Los palestinos abrazan al Barça en su gira de paz

SAL EMERGUI

La semana que empezó con la reanudación del proceso de paz entre israelíes y palestinos acaba con un evento que los niños de ambos pueblos esperaban con mucha más ansia: La llegada del Barcelona, con su firmamento de estrellas al completo. Una minigira de paz que este fin de semana une a las dos partes en conflicto. Al menos no discuten sobre sus ídolos del balón como Messi, Neymar, Xavi o Iniesta.

“Estoy muy contento de estar aquí. Es algo que he esperado mucho tiempo. Vengo con toda mi familia porque es algo también muy importante para ellos”, ha afirmado Neymar al Canal 5, la principal cadena israelí de deportes que realiza un destacado despliegue para seguir a uno de los equipos de la casa.

Tras aterrizar al mediodía en el aeropuerto Ben Gurion, cerca de Tel Aviv, el Barça se ha dirigido al prestigioso Hotel Inbal de Jerusalén, su cuartel general en Tierra Santa. Posteriormente, la delegación catalana formada por más de un centenar de personas y encabezada por el presidente Sandro Rosell y el nuevo entrenador, Gerardo ‘Tata’ Martino, ha viajado a la ciudad cisjordana de Belén donde ha visitado la Basílica de la Natividad y se ha reunido con el presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Abu Mazen y el jefe de la Federación palestina de fútbol, el ex general Jibril Rajub.

‘Para que todos puedan jugar juntos’

“Es un momento histórico para el pueblo palestino. Es un gran paso para que todos puedan jugar juntos. Cuando tengamos nuestro estado independiente jugaremos el primer partido ante el Barcelona. Os queremos mucho. Gracias, presidente Rosell”, dijo Rajub mientras el dirigente azulgrana respondió: “Agradecemos el calor del pueblo palestino. A todos los
niños que hemos visto que son del Barça. El club hará todo lo posible para ayudar a la solución de este conflicto”.

“¡Messi, Messi!” gritaba un grupo de niños palestinos cerca de la Basílica de la Natividad en la que los jerarcas religiosos se han peleado por una foto con Messi. El astro argentino parecía perdido entre los tradicionales flashes y los rápidos clics de los numerosos ‘smartphones’ que han llenado este lugar sagrado para el cristianismo.

“Alucino con que estén aquí”, dice a ELMUNDO.es una palestina en medio de una algarabía digna de las mejores ocasiones. Incluso agentes de la seguridad palestina no han dudado en acercarse a los jugadores y hacerse la soñada foto. Si en Belén el caos fue importante, en Hebrón la palabra es éxtasis.

Cita con Peres

Concretamente en la localidad de Dura, cerca de Hebrón, se preparan desde hace semanas para este momento. Más de 20.000 personas llenan el Estadio de Dura para presenciar los juegos de sus ídolos con varias decenas de niños. El Barça se puede sentir en casa ante la cantidad de banderas azulgranas desplegadas en las calles palestinas. Más allá del equipo catalán, el joven cantante palestino Mohamed Assaf —flamante vencedor del Arab Idol— ha acaparado toda la atención.

Este domingo, será el turno de “la agenda israelí” con la visita al Muro de las Lamentaciones de Jerusalén que se llenará de fieles y aficionados para ver de cerca a los profetas del balón. Después, visitarán la sede presidencial de Israel donde Shimón Peres, que el viernes cumplió 90 años, les espera. Pese a su edad, su ritmo frenético es superior al de cualquier jugador de élite. El Centro Peres por la Paz es uno de los organizadores de esta visita que en un principio tenía como objetivo un partido del Barça contra un combinado de jugadores locales.

Por la tarde, llegará el momento más esperado en Israel, cuando más de 13.000 niños y niñas esperarán en el Estadio Bloomfield, en el sur de Tel Aviv. El ministerio de Educación aprovecha la llegada del Barça para lanzar su campaña ‘El otro soy yo’ a favor de la convivencia, tolerancia y paz. Antes de celebrar un breve entrenamiento, los jugadores impartirán un clínic para niños israelíes y palestinos en el cuidado césped del campo que suele utilizar el Maccabi de Tel Aviv que tiene como director deportivo a Jordi Cruyff. “Si hay algo que tienen en común israelíes y palestinos es que son del Barça. En eso están de acuerdo”, afirmó Rosell en la víspera al viaje a Tierra Santa.

Fuente:elmundo.es