Primeros pasos de Barkat para desplazar a la UNRWA

Enlace Judío México e Israel.- Como parte del plan del alcalde saliente Barkat para reemplazar a la UNRWA y expulsarla de la capital, los servicios municipales de Jerusalén entran en el campo de refugiados de Shuafat.

Jerusalén proporciona los primeros servicios de eliminación de residuos municipales al campamento de refugiados palestinos de Shuafat. Los trabajadores de saneamiento de la ciudad ingresan al campamento.

El ayuntamiento de Jerusalén dijo el martes que 15 trabajadores de saneamiento municipal ingresaron al campo de refugiados palestinos de Shuafat por primera vez para llevar a cabo la recolección de basura y otros servicios de limpieza, en lo que se ha calificado como parte del plan del alcalde saliente Nir Barkat para expulsar a la UNRWA de Jerusalén y “terminar con la mentira de los refugiados“.

La medida fue ordenada por Barkat, que quiere prohibir que la agencia de la ONU para los refugiados palestinos opere en la ciudad y preste servicios a los residentes palestinos en el campamento que fue fundado en 1965 y alberga a unos 20,000 residentes.

Según la ciudad, los trabajadores encontraron cientos de toneladas de basura y escombros no atendidos. Comenzarán a ingresar al campamento todos los días para asumir gradualmente lo que la ciudad llamó “servicios inadecuados” de la UNRWA.

El municipio también comenzará a proporcionar educación, salud y otros servicios “muy superiores” al área, para reemplazar a la UNRWA, dijo en un comunicado.

Si bien se encuentra dentro de los límites de la ciudad de Jerusalén, los trabajadores municipales, la policía y otros nunca han ingresado al campamento de Shuafat, que se encuentra más allá de la barrera de seguridad de Cisjordania, lo que lleva a acusaciones de negligencia oficial. Barkat, que ha sido alcalde desde 2008, ha culpado del déficit de servicios a la UNRWA, que recientemente ha visto recortada su financiación por EE.UU. en medio de acusaciones de que sirve como herramienta política contra Israel.

El movimiento se produjo una semana antes de que Jerusalén se dispone a elegir un nuevo alcalde. Barkat, quien visitó el campamento de Shuafat el martes, no se presenta a la reelección y no está claro si su sucesor continuará los servicios.

“La era de la UNRWA en Jerusalén ha terminado“, dijo Barkat durante su visita. “Ha llegado el momento de decir basta a la mentira de los refugiados en Jerusalén. No hay refugiados en nuestra ciudad, solo residentes. Deben recibir sus servicios del municipio como cualquier otro residente”.

“Estamos implementando la primera fase del plan de evacuación de la UNRWA asumiendo la responsabilidad de la limpieza del campamento, y en un futuro cercano, junto con el gobierno, también proporcionaremos servicios de educación, bienestar y salud allí hasta que se logre la plena soberanía“, agregó. “Estados Unidos no quiere la UNRWA, Israel no quiere la UNRWA, y los residentes no quieren la UNRWA“.

A principios de este mes, Barkat detalló su propuesta, según la cual las siete escuelas administradas por UNRWA, con un total de 1,800 estudiantes, que operan sin una licencia del Ministerio de Educación se cerrarán al final del año académico actual, y los alumnos serán absorbidos en las escuelas municipales existentes.

El municipio también emitirá órdenes de cierre para los centros médicos de la UNRWA, que operan sin la aprobación del Ministerio de Salud, y construirá un nuevo centro público de salud en su lugar, dijo Barkat.

De acuerdo con el plan de Barkat, los programas existentes de asistencia social operados por la UNRWA que operan dentro del campamento de Shuafat y cerca de Kufr Aqeb continuarán, pero serán transferidos a los servicios de bienestar y empleo de gobernanza de la municipalidad.

En marzo, Barkat anunció que no buscaría un tercer mandato en las elecciones municipales programadas para el 30 de octubre y en su lugar se postulará para la Knesset con el partido Likud.

Su reemplazo como alcalde no estaría comprometido por los planes preparados por el comité de Barkat.

Estados Unidos fue el mayor contribuyente al presupuesto de la agencia en 2017, donando 350 millones de dólares. El Departamento de Estado de EE.UU. dijo recientemente que ya no financiaría a la UNRWA porque tenía “fallas irremisibles“.

En su anuncio de los recortes a la UNRWA, el Departamento de Estado de Estados Unidos reprendió a la agencia por lo que denominó “prácticas fallidas” e indicó que rechazaba los criterios según los cuales UNRWA define a los refugiados palestinos, mientras que la agencia de la ONU confiere el estatus de refugiado no solo a los refugiados originales sino a sus millones de descendientes.

UNRWA ha brindado ayuda a millones de palestinos desde que se estableció hace casi 70 años, justo después de la guerra árabe-israelí de 1948, conocida en Israel como la Guerra de la Independencia, en 1948.

UNRWA reconoce a más de 5 millones de palestinos como refugiados, aunque solo hay unas decenas de miles de refugiados palestinos originales aún con vida. Los líderes palestinos exigen un “derecho de retorno” al Israel de hoy para todos estos millones, una demanda que Israel ve como un intento de destruir a Israel como un estado de mayoría judía. Dado que la UNRWA, de manera única, confiere el estatus de refugiado a los descendientes de los refugiados originales, Israel acusa a la UNRWA de perpetuar esa demanda para un “retorno” de millones. Según los criterios globales de la ONU, se estima que solo habría alrededor de medio millón de refugiados palestinos reconocidos.

Stuart Winer contribuyó a este informe.

Fuente: The Times of Israel / Traducción: Silvia Schnessel / Reproducción autorizada con la mención siguiente: ©EnlaceJudíoMéxico