La Knesset aprueba presupuesto de 2015 a 2016 por estrecha mayoría

Los legisladores votan cientos de enmiendas presentadas por la oposición; el plan fiscal es de $ 85 mil millones para 2015, llegando a $ 89 mil millones en 2016

AGENCIA DE NOTICIAS ENLACE JUDÍO MÉXICO – Legisladores israelíes aprobaron el presupuesto de 2015 a 2016 en una segunda y tercera lectura de la Knesset durante la noche de miércoles a jueves después de varias horas de votación sobre unas 400 enmiendas presentadas por la oposición.

El presupuesto fue aprobado por una mayoría muy estrecha de 61-59 – esencialmente entre las filas de coalición de la oposición.

El ministro de Finanzas Moshe Kahlon (Kulanu) elogió el presupuesto, diciendo que “aborda los problemas fundamentales de la economía y la sociedad israelí”.

El presupuesto global para 2015 se situará en 329.5 mil millones de NIS ($ 84,650,000,000) y en 347 billones de shekels ($ 89,140,000,000) para 2016. El déficit de 2.015-2.016 se situará en el 2,9 por ciento.

Una serie de ministerios del gobierno tendrá un aumento del presupuesto, incluyendo el Ministerio de Educación, que recibirá un adicional de 6,7 mil millones de NIS, el Ministerio de Salud, que recibirá un extra de 4.600.000.000 NIS, el Ministerio de Seguridad Pública tendrá un extra de 1,7 mil millones de NIS y el Ministerio de Bienestar y Servicios Sociales verá un comparativamente modesto aumento de sus fondos de 1,3 mil millones de NIS.

Entre las reformas incluidas en el presupuesto y promocionadas por el gobierno hay una serie de planes para abrir el mercado de alimentos a una mayor competencia, acelerar el desarrollo y la planificación de los procesos para la vivienda, tasas más bajas relacionadas con los servicios financieros, incluidos los fondos de pensiones, y una controvertida reforma del gas natural.

La oposición había presentado inicialmente 32.000 enmiendas en un intento de obstruir el presupuesto y hacer caer el gobierno. Si el presupuesto no se hubiera aprobado, se habría debido celebrar nuevas elecciones al cabo de tres meses.

El comité encargado del procedimiento en la Knesset dictaminó el martes que en los últimos dos años se habían presentado un número sin precedentes de reservas al presupuesto que se consolidarían en varios cientos, agrupando las objeciones por temas.

Debido a la ruptura del anterior gobierno de Netanyahu a finales de 2014 y las posteriores elecciones de marzo, el gobierno ha estado funcionando con un presupuesto de mes a mes basado en el gasto del año anterior.

Incluida en la propuesta final está la controvertida propuesta del Ministro para el Desarrollo del Negev y Galilea Aryeh Deri de recortar el impuesto sobre las ventas del 17% en el transporte público. Se había comprometido a reducir el impuesto a los productos alimenticios básicos durante la campaña electoral, pero se vio obligado a abandonar la propuesta por la oposición del Ministerio de Finanzas. En su lugar, exigió que el recorte se introduzca en el transporte público.

Otro punto de discusión fue la asignación para las necesidades de defensa presentada por funcionarios de los Ministerios de Hacienda y de Defensa.

El acuerdo final, un compromiso entre los 54 billones de shekels ($ 13,800,000,000) ofrecido por funcionarios del Ministerio de Hacienda y los 62 billones de shekels ($ 15,800,000,000) solicitado por los militares, incluye disposiciones para comenzar a implementar cambios estructurales en las Fuerzas de Defensa de Israel, a cambio de un extra de 3 mil millones de NIS ($ 770 millones) a transferir durante el año. Otros mil millones de NIS ($ 260 millones) se han de trasladar al presupuesto de Defensa para dar cuenta de los aumentos de precios y la inflación, con lo que la suma total potencial asciende a 60,1 billones de shekels ($ 15,470,000,000).

Netanyahu elogió la propuesta final en la reunión de gabinete del domingo diciendo que “mantiene un marco macroeconómico adecuado, responsable de Israel, pero también añade miles de millones a la educación, el bienestar y la salud, y se acompaña de reformas muy importantes para bajar el costo de la vida, simplificar nuestra burocracia y avanzar en la economía israelí”.

La votación del miércoles tuvo un comienzo accidentado con dificultades técnicas aparentes, y un número de legisladores que votaron mal, un asunto costoso considerando la mayoría de 61-59 de la coalición.

El ministro de Agricultura Uri Ariel en un momento votó en sentido contrario por una enmienda, causando un empate, lo que obligó a la Comisión de Finanzas de la Knesset a llamar a una reunión para discutir la enmienda, provocando un retraso en la actividad de la Knesset.

Después que el presidente del Comité Moshe Gafni intentara vetar cualquier discusión en la reunión, el látigo de la oposición Merav Michaeli escribió una carta al presidente de la Knesset Yuli Edelstein, aunque accidentalmente firmó en su nombre como látigo de la coalición.

En cierto momento de la votación se captó a Netanyahu dormitando, emitiendo un voto equivocado antes de revertirlo rápidamente.

Previamente Edelstein ordenó una nueva votación después que una enmienda del MK por Unión Sionista Stav Shaffir pasara 47-43. El portavoz de la Knesset instruyó al equipo técnico de la Knesset que examinara el sistema, ya que el número de votos no sumaba 120.

Edelstein ordenó una nueva votación, lo que provocó fuertes críticas de la oposición, que insistió en que el sistema estaba funcionando bien.

“No se puede tener otra votación porque no te guste el resultado”, dijo  MK de Unión Sionista Shelly Yachimovich.

Fuente: The Times of Israel/ Raoul Wootliff y Marissa Newman

Edita: Silvia Schnessel para Enlace Judío México

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