Alrededor de las 7:30 de la mañana del miércoles, un palestino de Tulkarem subió a un autobús de la empresa Dan en el centro de Tel Aviv y apuñaló inicialmente al conductor, quien pese a sus graves heridas, roció a su agresor con gas lacrimógeno antes de que ataque a otros pasajeros.
El conductor detuvo el autobús y abrió las puertas dejando salir a los pasajeros asustados. El atancante abandona el autobús con cuchillo en mano y comienza a huir, apuñalando a peatones que se cruzaban en su camino.
Mientras tanto, miembros de la unidad Najshón de la policía israelí que casualmente se encontraban detrás del autobús intervinieron al identificar que algo extraño sucedía. Cinco policías de la unidad abandonaron su vehículo instantáneamente e identificaron al agresor. Lo persiguieron y lograron capturarlo luego de dispararle hacia los pies y esposarlo. El joven palestino fue interrogado en la escena y posteriormente evacuado al hospital.
Los 13 heridos fueron evacuados a los hospitales de Tel Aviv. Cinco resultaron gravemente heridos, la mayoría de ellos sufren heridas profundas en la parte superior del cuerpo. Tres personas sufrieron heridas medianas, cinco fueron levemente heridos y otras personas más fueron evacuadas por ansiedad a los hospitales Ijilov y Shiba en Tel Aviv.
Kazis Matzliaj, jefe de tráfico en la empresa “Dan”, y responsable de los conductores, dijo al radio del ejercito que a las 7:27 de la mañana recibió una llamada del conductor del autobús: “Un terrorista subió al autobús, me apuñaló y siguió atacando a mis pasajeros. Tengo heridas graves, estoy sangrando. Me estoy muriendo, sálvame. Si algo me sucede, ve por mis hijos.”
Bentzi Sao, comandante de la policía de Tel Aviv, informó sobre el atentado y elogió la intervención de miembros de la unidad Najshón. Asimismo, añadió que la policía investiga si el terrorista tenía colaboradores y que junto con el servicio de seguridad Shin Bet hallarán a los que lo enviaron.
Fuente: Galei Tzahal.