GABRIEL MORALES SOD
Siempre me ha llamado la atención el grado de interés que recibe el conflicto palestino-israelí y el nivel de organización de los grupos propalestinos en occidente. El conflicto y la ocupación israelí son, sin duda, un tema importante en la agenda internacional; sin embargo, con el fin de la Guerra Fría y el inicio de la lucha contra el terrorismo, el enfrentamiento pasó a un segundo plano para las grandes potencias e incluso en el mundo árabe el tema ha perdido prominencia.
No así en los campus universitarios y entre algunos grupos de izquierda, donde pareciera que no existe asunto más central en el mundo. Mi intención no es minimizar la gravedad del conflicto, sino hablar de la particularidad de este fenómeno. Puede ser que sea la longevidad del enfrentamiento o el hecho de que Israel sea una democracia, lo que lo convierten en un tema central —al fin y al cabo mientras la opinión internacional puede presionar a Israel, poco es lo que puede hacer contra el gobierno ruso o el chino—. No obstante, llama la atención la tenacidad y la impresionante cantidad de recursos, y prensa, que se le dedica al tema.
Hay en el mundo decenas de conflictos más sangrientos, algunos incluso igual de longevos, que no son parte siquiera de la conversación. Es justo por esto que es inevitable pensar que el antisemitismo desempeña un rol central; es decir, que incrementa la oposición que genera la ocupación, lo cual no ocurre, por ejemplo, con la ocupación turca en Kurdistán o la china en el Tíbet.
La guerra en Siria sirve como ejemplo de esto. Se calcula que durante la guerra civil, Bashar al Assad (y otras fuerzas) ha asesinado a alrededor de 10 mil palestinos. Sí, 10 mil. Para tener un punto de comparación, este número es similar a la cantidad estimada de civiles palestinos muertos en el conflicto con Israel desde 1948. Es verdad que es fácil olvidarse de estos civiles en el mar de muertos de la guerra civil siria. Sin embargo, uno esperaría que los cientos de organizaciones en occidente que advocan por los derechos de los palestinos hubieran iniciado una campaña, protestas, declaraciones. Nada. Silencio. Estamos hablando aquí de un genocidio.
Los palestinos han sido asesinados por ser sunitas; Assad, en su operación de limpieza étnica, ha asesinado a cientos de palestinos y desplazado a alrededor de 150 mil, de los cuales miles han emigrado a Europa. Parece ser, sin embargo, que la vida de los palestinos para estas organizaciones sólo importa como un objeto en relación con el Estado judío. Ése sí es opresor, genocida y cuantos adjetivos quieran, pero sobre Al Assad, que masacra a poblaciones civiles con químicos, no hay ni un pronunciamiento. Para estos palestinos no hay cartas a senadores ni marchas ni posters. Y es que si Israel no está involucrado, qué importan las vidas palestinas. A los palestinos sirios se les puede dejar morir solos.
Fuente: La Razón/ Reproducción autorizada con la mención: © EnlaceJudíoMéxico
Comunidad Enlace Judío
¿Nuestro periodismo es importante para ti?
¿Confías en Enlace Judío para una cobertura precisa y oportuna en este momento?
En ese caso, únete a la comunidad Enlace.
A partir de $200.00 MXN al mes, podrás:
- Apoyar a nuestros periodistas independientes que trabajan las veinticuatro horas del día
- Ser reconocido como parte de nuestra comunidad una bendición semanal
- Acceso a contenido exclusivo
- Acceso a eventos exclusivos, en caso de haberlos
- Servicio de noticias instantáneas sobre Israel y el mundo judío a tu celular, así como a nuestras transmisiones en vivo.