La aspirante a candidata presidencial demócrata Hillary Clinton criticó al favorito de los republicanos Donald Trump, acusándolo de no comprometerse con Israel mientras se dirigía al principal encuentro anual de la comunidad americana pro-israelí este lunes.
ESTI PELED PARA AGENCIA DE NOTICIAS ENLACE JUDÍO MÉXICO – Clinton criticó la conducta del empresario multimillonario en la campaña electoral, así como su promesa de permanecer “neutral” en torno al conflicto israelí-palestino, diciendo que si es así, él “no tiene nada que hacer como presidente”.
“No se puede ser neutral el lunes, pro-Israel el martes y D-os sabe qué el miércoles,” dijo a la multitud en la conferencia anual del Comité de Asuntos Públicos Estadounidense Israelí en Washington.
En el campo de deportes del Centro Verizon Center, Clinton atacó a Donald Trump por su llamado para prohibir temporalmente la entrada de los musulmanes a Estados Unidos, criticó su retórica divisiva hacia los inmigrantes, su indecisión de rechazar a la supremacía blanca que apoya su candidatura y la reciente escalada de la violencia en sus manifestaciones incitada sutilmente por su comportamiento hacia sus simpatizantes.
“Si notan intolerancia, reaccionen contra ella; si observan violencia, condénenla; y si ven acoso opónganse,” exclamó, instando a los presentes a reaccionar en contra de la retórica que ha inflamado la polémica campaña del magnate de bienes raíces.
Ante una audiencia de aproximadamente 18,000 personas, Clinton reafirmó su compromiso con la seguridad de Israel y en repetidas ocasiones instó a elevar la alianza entre Estados Unidos e Israel “al siguiente nivel.”
Hizo un llamamiento para negociar un memorando de entendimiento entre Washington y Jerusalem que permita aumentar la ayuda militar a Israel en los próximos 10 años y concluirlo “tan pronto como sea posible”. Prometió que si es elegida presidente, se aseguraría de que Israel mantenga su “ventaja militar cualitativa” sobre sus adversarios regionales.
Clinton reiteró su posición de impedir que Irán desarrolle un arsenal nuclear e instó a “desconfiar y verificar” asegurando que ella se mantendría alerta con respecto a las intenciones del régimen para imponer su hegemonía en el Medio Oriente.
Aseguró al público que bajo su gobierno, la administración Clinton, el régimen iraní sería castigado por la mínima violación del acuerdo nuclear y que, si es necesario, EE.UU. respondería con fuerza militar contra la República Islámica, si resulta que ha trabajado para desarrollar su programa nuclear.
Afirmó que la Unión Americana debería responder con “rapidez y firmeza” a la última prueba de misiles balísticos de Irán e imponer las sanciones necesarias.
Clinton conmovió a muchos de los asistentes al denunciar la actual ola de terrorismo en Israel y criticar a los líderes palestinos por “incitar a la violencia”, “celebrar a los terroristas” y “compensar a sus familias”.
Si bien reconoció la existencia de “obstáculos” que han causado que los israelíes sientan que no tienen un socio para la paz , insistió en que no renunciará a la esperanza de llegar a un acuerdo negociado hacia una solución de dos estados, que en su opinión es “crucial para la supervivencia de Israel como estado judío y democrático”.
Asimismo, declaró que se opone enérgicamente a cualquier intento de instituciones internacionales para “imponer soluciones”, incluida la Organización de las Naciones Unidas. Como presidente, ella apoyaría las negociaciones directas, insistió.
Ante una audiencia de 4,000 estudiantes, Clinton criticó enérgicamente la campaña de Boicot, Desinversión y Sanciones contra Israel. “Sobre todo en un momento en que el antisemitismo está en aumento, es imperativo repudiar todos los intentos de aislar y debilitar a Israel y al pueblo judío,” apuntó.
Por otra parte, elogió a los estudiantes por mantenerse al “frente” de la lucha contra el BDS, y los alentó a “seguir hablando” y no permitir que sus voces sean silenciadas.
En lo que probablemente fue un intento de distinguir entre su enfoque del manejo de las relaciones entre Estados Unidos e Israel y el del presidente Barack Obama, señaló que ella optaría por manejar las diferencias entre aliados “con respeto” e indicó que mantendría tales diferencias a puerta cerrada, un enfoque de política que es más típico de su marido, el ex presidente Bill Clinton, que de Obama.
De hecho, afirmó que de ser elegida, una de sus primeras acciones serían invitar al primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu a la Casa Blanca.
Clinton, quien actualmente disfruta de una ventaja significativa en las primarias demócratas, destacó sus lazos emocionales con el Estado Judío, expresando además su creencia de que tal convicción debe ser parte del próximo presidente de Estados Unidos. “Nuestro próximo presidente debe tener un profundo compromiso personal para el futuro de Israel,” puntualizó.
Fuente: The Times of Israel / Eric Cortalessa
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