Ondeando banderas y cantando canciones, cientos de personas se presentaron en el aeropuerto internacional Ben Gurion el lunes por la noche para recibir a los judokas medallistas olímpicos de Israel de vuelta a casa
SILVIA SCHNESSEL PARA AGENCIA DE NOTICIAS ENLACE JUDÍO MÉXICO – “No me esperaba tanta locura”, dijo Yarden Gerbi en el aterrizaje, según el sitio de noticias Ynet, que informó de casi 1.000 celebrantes que vinieron al aeropuerto a las afueras de Tel Aviv.
Gerbi y Or Sasson ambos se llevaron medallas de bronce en judo en Río, las octava y novena medallas de Israel de su historia, transformando al instante a los dos en héroes nacionales.
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Al entrar en la cavernosa sala de llegadas del aeropuerto, Gerbi y Sasson recibieron una lluvia de flores, mientras gente de bien agitaba banderas, cantaba canciones patrióticas y sostenían fotos y afiches con los dos ganadores, parándolos a cada rato para un ‘selfy’ o un abrazo.
“Creo que me quedé en 57 kilos sólo de toda la locura aquí”, dijo Gerbi, que compitió en la categoría de 63 kilogramos. “Tuve unos días de tranquilidad en Río mientras lo asimilaba. Mi próximo sueño es ciertas vacaciones”.
El 9 de agosto, Gerbi derrotó en combate a la competidora de Japón Miku Tashiru hasta hacerse con el bronce, la primera medalla de Israel desde 2008.
Tres días más tarde, Sasson se sacudió un encuentro desagradable con el judoka egipcio Islam El Shehaby en la categoría de más de 100 kilogramos, ganando dos combates más y perdiendo por un estrecho margen frente al legendario Teddy Riner de Francia. Luego venció al contrincante de Cuba Alex Mendoza para reclamar el bronce.
Ambos fueron inicialmente agasajados desde lejos, consiguiendo portadas elogiosas en los tabloides y llamadas populares de Israel del primer ministro Benjamin Netanyahu para felicitarlos.
El entrenador de los hombres de Oren Samadja, que ganó una medalla de bronce en los Juegos de 1992, convirtiéndose en el primer israelí en ganar una medalla como atleta y entrenador, también volvió de Río y dijo a las cámaras que esperaban que los dos atletas debían disfrutar a fondo de la experiencia.
“Espero que disfruten de esto, porque se lo merecen. Tendrán que acostumbrarse a haberse convertido en figuras conocidas y modelos a seguir. Pasé por esto a los 22 años y es una experiencia increíble, es algo que se queda contigo para toda la vida. Se quedarán conectados a tierra, porque eso es lo que son, gente increíble “, dijo, según el sitio web de noticias deportivas Sport5.
Fotos tomadas en el aeropuerto Ben Gurión a la llegada de los judokas medallistas olímpicos. (Cortesía de Shimon Aran)
Las dos medallas han sido puntos brillantes en unos Juegos Olímpicos por otro lado decepcionante para la delegación israelí, con varios atletas bien clasificados no logrando llegar a la ronda de medallas en la competición.
Mientras Gerbi y Sasson recibían una bienvenida de héroes, Shehaby, que se negó a estrechar la mano de Sasson después de un combate, que le acarreó la condena internacional, también regresaba a Egipto después de haber sido reprendido por el Comité Olímpico Internacional y funcionarios olímpicos egipcios.
El COI dijo que la conducta del egipcio “era contraria a las reglas del juego limpio y en contra del espíritu de amistad plasmado en los valores olímpicos”.
El Comité Olímpico de Egipto también “condenó enérgicamente” las acciones de Shehaby “y lo ha enviado a casa”, según el COI.
Fuente: The Times of Israel – Traducción: Silvia Schnessel – © EnlaceJudíoMéxico
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