El arte perdido en las llamas

Ra’anan observaba cómo su taller de arte se incendiaba y la estructura llena de pinturas al óleo, trementina y otros materiales inflamables se consumían.

ESTI PELED PARA AGENCIA DE NOTICIAS ENLACE JUDÍO – “Todo ha desaparecido y ahora tengo que empezar de nuevo” dice Yoram Ra’anan, artista y pintor de motivos judíos.

Ra’anan emigró a Israel de Estados Unidos hace 40 años y se estableció en el Moshav Beit Meir, una comunidad religiosa ubicada en las Colinas de Jerusalem.

“Llegué a Israel después de viajar por Europa, y desde entonces he construido una casa, un estudio de 300 metros, me casé y tengo cuatro hijos y seis nietos”.

Ra’anan, un artista apasionado, graduado de la Universidad de las Artes en Filadelfia dice que suele pintar desde la mañana hasta la noche en su estudio, un gallinero restaurado.

En la madrugada del viernes, dormía en su estudio – algo que hace a menudo como parte del proceso creativo – cuando su esposa, Meira, entró y dijo, “Debemos salir, hay un incendio”.

“Pensé que era muy extraño, pero mi esposa insistió en que teníamos que irnos, y salimos. Vi cómo volaban las chispas. Tomamos el auto e intentamos salir del moshav, junto con las 150 que trataban de huir por una sola salida ya que la otra estaba bloqueada. Nos quedamos atrapados”.

“Fue bastante sorprendente, porque estábamos atrapados. Nos dimos cuenta de que tal vez no lograremos salir con el coche y pensamos que debíamos correr. De pronto era todo muy real. Pero gracias a D-os, logramos salir y dejar las llamas atrás”.

Aunque Ra’anan y su esposa huyeron sanos y salvos, el trabajo de toda su vida se consumió en llamas.

“Caminaba 50 metros para ir a trabajar todos los días, y ahora mi estudio está totalmente destruido, las 2,000 obras de arte están destruidas, todos los catálogos, todos mis registros, todo el trabajo de años. Todo se ha ido, y ahora tengo que empezar de la nada.

Sin embargo, se considera afortunado, ya que su hogar fue rescatado del fuego, y en su hora de crisis ha encontrado el apoyo de sus admiradores alrededor del mundo.

“Lo cierto es que encontré mi estudio quemado, y pensé que siempre se puede hacer más arte. Así que aprecio estar aquí, sano y salvo. Una cosa que me sorprende, es la cantidad de apoyo de todo el mundo que he recibido. Es asombroso que tantos corazones, almas y espíritus aprecien lo que hago y lo que he alcanzado”.

De hecho, un grupo de admiradores y amigos comenzó una campaña en su nombre a través del Fondo Hesed para ayudar a reconstruir su estudio.

Ra’anan agradece la ayuda de toda la gente y afirma que superará esta crisis mirando hacia adelante. “Siempre ha sido así, debo ser como el fénix y salir de las cenizas”.

“Llegué a Israel hace exactamente 40 años y he estado haciendo una pintura de la parashá de la semana para el Jerusalem Post desde hace tres años. Para mí, esta es una oportunidad para ver que la vida tiene sus ciclos, como el pueblo judío y como la luna que aparece y desaparece. Esto es parte de la vida, y lo acepto de buena fe”.

Fuente: The Jerusalem Post / Lidar Gravé-Lazi

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