Teatro musical: Las mujeres religiosas que saben cómo divertirse

Estamos acostumbrados a pensar que la vida de una mujer judía observante es, si no aburrida, sí bastante recluida. Muchas veces creemos que las leyes de tzniut (recato) y kol isha (ley que prohíbe a un hombre escuchar el canto femenino), aunque le dan un mundo espiritual y amplísimo a la mujer que decide seguirlo, la limita. Pensamos que se pierden de muchas cosas buenas de la vida, como actuar, bailar, gritar, casi todo lo divertido.

Solemos pensar que una mujer ortodoxa, aunque se atreva a actuar, jamás va a llegar a un nivel profesional. Decimos: “Jamás va a tener una audiencia real, más allá de su familia”… Estas mujeres nos demuestran que NO ES ASÍ.

La “Compañía de Teatro Musical de Mujeres Judías” (The Jewish Women’s Repertory Company) en Los Ángeles es una compañía exclusivamente para mujeres judías. Sólo se admiten mujeres en la audiencia y el escenario. El objetivo de la compañía es darle un espacio exclusivamente femenino a mujeres observantes para que puedan representar obras con holgura y libertad.

Fue fundado en febrero del 2005 por Margy Horowitz, quien cuenta con una larga trayectoria estudiando y enseñando teatro y música. Desde entonces han representado muchas obras famosas de Broadway como Los Miserables, Hombres y muñecas (Guys and Dolls) y piezas que se han estrenado apenas en Estados Unidos como The Drowsy Chaperone, and Once Upon a Mattress.

Para Horowitz es importante que los musicales que se representen sean atractivos para todo tipo de audiencia, no únicamente para audiencia judía, o de temas judíos. Sin embargo, la popularidad del recital no es el único parámetro que se toma en cuenta para decidir qué obra será representada.

Horowitz intenta escoger obras donde no haya una sexualidad demasiado explícita, algo que sería inapropiado para que niños lo observarán: “Quiero que toda la comunidad pueda asistir a nuestras representaciones y que se sientan cómodos”. Esta premisa incluye a las actrices también: “Nunca le pedimos a una mujer que use un disfraz en el que no se sienta bien usando. Si alguien siente que su escote está muy bajo o sus mangas muy cortas la impulsamos a que use ropa abajo del disfraz.”

Sin embargo algo que sorprende es que los roles de género nunca han sido un problema en las representaciones. Horowitz no tiene que preocuparse por el número de personajes femeninos o masculinos que aparecen en las obras. Siempre hay alguien dispuesta a actuar de hombre: “la mayoría de las mujeres prefieren actuar de hombres, porque es más divertido actuar como algo que no eres” (Horowitz).

Al final, las mujeres de la compañía aceptan que es un espacio para expresarse artísticamente, en un ambiente divertido, seguro y de compañerismo. Actualmente están trabajando en el musical Vivir de ilusión (Music Man) para el cual harán audiciones el 1, 2 y 3 de mayo del 2017.

Fuente: jewishwomenstheatre.com