Asesino de Niza se tomó selfie en el camión que usó como arma

FLORA DRURY / Mohamed Bouhlel, el terrorista responsable de la muerte de 84 personas el pasado 14 de julio, Día de la Bastilla, en Niza, Francia, se tomó una serie de selfies en la cabina de su camión antes de cometer el horrible asesinato en masa que sacudió al mundo entero.

ENLACE JUDÍO MÉXICO -En la primera imagen, del 12 de julio, dos días antes de la masacre, se le ve sentado con un amigo en la cabina del tráiler de 19 toneladas, con la mano hace un gesto obsceno.

La segunda imagen lo muestra sonriente, de pie junto a otro hombre, y en la imagen también se ve el tráiler que, menos fe 24 horas después, usaría para asesinar a decenas de personas, entre ellos 10 niños. Se dice que Bouhlel, padre de tres hijos y fanático del gimnasio, quien usaba sitios de citas en línea y era amante de un hombre de 73 años, le envió esas fotos a su familia en Túnez antes del ataque.

No queda claro si el hombre que lo acompaña en las fotos es su cómplice, pero una fuente cercana a la investigación ha dicho que se encuentra “en custodia” de las autoridades. La policía antiterrorismo francesa recuperó estas fotos del teléfono celular del aesino después de que este fuera abatido tras el crimen.

“Las fotos son parte de la evidencia. Su teléfono está lleno de fotos similares”. En la fotografía del 12 de julio, día en que comenzó a vigilar el Promenade des Anglais, Bouhlel usaba una camisa a cuadros blanco y negro. La segunda foto, tomada unas horas antes del ataque, lo muestra con una gran sonrisa.

Las fotografías fueron filtradas a TF1, un canal privado de la televisión francesa y uno de los más vistos en Europa. Las imágenes se publicaron después de que detectives franceses entrevistaron al amante gay del asesino, donde reveló que este era un “maniaco sexual” y un “sádico bisexual ultraviolento”.

El terrorista le dijo a un amigo que veía con frecuencia videos en línea de ISIS decapitando rehenes, y los detectives reportan haber encontrado imágenes muy violentas de cadáveres en su computadora.

Bouhlel también veía sitios con imágenes de violencia sexual, así como propaganda e imágenes gráficas de tortura y decapitaciones. Un primo suyo lo describió como un ‘extraño jihadi’ que bebía alcohol, consumía drogas, comía cerdo y nunca iba a la mezquita.

Se ha revelado que su esposa, de quien estaba separado, planeaba asistir al espectáculo de fuegos arrtificiales, pero que decidió no hacerlo en el último momento, citando “razones personales”. Tanto su esposa como la madre de esta habían sido víctimas de violencia familiar.

El teléfono también ha revelado algunos detalles sobre la preparación del ataque, ‘Trae más armas. Llevo cinco’, dice un texto, mientras que otro dice, “Está bien. Yo tengo equipo”. El último mensaje fue enviado a las 10:27 pm a uno de los hombres que ahora se encuentran en custodia policiaca. El mensaje terminaba con las palabras, “Llevo cinco a C”.

La mayoría de los detenidos habían estado en contacto con Bouhlel en varias ocasiones, añadió la fuente. Una de las teorías es que Bouhlel tanía “la intención de cometer suicidio” y habría planeado su muerte al estilo de un ataque terrorista.

Esta teoría se apoya en información obtenida de los detenidos, entre quienes se cuenta Ramzie Arifa, de 22 años, quien habló con Bouhlel antes del ataque. Uno de los policías que le dispararon a Bouhlel también habló por primera vez tras la tragedia.

“Estaba completamente seguro de lo que estaba ocurriendo. Vi una sombra emerger desde el lado del conductor. Tenía un arma. Le apunté a la cabeza -es todo lo que veía. Desapareció en la cabina y luego volvió a surgir. Le volví a disparar, dos veces, y lo vi caer hacia atrás. No sabís si estaba muerto, oí la orden “dejen de disparar”. Tres de los seis detenidos han sido trasladados a Levallois-Peret, cerca de París, para ser interrogados en la Dirección de Seguridad Interna (RPS).

El ministro francés del interior, Bernard Cazeneuve, dijo hoy que aún no se ha podido establecer un vínculo entre el asesino y redes terroristas. Sin embargo, agregó: “el MO está tomado directamente de Daesh [ISIS]”.

Hablando para RTL, agregó: “No podemos excluir la posibilidad de que un individuo desequilibrado y muy violento, como su psicología muestra que era, se haya radicalizado rápidamente y por ello haya cometido este atroz crimen. Sin embargo, desde el primer momento estuvo claro que tenía todos los elementos de un ataque suicida y las primeras pesquisas parecen indicar premeditación”.

El héroe de la noche, Alexandre Migues, describe su experiencia al tratar de detener al asesino Bouhlel mientras el camión se acercaba al final de la calle. Tras aventar su motocicleta a un lado, corrió 20 metros para alcanzar a Bouhlel, quien había bajado la velocidad y avanzaba entre cinco y 10 kilómetros por hora. “Me agarré de la manija e intenté tres o cuatro veces abrir la puerta. Pude ver que estaba buscando algo mientras el camión bajaba de velocidad. Tomó un arma y me apuntó con ella, mirándome a los ojos. Fue entonces que solté la puerta. Hice todo lo que pude para que redjera la velocidad. Pero cuando me amenazó con la pistola, solté la puerta. En el video se puede ver que logramos reducir la velocidad del camión. Me gustaría haberme quedado aferrado a la manija más tiempo para obligarlo a disminuir la velocidad aún más y que la gente pudiera huir. Desde el momento en que empezamos a detener el camión y durante 150 metros, no hubo víctimas. Me sentí muy aliviado por ello”.

Fuente: The Daily Mail