Se equivocan los historiadores israelíes antisionistas

El fallecido Rabino Shlomo Carlebach solía decir: “Si me encuentro una persona que me dice que es protestante, sé que es protestante. Si encuentro a una persona que me dice que es católico, sé que es católico. Si conozco a una persona que me dice que es un ser humano, sé que es judío”.

RABBI DAVID WOLPE / ENLACE JUDÍO MÉXICO -Los judíos tienen una tradición, nacida de una combinación entre la persecución y la autocrítica que en ocasiones los hace sentir incómodos con la particularidad de ser parte de un pueblo. Estos días es posible verlo en gente que repudia al Estado que ha salvado a millones de judíos, el Estado de Israel. El último execrable ejemplo de esta costumbre de huir de uno mismo lo vemos en un artículo publicado en el periódico israelí Ha’aretz, de la pluma de dos historiadores, Hasia Diner y Marjorie Feld, sobre las razones por las que “han dejado atrás el sionismo”.

Diner escribe que es imposible apoyar a un Estado “Judío y Sionista”. ¿Por dónde empezar? ¿Con el hecho de que ha habido montones de estados musulmanes, cristianos y un solo estado judío? ¿Que debido a que Israel es un estado judío millones de rusos, yemeníes, sirios, etiopes, iraníes, iraquíes y otros judíos pudieron salvarse? ¿A dónde piensan estos iluminados historiadores que huyen hombres y mujeres de la comunidad LGBQT para salvarse de las medidas draconianas en sus países de origen?

Feld, quien dijo que se había reeducado  -me parece increíble que una historiadora no se de cuenta del tono ominoso de esa frase- siguió esta declaración con una forma particular de veneno enmascarado. Dice que se rehusa a entrar a cualquier institución que tenga la bandera “Estamos con Israel”. Bueno, no puedo decir que la gente en mi sinagoga le daría la bienvenida, aunque es posible que trataran de “reeducarla”. Quizá los cientos de judíos iraníes que huyeron, muchos de ellos con familias en Israel, a quienes se proporcionó ayuda y apoyo desde Israel para que pudieran escapar al régimen tiránico —podrían reeducar a esta mujer que se rehusa a asociarse con el único estado que ha existido en esa tierra desde que hace dos mil años Israel fue destruido. Quizá ellos le podrían enseñar algo a esta historiadora.

Nosotros no “silenciamos” a la gente cuyas ideas difieren de las nuestras. Dentro de la comunidad judía de Estados Unidos hay un fuerte debate, aun dentro de mi propia sinagoga. Pero este no incluye a la gente que rechaza el derecho de Israel a existir. Supongo que se podría decir que la gente tiene derecho a decir que Francia no debería existir. Después de todo, algunas personas creen eso, y lo demuestran de forma regular con bombas y balas. Pero sospecho que ninguno de nosotros le prestaría oídos al argumento o lo dejaría entrar a nuestras casas. No, no se puede argumentar que Francia, China o Rusia o cualquier otro país en el mundo, no tiene derecho a existir, sin importar su comportamiento. Es impensable. Sólo cuando se trata de Israel es que sale a relucir el argumento de la eliminación ideológica o literal, y ahora se le trata como si fuera una discusión real en cualquier conversación civilizada.

Así que, dos historiadores judíos van a un periódico israelí para argumentar contra la continuación del Estado Judío de Israel. Es difícil saber si vale la pena ofenderse más por su arrogancia o por su idiotez.

Fuente: Time Magazine