Dos mujeres excepcionales fueron ponentes de la reunión APEIM ( Asociacion de Escritores y periodistas Israelitas de México) de octubre, en la que escuchamos la experiencia de una poeta y periodista judía quien iniciara labores hace 40 años; así como los dilemas femeninos de una generación después.
APEIM quiere hacer una invitación a los amantes de la pluma para se unan a nuestra Asociación (donde les expediremos una credencial de prensa) y nos acompañen cada mes a nuestras reuniones en Polanco ( informes al 52803908).
Qué ganamos y qué perdimos con el feminismo, por qué la convivencia se ha convertido en una guerra de los sexos o una secesión, cómo restablecer el puente entre hombres y mujeres que aparentemente se rompió con la liberación femenina… son algunas de las muchas preguntas que planteó Esther Charabati:
“Tienen razón, se han perdido muchas cosas, se ha perdido una forma de vida donde cada uno tenía su lugar y sus funciones predestinados. Se ha perdido la claridad y los roles fijos. Hoy todos le entramos a todo. Durante una eternidad las mujeres se quejaron de su papel pasivo que las obligaba a esperar a que los hombres decidieran conquistarlas. Hoy, que finalmente podemos tomar la iniciativa sin ser consideradas mujeres fáciles, nos quejamos del rechazo, que era una experiencia cotidiana casi exclusiva del sexo masculino. ¿Qué pensamos? ¿Qué era posible tomar el papel de conquistadoras sin sufrir reveses? ¿Qué cada vez que pretendiéramos seducir a un hombre lo íbamos a lograr? Qué ilusas hemos sido”.
A su vez, Malke Tartakovsky relató su experiencia de escritora, la cual no parecía prometedora cuando se casó a los 17 años:
“Mi esposo Yuri fue quien me obsequió el primer diccionario de sinónimos, una máquina de escribir eléctrica, y la computadora, mientras de nuestros tiempos, su profesión de Ingeniero Civil, y mis letras, procreamos dos hijos.
A su vez, Del tiempo surgieron recitales en diversas Comunidades, Delegaciones y Estados de la República, publicaciones en revistas comunitarias, que entre episodios, me hicieron amar más a los humanos.
El periódico “El Ciudadano” también ocupó mi espacio, “Excélsior” (Secciones Cultural y Metropolitana), veinte años de aroma y consuelo, cuando de mis poetas, artistas, profesionistas, todos amigos, pudo llegar a esbozar alguna prosa.
Olvidaba escribir que en Tepito y La Lagunilla, probé del corrido su lenguaje, por ello, he retomado aquél, de mi niñez, el tiempo, entre la Biblia y mis oraciones diarias, pues conforme el paso, a veces en falso, otras difícil de mi tiempo, creo cada vez más en el Ser Omnipotente.
Gracias a Él, mis guiones cinematográficos, un calendario con trescientos sesenta y cinco pensamientos, veintiún libros impresos con prosa, poesía y poca maña, ingenuidad, diálogos internos, monólogos de un teatro, el de la vida, también corridos mexicanos musicalizados, pues a algunos tiempos se les debe comunicar el canto.
Por ahora, procuro unir pasajes e instantes, con el dolor de haber enterrado a mi hijo, para quizás, con el tiempo, poder llegar a decir…Conocimiento, pero sobre todo paz, con la fe que me hace luchar.”
Y como muestra, un botón de la poesía de Tartakovsky, la cual nos leyó de forma magistral:
Del libro TEPIS COMPANY
EL MAL MARIDO
MANITO, CREO QUE METÍ las de andar, como que m’estoy arrepintiendo, no’stoy nada contenta, en cuatro meses que llevamos de casados, me trai el gasto cada semana y hasta me compró la sala, dizque pa’ que vívamos completos.
Nunca llega tomado, y no le sé que tenga alguna querida, me saca’pasiar todos los domingos, y no me dice no a nada.
O una de dos, manito, o mi marido es joto, o no me quiere.
PURO DOLOR Y TRIESTEZA*
NO HAY SANTO en el jacal
ni vela pa’lumbrar
no esiste la luz, ni nada…
puro dolor y tristeza.
La tierra ‘sta mojada de llanto
el pozo seco
la planta’gusanada…
¿Pa’ quén el petate y la mesa
el fogón y el metate
el maizal?…
¿Por qué buscar tus ojos en la nochi
seguir soñando con tu boca
acordarme de tus manos?…
Sólo llanto qui si oye
oscuridá en el cielo
nomás penas en el alma…
puro dolor y tristeza.
Como gurrión que no canta
dejates mi guitarra sola
afligites mis canciones…
Y escarbo la tierra
mi corazón ti averigua
sólo me queda il ricuerdo…
puro dolor y triesteza.
*Este poema obtuvo el 3er lugar en la “Justa de Poetas” de la Tesorería del Distrito Federal, Biiblioteca Guillermo Prieto, Ciudad de México, noviembre 27 de 1978.
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