El marqués que desahucia a su hija y su nieto por judíos

Una aristócrata española, hija y heredera  del Marqués de Larios, denuncia que su padre ha conseguido desahuciarla,  junto a su hijo de seis años, por el mero hecho de ser judíos. 

P HUERGO CASO / ENLACE JUDÍO .

Sandra Fernández de Villavicencio , hija del VI marqués de Larios, d.  José Carlos Fernández de Villavicencio y Eleta, definitivamente desahuciada de la casa en que nació hace 30 años.

Sandra Fdz. De Villavicencio, madre de un niño de seis años de edad llamado Kenzo,  lleva mucho tiempo luchando contra el acoso judicial de su propio padre, el actual Marqués de Larios y no es la primera vez que denuncia en los medios de comunicación sentirse injustamente agraviada. En esta ocasión lo hace para decir que ha perdido la batalla judicial y el próximo 10 de abril, por orden del juzgado de primera instancia de la localidad de Alcobendas, Madrid, se llevará a cabo el desahucio por el que ,tanto ella como su hijo de seis años, deben abandonar su residencia en la exclusiva urbanización madrileña de La Moraleja (que es donde han nacido tanto ella como su hijo)

La desahuciada, que también es la primogénita del marqués (hoy padre de otros dos hijos tras su matrimonio en segundas nupcias con María Martínez del Castillo) tampoco es la primera vez que dice desde los medios de comunicación que el motivo de estas desavenencias es que tanto ella como su hijo son judíos.

El Marqués de Larios se casó con Eva Frommer, de ascendencia judía, quien fue la madre de Sandra. A los dos años de edad, los padres se divorciaron. El Marqués y Eva Frommer se habían casado en el Hotel Villamagna, propiedad del padre del marqués en cuestión, que  a su vez era Marqués de Villacerrato; pese a ser el padre del novio no acudió a la boda -dice Sandra Fdez.- porque la novia era judía, nieta de unos judíos de la hoy extinta Checoslovaquia ( y supervivientes de la Shoá). Sandra Fdez. dice que después del divorcio, puesto que ella es judía por ser hija de judía,  prácticamente se desentendió de su manutención y de sus obligaciones como padre .

Sandra Fdez también dice que empezó a sentir el antisemitismo de la familia paterna muy pronto, a la edad de unos  seis años,  disfrutando de unos días de vacaciones  en una propiedad  en la  casa del marqués en  La Zagaleta,  Málaga,  (una de las urbanizaciones más exclusivas de Europa)  Allí, y entonces, fue donde Sandra conoció a la segunda esposa de su padre, una señora alemana muy devota de la religión católica -de misa diaria-  que le dijo: “Los judíos se están extinguiendo, tienes que convertirte al catolicismo”.  A partir de entonces, dice que creció acosada por un contiunuo chantaje  que consistía en  “No te doy esto si no te conviertes”.  Sandra ha recurrido a la comunidad judía de Madrid para pedir asesoramiento al respecto. “Quien heredará sus títulos es una judía y de mí, pasarán a un judío y eso… Ellos no pueden soportarlo”, dice la afectada.

Sandra Fdez. , que es madre soltera y sin trabajo fijo, dice que los procedimientos judiciales siempre habían sido contra su madre, que vive con los abuelos maternos en Panamá. Pero que desde hace cuatro años empezaron a cursarse también contra ella. Ahora, dice, sólo le queda apelar a la ilegalidad de poner en la calle a un menor de edad del que ella tiene la custodia.

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