Enlace Judío México.- Rosh Hashaná (Año Nuevo de los Judíos)
Mis padres llegaron de Polonia a México al inicio de los años treinta del siglo pasado; en su hogar vivieron en un entorno judío, sin embargo, no fueron practicantes de la religión judía, quizá porque mi padre había estado en el ambiente de las ideas comunistas que estaban en boga en aquellos tiempos.
LEÓN OPALÍN EN EXCLUSIVA PARA ENLACE JUDÍO MÉXICO
En este contexto, en mi infancia nunca celebramos la festividad de Rosh Hashaná; mis primeras vivencias sobre esta última fueron en la escuela judía a la que asistí en la primaria; aunque ocasionalmente algunos amigos de mis padres nos invitaron a la cena que se sirve en Rosh Hashaná. Posteriormente, de adolescente conviví con amigos judíos y ellos me invitaron a esta celebración. Ya casado asistí con mi familia a las cenas de nuestros amigos de toda la vida, Abraham y Bila y sus hijos. El año pasado mi familia fue invitada a la mesa familiar, alrededor de 30 personas, de nuestra consuegra. Esta relación de celebraciones de Rosh Hashaná viene a colación porque el punto central de todas ellas ha sido el cierre de un ciclo de vida de un año y forjar propósitos para el nuevo año que inicia.
Este año me llamó la atención y me causó fuerte impacto un artículo que aparece en el sitio Enlace Judío en el que se señala que Rosh Hashaná es el día del juicio para el judaísmo. En él se determina, supuestamente por Dios, quién vivirá el resto del año y quién morirá; una aseveración a mi parecer muy fuerte; a continuación se dice que solo los que tienen un comportamiento débil o irregular serán juzgados y los que son sabios y justos, que no trasgreden ni la voluntad, ni la ley de Dios, serán inscritos inmediatamente en el libro de la vida. Los malvados que abiertamente luchan contra Dios, luchan contra la alegría y la vida, inmediatamente serán inscritos en el libro de la muerte.
En este punto surge la pregunta ¿cómo es que los sabios mueren? aquí viene una respuesta genial, porque para ellos la muerte es la unión entre el alma y Dios, pasan a otra forma de vida en donde la materia ha sido perfeccionada de manera que su existencia es también espiritual. Cuando mueren los justos es porque ya lograron todo lo que se habían propuesto en materia espiritual; de aquí que los sabios judíos pidieron a sus discípulos que celebren como un día alegre el aniversario de su muerte, ya que ese fue el día en que completaron su misión.
Me parece que este enfoque de la muerte es propositivo. Asimismo, Rosh Hashaná representa un paradigma a segur para el individuo, un llamado a que la gente tenga un desempeño honesto, justo y humanitario.
Donald Trump daña a su país y al mundo
En este espacio he comentado repetidas veces sobre la incongruencia de las acciones que Trump instrumenta en EUA y, en su política exterior (es un decir); hay quienes piensan que es una estrategia para alcanzar sus fines. Lo cierto es que Trump ha dado muestras de inestabilidad mental y emocional, quizá no se da cuenta que está dañando a todo el mundo. Es cuestión de tiempo para que “sus compatriotas despidan al imbécil que pusieron en el Despacho Oval”.
El racismo que manifiesta Trump en buena medida se orienta a los mexicanos indocumentados, los “bad boys”, los culpables de ser criminales, de quitar empleos a los trabajadores estadounidenses, entre otros delitos, por eso su obsesión de frenar la inmigración de mexicanos ilegales y expulsar a los que residen en EUA; la construcción de un muro a lo largo de su extensa frontera con México de más de 3 mil km, (ya existe en más de mil km) es una fantasía demagógica. Trump seguramente ignora que desde el 2012, y por primera vez en 40 años, la migración neta de mexicanos a EUA ha sido negativa; más mexicanos han salido de los que han ingresado; de aquí que plantear que México sea quien absorba el costo de la barrera física que él propone, no solo es indebido, sino arbitrario.
La construcción de un muro en la frontera es una quimera, ninguna administración de EUA en su juicio la aprobaría, el costo real sería entre 25 mil a 30 mil millones de dólares. Por lo demás, su construcción enfrentaría una fuerte oposición de un gran número de estadounidenses que sus tierras son parte de la frontera de EUA. Por lo demás, científicos de varios países han señalado que se afectaría seriamente a la ecología fronteriza y más allá de esta, entre otros impactos negativos que se provocarían está la desaparición de fauna y flora, se cortarían fuentes de suministro de agua, principalmente.
Por otra parte, con la administración de Trump y otras previas, las autoridades de México han registrado presiones para que deporten a cientos de miles de centroamericanos cada año que cruzan México para llegar a la frontera de EUA. El esfuerzo de México ha sido abrumador ya que impone costos importantes a las autoridades migratorias y policiales y alrededor de sus acciones el surgimiento de mafias que explotan a los inmigrantes. En este sentido, y pensando bajo la lógica o ilógica de Trump ¿sería justo que México considerara que EUA le reembolsara los costos derivados de administración de los inmigrantes centroamericanos? Vinculado a la inmigración ilegal, dos semanas atrás Trump, en su calidad de presidente (es un decir), concedió el indulto a su amigo Joe Arpio, Sheriff del condado de Maricopa (Arizona) que durante 23 años se dedicó a perseguir, más bien a cazar de manera implacable a los indocumentados en su jurisdicción, hasta que en noviembre pasado la movilización del voto latino lo tiró del cargo. Arpio fue condenado por la justicia de EUA por desacato. Un juez federal le había ordenado que dejara de aplicar métodos de persecución a los inmigrantes que vulneraban los derechos civiles; no obstante, las patrullas a su mando siguieron sus campañas de acoso con detenciones arbitrarias e identificaciones fundamentadas exclusivamente en los rasgos raciales de los detenidos.
