¿A quiénes le debemos el Estado de Israel? Los verdaderos precursores del sionismo

Enlace Judío México – El regreso a la tierra de Israel ha sido una idea presente en nuestra cultura desde tiempos inmemorables. A lo largo de dos milenios no hubo un solo año en que no hubiera judíos esperando el regreso de nuestro pueblo a su tierra. Sin embargo, el Estado judío fue una idea nueva que surgió entre sionistas en el siglo XIX; cuando ya estaban consolidados los Estados de otras naciones. Surgió como una forma de preservación; después de numerosos pogromos y masacres, los judíos del siglo XIX se dieron cuenta de que, sin un Estado propio, estarían a dispensas de gobiernos antisemitas al punto tal incluso de acabar con la judería. Así fue como empezó la migración de judíos a lo que entonces se llamaba Palestina, una región del Imperio otomano.

Hoy, doscientos años después, el Estado judío existe gracias al trabajo de muchísima gente que se dedicó a hacerlo crecer entre la hostilidad y el desierto. Israel es para todo judío una esperanza, en él podemos vivir nuestras tradiciones y cultura con seguridad. Y aunque hoy es un Estado laico donde conviven todo tipo de corrientes de judaísmo, pocos saben la participación tan importante que numerosos rabinos y líderes religiosos tuvieron en la formación del estado judío. Dos de los precursores del sionismo menos conocidos fueron Yehuda Aryeh Leon Bibas y rab. Yehuda Alkali, fundadores del sionismo moderno. A continuación les contamos su historia.

La increíble historia de los verdaderos fundadores del sionismo. Efraim Palvanov

Yehuda Aryeh Leon Bibas (1789 – 1852) nació en Gibraltar de una línea larga de rabinos sefardíes. Al morir su padre, el joven Bibas se mudó a Livorno para ser criado por su abuelo. Ahí creció y estudió en la yeshiva y la universidad haciéndose a la vez rabino y médico. Regresó a Gibraltar para dirigir una yeshiva propia, con la cual atrajo a numerosos estudiantes de Europa y África del Norte.

En 1831 fue nombrado rabino principal de Corfu (una isla griega que entonces contaba con una población judía amplia). Durante la siguiente década, entendió el terrible predicamento en el que se encontraban los judíos y concluyó que restaurar un estado judío independiente en Tierra Santa era la única solución.

En 1839 se embarcó en una gira internacional para animar a judíos de todo el mundo a hacer aliyá (mudarse a Israel). Muchos historiadores lo han reconocido como la primer figura prominente en hacerlo en tiempos modernos. Fue apoyado por el gran Sir Moses Montefiore, un judío adinerado que financió los primeros proyectos en Israel; a él se le debe la primer imprenta en Tierra Santa, la primer fábrica textil, el establecimiento de colonias agricultoras y la recuperación de numerosos sitios sagrados.

En la gira internacional que rab. Bibas emprendió conoció a rab. Yehuda Alkali (1798 – 1878), quién había nacido en Sarajevo y había estudiado en Jerusalén bajo el tutelaje de los cabalistas más grandes del momento. Alkali se había convertido en el rabino principal de Semlin, Serbia. Afectado por el libelo de sangre que hubo en 1840 contra los judíos de Damasco e inspirado por el movimiento nacionalista serbio; Alkali, al igual que Bibas, se había convencido que los judíos necesitaban un estado propio para defenderse. Tras conocer al rabino griego, Alkali formó la Sociedad de Asentamientos en la Tierra de Israel y empezó a hacer campaña para que grupos de judíos se situarán en su tierra ancestral.

Entre muchas de las teorías políticas y escritos religiosos que rab. Alkali escribió prediciendo e impulsando el regreso de los judíos a la tierra de Israel, se encuentra el libro “Goral L’Adonai” (“La heredad del Señor”). En este libro, que fue publicado en 1857, se encontraban delineados lo pasos que se debían tomar para restablecer un estado judío en Israel.

Rab. Alkali regaló una de las primeras copias de “Goral L’Adonai” a su amigo Simon Loeb Herzl, quien también asistía a la sinagoga de Semlin. Dicho hombre era nada más y nada menos que el abuelo de Teodoro Herzl, quien heredaría después el libro. Los académicos concuerdan que rab. Alkali y su tratado de 1857 desempeñaron un papel esencial en el pensamiento de Teodoro y en la totalidad del movimiento sionista. De hecho, fue rab, Alkali el primero en proponer las ideas esencialmente sionistas como: la restauración del hebreo como la lengua principal entre judíos; la compra legal de Tierra Santa, en partes y por terrenos; y la idea de que los judíos deberían volver a ser agricultores si deseaban autonomía en su trabajo. Las tres propuestas se materializarían y conformarían el inicio del estado judío.

Tanto rab. Bibas, como rab. Alkali pusieron en práctica lo que predicaban e hicieron aliya a Israel. Rab. Bibas primero se reunió con sus alumnos de Yafo y después se mudó a Hebrón a abrir una biblioteca. Murió poco después y fue enterrado en el cementerio judío de Hebrón. Rab. Alkali por su lado, fundó un asentamiento cerca de Jerusalén y vivió ahí por el resto de su vida. Fue enterrado en el Monte de los Olivos en Jerusalén.

Fuente: Jew of the Week