Cómo traicionar a un amigo y a un aliado

JUAN JOSÉ DE LA TORRE

Pocos saben que tras su victoria electoral, Mariano Rajoy recibió una llamada del Primer Ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, que tras felicitarle, le ofreció el apoyo de Israel, promocionando la instalación en España de empresas israelíes de alta tecnología, para así ayudar a mejorar nuestra terrible situación económica.

La oferta de Netanyahu no se quedó en buenas palabras, y en poco tiempo y a través del Ministerio de Luis de Guindos, empresas israelíes comenzaron su acercamiento a España en busca de socios con los que crear empresas conjuntas de capital israelí y español. Al mismo tiempo Israel abrió la puerta a todas las empresas españolas que desearan participar en sus grandes concursos públicos, algo que algunas de ellas culminaron con gran éxito.

Pero en esto llegó la guerra de Gaza y el Gobierno de Rajoy no se limitó a adoptar la línea común de la Unión Europea, lo razonable dada su sintonía con el Gobierno de Israel, sino todo lo contrario. El Ministro de Exteriores García-Margallo, criticó con enorme dureza a Israel, obviando los ataques que durante años habían sufrido los israelíes a manos de los terroristas de Hamás.

A la vez, RTVE, la televisión pública española se convirtió en correa de transmisión de los terroristas de Hamás a través de sus informativos y aquí no vale decir que el Gobierno de Rajoy no controla RTVE, todos sabemos que nunca aparece ni una sola noticia crítica sobre el Gobierno, ni una sola, por lo tanto es evidente que cuando quieren controlar RTVE lo hacen, como lo han hecho todos los partidos en el Gobierno de España.

Traicionar la buena voluntad de un amigo que se ofrece a ayudarte pone en evidencia la miseria moral del que traiciona. Pero más allá de esto, hoy hay sobre la mesa millones en inversiones de empresas israelíes de alta tecnología en España que podrían generar miles empleos de alta calificación. También España es hoy uno de los destinos favoritos del turista israelí, tan amante de las compras y de hacer gasto en el destino.

Las traiciones siempre pasan factura y Mariano Rajoy debe estar preparado para asumir que ha estado tolerando que a través de su Ministros de Asuntos Exteriores y su televisión pública, se alimentara el antisemitismo y el odio a Israel y que si mañana todas esas inversiones israelíes, capaces de generar trabajo de alta calidad se marchan, junto a quinientos mil turistas israelíes, él será el único culpable. Al final todas las traiciones se pagan.

Fuente: El Confidencial // Juan José de la Torre es el presidente de la Asociación de Amigos de Israel