El “próximo paso” de los iraníes y la amenaza al Líbano

Enlace Judío México e Israel.- Vemos cómo avances positivos se viven en Siria,  siendo que la central del monitoreo de los servicios de inteligencia de Israel se está mudando a Irak. Se supone que las fábricas de misiles  y las milicias se convertirán en un brazo operacional lo suficientemente alejados como para que nos sea difícil atacarlos, pero lo suficientemente cercanas para amenazar y presionar a los EE.UU… Y también: Los mensajes y las sorpresas en lo que declaró el jefe de la Inteligencia Militar del Tzahal (Aman) ayer.

RON BEN YSHAI

El discurso de ayer del Jefe Aman se redactó de forma poco clara. En sus palabras sobre “la perturbada realidad”, habló sobre la dificultad de completar evaluaciones de inteligencia precisas debido a la información errónea y engañosa que los medios y las redes sociales están abrumando. Las “Fake News” perjudican no solamente a la inteligencia para evaluar la situación correctamente, pero también conduce a decisiones equivocadas por parte de los líderes, y está claro que se refería a Putin, Trump, Netanyahu y a Al-Sissi.

En estas palabras del mayor general, Tamir Heiman, se escondía una primicia. Dijo explícitamente: “La mayor parte de la inteligencia proviene del ciberespacio que se desarrolla y mejora” e incluso mencionó “a las cosas de Internet” y a los “relojes inteligentes” como ejemplos.

En sus palabras sobre el Líbano, Hezbolá y el proyecto de misiles exactos dijo “No necesitamos que Nasrallah nos diga cuál es el estado de este proyecto, quizás lo conozcamos mejor que él en algunos casos”, dijo, pretendiendo darle un mensaje de atención y amenaza al gobierno del Líbano. A la luz de la perspectiva de resolver el problema económico y de las riquezas en el agua con Israel, que permitiría al Líbano extraer gas del Mediterráneo, Heiman le advirtió al gobierno libanés que ellos no sabían lo suficiente sobre la proliferación de fábricas para mejorar la precisión de los misiles y cohetes que Hezbolá había establecido.

El primer ministro Netanyahu ya ha insinuado que si estas fábricas no se eliminan, Israel puede atacarlas. Muchas de las fábricas están ubicadas dentro de la población civil que puede sufrir las consecuencias. Heiman dijo explícitamente que incluso Nasrallah no sabía lo suficiente sobre este proyecto y estaba engañando al gobierno libanés. Todo el Líbano, insinuó, pagará un alto precio por esto.

En el sector palestino, como dijo el jefe de Inteligencia Militar, Hamás se ve realmente disuadido, pero entienden que por globos incendiarios el primer ministro y el ministro de defensa Netanyahu, no irá a la guerra la víspera de las elecciones. Incluso en Judea y Samaria hay un estancamiento que continuará hasta que Abu Mazen muera o renuncie o haya un incidente que encienda el área.

Relaciones Irán-Iraq

Lo que dijo el jefe de Inteligencia Militar sobre los rusos (“crean fricción de manera semi-deliberada y buscan ser relevantes para su solución a través de la presencia en la región”), también ha tocado el tema de su fricción con los iraníes en Siria, que explotan para presionar a más y más activos y concesiones económicas en Siria, y lo hacen gracias a la presión de un Assad desganado. También presionan para nombrar a comandantes de alto rango para ocupar puestos clave en el ejército sirio, y utilizan a Israel como un medio para presionar a Assad y a los iraníes, para que acepten lo que ellos quieren que es un acuerdo tras el cual podrán absorber los logros de reconstrucción de Siria con la financiación de Arabia Saudita, Emiratos Árabes Unidos, Qatar y Kuwait.

Los iraníes no tienen muchas opciones. Dependen de Rusia, a través de la cual todavía logran exportar petróleo para llenar las arcas estatales. Los rusos compran petróleo barato de Irán, lo introducen de contrabando en el sur de Rusia y luego lo venden como petróleo ruso a un precio mayor para los consumidores de todo el mundo. Los iraníes reciben las ganancias de los productos rusos, debido a las sanciones financieras de Trump. Siendo así, Rusia gana dos veces, también por la venta de armas al ejército sirio y a Irán.

En una situación así, Israel no tiene razones para protestar: Rusia está limitando económica y militarmente a Irán en Siria, y la próxima semana Putin enviará a su asesor de seguridad nacional a Jerusalén para discutir con el asesor de seguridad nacional de Trump, John Bolton y con el jefe del Consejo de Seguridad Nacional de Netanyahu, Meir Ben Shabat sobre “el futuro de Siria, incluida la presencia de fuerzas extranjeras en él”. Además, Trump está endureciendo las sanciones contra Irán. Todo lo que nos queda es bajar el perfil y seguir a través de nuestras fuerzas de inteligencia las iniciativas militares nuevas-viejas de Qassem Suleimani en Irak.

Irak es “el próximo paso” para los iraníes. El gobierno chiíta les presta mucha atención, aunque temen perder a los estadounidenses y al líder chií Muqtada Al-Sadar, a quien no le gusta ser un enviado iraní, si optan por apoyar abiertamente a Teherán. Pero el banco central iraní firmó un acuerdo de cooperación con el banco central en Bagdad, que ayudará a Irán a evitar las sanciones de Estados Unidos. Ya existen acuerdos que establecen un corredor terrestre a Siria a través de Irak (por ejemplo, el ferrocarril de Irán a Basora en Irak) y existe un acuerdo para suministrar electricidad iraní a Irak.

En la esfera militar, las milicias chiítas en Irak, financiadas por Irán, están listas para saltar a Siria (algunas de ellas ya están allí) y en el Líbano en caso de una confrontación con Israel. La siguiente etapa podría ser el establecimiento de plantas de fabricación para construir cohetes exactos para que las milicias chiítas las aprendan a operar. Al igual que los hutíes en el Yemen, se supone que se conviertan en un brazo operacional independiente lo suficientemente alejado de Israel como para que nos sea difícil golpearlas desde el aire y vía misiles tierra a superficie, pero lo suficientemente cerca para estar cerca nuestro, o cerca de Arabia Saudita y Kuwait, para representar una amenaza y presionar indirectamente a los estadounidenses.

Esta es la situación actual. Las Fuerzas de Defensa de Israel lo definen como “una situación en desarrollo” y, por lo tanto, el jefe de Inteligencia Militar cree que “la probabilidad de una guerra iniciada en el próximo año es baja” (esto también es cierto para Israel, no solo para nuestros vecinos hostiles, debido a las elecciones – Netanyahu no quiere pérdidas humanas en vista de setiembre). Pero la situación política en la región es muy inestable, principalmente debido a las sanciones estadounidenses contra Irán, y también es explosiva desde el punto de vista militar. Por lo tanto, una guerra podría estallar sin que ninguna de las partes tenga la intención de deteriorarnos hacia ella.

Fuente:hatzadhasheni.com