ALEXIS ANCONA PARA AGENCIA DE NOTICIAS ENLACE JUDÍO MÉXICO
Fue un rabino muy importante que acercó a muchos jóvenes a la religión. Pero lo verdaderamente interesante es el cómo lo hizo.
Pero con Carlebach fue algo distinto. Él componía canciones utilizando el Tanaj y la vida cotidiana, logrando una combinación perfecta. Por ello es considerado “el compositor religioso judío más importante del siglo XX”, y conocido como “el rabino cantante”.
Su impacto en mi vida -y supongo que en la de muchos otros- fue muy diferente al de otros rabinos. Carlebach abrió un poco más el panorama y dejó una huella diferente, se acercó a jóvenes de todo el mundo, drogadictos, personas desviadas del caminos, depresivos, etcétera, y los guió a un camino de amor y alegría, les enseñó una forma de expresarse utilizando la música y el baile.
En un vuelo rumbo a Canadá sufrió un ataque al corazón y, lamentablemente, falleció. Su cuerpo fue enviado a Israel para ser enterrado.
A pesar de su muerte, debemos recordar su vida, sus logros increíbles y el vínculo tan importante que nos dejó por medio de la música, que podemos seguir escuchándola. Debemos seguir esos pasos que van caminando hacia la vida en conjunto, y no hacia una vida en la que sólo nos preocupemos por nosotros mismos, sino una en la que veamos por otros y salgamos a caminar, brincar y volar juntos.