Israel aprueba desclasificar el archivo de la desaparición de niños judíos yemeníes

Publicarán documentos confidenciales de la comisión que investigó el paradero de niños llegados a Israel entre 1948 y 1954 desde países árabes y en especial desde Yemen.

SAL EMERGUI

El Gobierno israelí levantará la confidencialidad de miles de documentos sobre la desaparición de niños en los primeros años de Israel (1948-1954). El ejecutivo de Benjamin Netanyahu da un importante paso para esclarecer el paradero de los hijos de muchas familias yemeníes, otros países árabes y los Balcanes.

La apertura del archivo de la última comisión estatal de investigación (2001) podría determinar de qué forma estuvo involucrado el Estado en los secuestros y posteriores adopciones de esos bebés. La confidencialidad de los documentos era efectiva hasta 2071.

“La decisión no hará desaparecer el dolor y sufrimiento de miles de inmigrantes judíos, que han vivido con la sensación de que sus hijos desaparecieron”, ha reconocido el ministro Tsaji Hanegbi que centraliza las operaciones para esclarecer los hechos.

“Esta medida es importante porque las familias y la sociedad en general podrán ver en Internet la situación en toda su dureza y conocer la verdad”. Asimismo, criticó a anteriores Gobiernos por no querer revelar todos los documentos.

Las tres comisiones de investigación creadas llegaron a la conclusión de que el Estado no fue responsable de las desapariciones de niños llegados de la aliá (emigración judía a Israel) del Yemen y otros países árabes.

En 1995, el Gobierno de Isaac Rabin creó la Comisión Cohen-Kedmi por la que se estudiaron 1053 casos de familias que recibieron la notificación de la muerte de sus hijos pero sospecharon que fueron adoptados por familias europeas sin descendencia.

Las conclusiones publicadas en el 2001 establecieron que 979 niños murieron, 69 desaparecieron (entre ellos 13 en Yemen) y sólo 5 fueron localizados. En esta ocasión, los únicos documentos excluidos serán aquellos que los familiares no deseen hacerlos públicos.

“Estamos hablando de levantar todos las limitaciones y permitir a las personas ver con sus propios ojos todo el material en Internet”, ha afirmado Netanyahu sobre una propuesta de ley promovida por la ministra de Justicia, Ayelet Shaked, y varios ministros y diputados del Likud.

Encuentro entre judíos procedentes de países árabes y de Europa

La decisión gubernamental- que será aprobada por la Knésset (Parlamento israelí) al contar con el apoyo de la oposición- no garantiza la respuesta a muchas preguntas. O eso piensa Yael Nagam, en nombre de la asociación Ajim Ve Kayamim (“Hermanos que viven”, en hebreo).

“Creemos que este paso es importante pero no definitivo. La revelación de los documentos no resolverá la localización de los niños ni si el Estado estuvo involucrado. Falta mucho aún para saber toda la verdad”, ha declarado tras la decisión del Gobierno.

Varias ONG dedicadas a este asunto estiman que el número de desaparecidos, entre bebés yemeníes y nacidos en Israel (sabras), supera a los más de mil estudiados en la última comisión.

El Dr. Dov Levitan (Universidad Bar Ilan) es experto en la inmigración y absorción de los judíos yemeníes. “Quien exige abrir los documentos se llevará una decepción. Ninguna comisión pudo aclarar si hubo adopciones ilegales”, comentó tras las declaraciones de Hanegbi en el Canal 2 israelí: “Se llevaron a los niños pero no sabemos adónde ni si las autoridades eran conscientes”.

Es una herida en la comunidad sefardí (judíos procedentes de países orientales y descendientes de los expulsados de España en 1492) que eran minoría en las primeras décadas de un Israel bajo el establishment laborista y ashkenazí (judíos originarios de la Europa Central y Este).

Fueron también los años del encuentro en un país-recién creado y en guerra- entre judíos que huyeron de progroms (ataques por parte de poblaciones no judías contra judíos) en países árabes y judíos que sobrevivieron al Holocausto en Europa.

Un encuentro fundamental para entender el desarrollo demográfico, cultural y económico de Israel, que algunos definen como “simbiosis” y otros “choque”.

Polémico proyecto de ley sobre enclaves en Cisjordania

Por otro lado, la comisión ministerial israelí sobre legislación ha aprobado un polémico proyecto de ley destinado a evitar la evacuación de Amona en Cisjordania. Este pequeño enclave judío debía ser evacuado antes del 25 de diciembre por orden del Tribunal Supremo (TS) israelí ya que sus casas están construidas sobre tierras privadas palestinas.

El proyecto de la “ley de regularización” -apoyada por el ala más nacionalista de la coalición (el partido “Bayit Yehudit” y los halcones del Likud)- ha sido aprobado pese a la oposición de Netanyahu que alega lo repetido este domingo-por el asesor legal del Gobierno, Amijai Mandelbit. Éste advirtió a los ministros que la ley para regularizar Amona y otros enclaves levantados sin permiso estatal en el territorio ocupado en la guerra del 67 va contra la ley israelí e internacional. Y, lo más importante a efectos políticos, es muy posible que, si es aprobada en el Parlamento, sea anulada por el TS.

Antes de la votación, tuvo lugar un fuerte enfrentamiento entre el ministro ultranacionalista Naftali Bennett (promotor de la iniciativa) y el ministro de Defensa, Avigdor Lieberman. Este dirigente derechista le acusó de actuar solo con fines electoralistas argumentando que el proyecto de ley no tiene opciones de aplicarse pero “hará daño a la comunidad judía en Judea y Samaria (Cisjordania)”. Bennett también fue criticado por Netanyahu que intentó sin éxito evitar la votaicón este domingo.

Mientra la izquierda en Israel considera que la ley será tumbada por el Tribunal Supremo al intentar “regularizar el robo de tierras privadas”, en la derecha más nacionalista representada por Bennett creen que es un paso importante para la anexión de Cisjordania.

Fuente:elmundo.es