminó con un acuerdo para tratar de retrasar la publicación oficial de las directrices, que es para el 1 de enero. Se decidió que Netanyahu llamaría a Ashton y le pediría posponer la fecha de publicación de las directrices a una fecha posterior –así como comenzar conversaciones diplomáticas sobre el tema. Un alto funcionario del Ministerio de Relaciones Exteriores dijo que Netanyahu tenía previsto explicar a Ashton que, si se publican las directrices, el Primer Ministro estaría bajo presión política interior de no hacer movimiento alguno hacia los palestinos, lo que perjudicaría los esfuerzos para reanudar las conversaciones.

Fuente: Haaretz. Traducción May Samra

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