Después del Premio a la Mejor Jalá del Mundo

ENRIQUE RIVERA PARA ENLACE JUDÍO

En una ocasión leía un artículo que me llamó mucho la atención: El hombre que sobrevivió al Premio Nobel. El escrito versaba acerca de la vida de uno de los escritores latinos más importantes del pasado y del presente siglo: Gabriel García Márquez. Hacía referencia al hecho de que después de haber obtenido semejante galardón, continúo escribiendo y brindando al mundo obras dignas de leerse.

Salvando todas las diferencias, el entrevistar nuevamente a Sara Briman, quien obtuvo hace unos meses la distinción del The American Academy of Hospitality Sciences, Star Diamond Awar, por la Mejor Jalá del Mundo, me hizo recordar al gran “Gabo” (perdón por las confiancitas), al preguntarle qué había hecho desde entonces.

-“Sigo haciendo Jalot”, señaló con cierta modestia.

Efectivamente, Sarita continúa haciendo Jalot y dando conferencias, especialmente en el extranjero, donde la han llamado y se ha reunido con mujeres, con quienes conversa y se retroalimenta, acerca de la importancia de la elaboración de este alimento ritual, el cual ha acompañado por siglos a los judíos de todo el mundo.

A Sarita la encontramos horneando un pedido de Jalot especial: se trata de las redondas y dulces, las cuales acompañan las mesas de las Fiestas Mayores, es decir Rosh Hashaná y Yom Kippur.

Al despedirnos, Sarita resaltó la importancia de que cada mujer judía elabore su Jalá y reúna en torno a ella a su familia. Por último, expresó su deseo de que este año nuevo que se aproxima sea: “Redondo y dulce, como las Jalot tradicionales de las Fiestas Mayores.

Muchas Felicidades y que continúe con su labor de difusión de la tradición judía.