Arpio presumía de haber encontrado la fórmula para castigar a los indocumentados “infractores de la ley”. Estableció tiendas de campaña en medio del desierto como cárceles. En las tiendas se registraban fácilmente temperaturas de 45 grados centígrados; las condiciones de vida que existían en las supuestas cárceles eran deplorables y además de aplicarles una dureza desmedida, imponía a los internos humillantes medidas disciplinarias, incluidos grilletes y trajes de rayas.
“Esto es lo que ocurre en EUA del siglo XXI y es el personaje a quien Trump acaba de indultar alegando que es un patriota y que su admirable servicio a la nación merece el perdón”. Arpio y Trump son almas gemelas, comparten un carácter y una especial habilidad histórica para atraer a los focos mediáticos”.
Las políticas racistas de Arpio y Trump han inspirado a 18 sheriffs de condados de Texas para ofrecerse como caza inmigrantes, quienes en agosto pasado firmaron un acuerdo para instruir al programa 287 (g) del Servicio de Inmigración Aduanal (Ice por sus siglas en ingles) que da a la policía local la autoridad para hacer cumplir las leyes de inmigración de EUA.
A Trump le brota lo racista y la homofobia por todos sus poros. A finales de julio pasado en una declaración por Twitter, prohibió que las personas transgénero sean miembros del Ejército “porque son una carga, un costo, y ahuyentan la victoria”. La medida echa por tierra la orden aprobada por Barak Obama y sitúa en la cuerda floja a cerca de 13 mil transgéneros que están prestando servicio.
La decisión de Trump contenta a la derecha radical que le brindó su apoyo en las elecciones, un sector vinculado a diversos movimientos cristianos fundamentalistas. Los estudios disponibles sobre transexuales han demostrado su capacidad de servicio. En 8 meses de que Trump ha ejercido su cargo como presidente ha cometido innumerables “barrabasadas” y seguramente seguirá por ese camino mientras no sea obligado a renunciar. En este sentido, un grupo de 34 siquiatras y trabajadores sociales firmaron una carta enviada al periódico New York Times en febrero pasado en la que alertan de la “grave inestabilidad emocional del presidente de EUA. Su discurso y sus acciones demuestran una incapacidad para tolerar opiniones diferentes de las suyas, lo que le lleva a acciones de rabia. Sus palabras y comportamientos sugieren una profunda incapacidad para empatizar. En un líder poderoso, es probable que estos ataques aumenten, ya que parece confirmarse su mito personal de grandeza”. En resumen, la inestabilidad emocional de Trump lo hace incapaz de servir con seguridad como presidente.
La carta de los siquiatras y trabajadores sociales rompió el silencio habitual sobre las figuras públicas; el silencio de las organizaciones de salud mental de EUA se debe a un dictado auto-impuesto sobre la evaluación de las figuras públicas (la Regla de Goldwater de 1973 de la Asociación Psiquiátrica Americana).
La presidencia de Trump ha deteriorado la imagen de EUA entre los mexicanos quienes tradicionalmente en una proporción elevada la han tenido desfavorable, en virtud de la pérdida de una gran parte de su territorio nacional, ahora perteneciente a EUA, y la discriminación de estadounidenses a los connacionales, entre otras razones.
El Pew Research Center, (PRCH) un “Thin Tank” (grupos de reflexión de naturaleza investigadora) con sede en Washington D.C. que brinda información sobre problemáticas, actitudes y tendencias que caracterizan a EUA y el mundo, en un informe publicado el 14 de septiembre pasado consigna que la valoración que los mexicanos tienen de EUA ha caído “dramáticamente”, su imagen del vecino del norte es la peor de los últimos 15 años. La valoración del PRCH se basa en una encuesta a mil mexicanos realizada entre marzo y abril pasados.
El 65.0% percibe a los estadounidenses de forma negativa, el doble que hace dos años. A pesar de ello, un tercio de la población se mudaría a EUA para tener una mejor oportunidad de vida; a mí en lo particular me gustaría. Los más jóvenes (entre los 18 y 29 años) son el grupo en el que más aumenta el rechazo a EUA; una percepción que se suaviza entre los estratos sociales con mayor nivel educativo. Geográficamente los encuestados que viven en la frontera tienen una visión menos negativa que los que viven alejados de la misma.
En relación al acuerdo comercial vigente entre EUA, México y Canadá, el 60.0% de los mexicanos piensa que el Tlacan es bueno para México. La opinión sobre este tema varía según donde vivan los encuestados. Mientras que el 70.0% de los que residen en la frontera norte ve el acuerdo con buenos ojos, cae el apoyo a medida que se pregunta hacia el sur, hasta llegar a 58.0% entre quienes viven a 320 km de la frontera.
El informe del PRCH señala también que los mexicanos desaprueban al presidente Enrique Peña Nieto, el 69.0% tiene una opinión desfavorable del mandatario; solo 13.0% de los encuestados se sienten satisfechos con el rumbo del país, el porcentaje más bajo desde el 2007. La violencia y la corrupción política son los principales problemas que perciben en México, por encima del miedo a los cárteles de la droga, el bajo nivel educativo o el aumento de la inflación. El desempeño económico, político y social de México es tema central de otra Crónica.
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