“Si el judaísmo se adapta al nuevo mundo y a las nuevas tecnologías, tiene futuro”: Yuval Harari en exclusiva para Enlace Judío

AGENCIA DE NOTICIAS ENLACE JUDÍO – “De una religión de sacerdotes en templos que sacrificaban animales para que lloviera, el Judaísmo se transformó en una religión de sinagogas, de estudios, de escrituras sagradas y filosofía e intelectualismo”.

Enlace Judío tuvo la oportunidad de entrevistar al Dr. Yuval Harari, Profesor de la Universidad Hebrea de Jerusalem y que estuvo en México invitado por los Amigos Mexicanos de dicha institución. Harari  se ha convertido en una celebridad gracias a su libro “De animales a dioses: una breve historia de la humanidad”, seleccionado como el mejor libro de No Ficción en 2014.

También puede interesarte

Hamás ha dado señales de vida de algunos rehenes, dice funcionario israelí, mientras continúan las conversaciones

Por Enlace Judío

48 heridos, tres de gravedad, tras un incendio en un seminario de Jerusalén

Por Enlace Judío

Carismático, con una agilidad intelectual sorprendente, Harari nos compartió muchas de sus perspectivas y expectativas en esta entrevista, tanto para la humanidad como para Israel y el Judaísmo.

Por ejemplo, Harari rechaza que la humanidad esté en un retroceso hacia la violencia: “No estoy seguro de que nos estemos volviendo más primitivos y salvajes. Por ejemplo, hay menos violencia en el mundo actualmente que en cualquier otro momento de la historia… a comparación de cualquier periodo de la historia, ésta es la era más pacífica de todas… la historia, la información y las estadísticas nos dicen que, a pesar de las apariencias, la situación hoy en día es mucho mejor. Digamos, sólo para dar un sencillo ejemplo: vine aquí la semana pasada desde Israel; viajé desde Israel hasta México sin ninguna complicación, sin ser asesinado en el camino, sin ser secuestrado por dueños de esclavos y vendido como tal, sin haber sido asaltado en el camino. En la Edad Media o, incluso, hace unos doscientos años, un pequeño viaje implicaba riesgo; te arriesgabas a ser robado o secuestrado o asesinado. Hoy en día, puedes viajar por todo el mundo con toda seguridad”.

Luego, respecto a los conflictos entre occidente e Islam, opinó lo siguiente: “ Existen mil millones de musulmanes en el mundo; no todos ellos son terroristas de la Yihad y cuando comienzas a reaccionar de forma extrema en contra del Islam, empiezas a alienar a muchas personas que podrían ser tus aliadas. Creo que la mayor lucha con el fundamentalismo religioso en el mundo musulmán se realiza dentro de los países musulmanes y por los musulmanes moderados. Y la mayoría de las víctimas del fundamentalismo islámico es musulmana. La gran mayoría de las víctimas, el noventa y tantos por ciento de las víctimas son otros musulmanes, en Siria, en Paquistán, en Iraq, en lugares como esos. Entonces, creo que la mejor cosa que se puede hacer es, primero, mantener las cosas con perspectiva y, segundo, acercarse a los musulmanes moderados y ayudarlos a ellos en su lucha en contra de los musulmanes extremistas y tener mucho cuidado de no iniciar una guerra generalizada de una civilización occidental contra el Islam. Eso es exactamente lo que los extremistas quieren”.

Sobre el futuro de la humanidad, nos dice lo siguiente: “La clave para sobrevivir en el siglo XXI es tener una conexión buena y fuerte con la comunidad global y con el mundo. Actualmente Israel está tomando el camino opuesto, se está encerrando a sí mismo y se está volviendo más aislado y esta es una situación muy peligrosa. Israel, desde una perspectiva global, es un país muy pequeño y muy débil y no puede sobrevivir por sí solo. Si no tiene conexiones económicas fuertes y buenas con la comunidad global”.

Sobre el futuro de la humanidad planteó ideas sumamente interesantes: “Estamos viviendo una segunda Revolución Industrial, una segunda ola de tecnologías que transforman la economía, la sociedad, la política, todo. Si en el siglo XIX la raza humana aprendió a producir zapatos, ropa, máquinas y armas, en el siglo XXI aprenderemos a producir cuerpos y mentes; aprenderemos cómo producir inteligencia artificial, cómo diseñar seres vivos y cómo diseñar nuestros propios cuerpos. Esta es una gran revolución que va a suceder. Parece que pocos países vivirán y atravesarán esta segunda revolución y dominarán a aquellos países que no entienden lo que está sucediendo, que no se unen a esta revolución, que no dominan las tecnologías y, una vez más, se quedarán rezagados. Esta vez la revolución es de tan largo alcance que se asume que si no te unes a tiempo te quedarás completamente rezagado y no podrás jamás cerrar la brecha; simplemente desaparecerás. Y este es el peligro en el que se encuentra casi todo
el Medio Oriente y, tal vez, Israel también. Mientras que están peleando el uno contra el otro por cuestiones de D-os o lo que sea, en otras partes del mundo los humanos están aprendiendo a controlar y producir cuerpos y mentes e inteligencia artificial y muchas cosas más, y la brecha que se ha creado es tan grande que los países que se han quedado atrás están en peligro, no sólo de ser explotados y subyugados, sino que están en peligro de extinción”.

Finalmente, a pregunta expresa sobre la capacidad del Judaísmo para sobrevivir, opinó lo siguiente: “Porque es cambiante. Se adapta. Cada generación o cada pocas generaciones, se reinventa a sí mismo. La diferencia entre el Judaísmo hoy en día y el Judaísmo en tiempos bíblicos es enorme, casi como si fueran dos religiones completamente distintas. Actualmente, lo principal en el Judaísmo es estudiar la Torá y el Talmud y rezar. En los tiempos bíblicos, no existía el Talmud ni la Torá; no estudiaban nada… se trataba de agricultura y de sacrificar corderos y bueyes y ofrecerlos a D-os para que lloviera… después de la destrucción del templo, el Judaísmo cambió por completo. De una religión de sacerdotes en templos que sacrificaban animales para que lloviera, se transformó en una religión de sinagogas, de estudios, de escrituras sagradas y filosofía e intelectualismo… si el judaísmo continúa cambiando, evolucionando y adaptándose al nuevo mundo y a las nuevas tecnologías, sí, podría tener futuro”.