(JTA) – En sus 10 años colocando a jóvenes líderes palestinos e israelíes como pasantes con miembros del Congreso, ningún legislador le pidió a New Story Leadership uno de cada uno, hasta que Jamie Raskin lo hizo.
RON KAMPEAS
Este verano, Eran Nissan y Mohammed Ahmad han estado en prácticas en la oficina del demócrata de Maryland, vinculados por el trabajo constituyente.
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Sin embargo, nadie supo hasta bien avanzado el verano que los dos jóvenes tenían una conexión más profunda de lo que creían: cuando Ahmad describió las inquietantes intrusiones nocturnas de las tropas israelíes y sus perros de búsqueda entrenados en su aldea de Cisjordania, Azzun, se dio cuenta Nissan que él había dirigido tales patrullas mientras Ahmad vivía allí.
Que Nissan y Ahmad se hicieron amigos emocionó a Raskin, quien desde su elección de 2016 se ha hecho un nombre entre los miembros del Congreso por alentar la reconciliación israelí-palestina, la razón por la que pidió uno de cada uno. (Raskin también trae un número inusualmente alto de pasantes de verano, con más de 30 en sus oficinas y otros 100 vinculados a Democracy Summer, un programa de justicia social).
“Ese es un subproducto realmente maravilloso de este programa“, dijo Raskin en una entrevista, refiriéndose a la amistad entre Ahmad y Nissan. Hizo tiempo para almorzar con los dos hombres hacia el final de la pasantía.
Nissan, quien en Israel es empleado de Peace Now, era políticamente inteligente, mientras que Ahmad, que está cursando una maestría en enseñanza de inglés, había sido protegido de la política por sus padres debido a su creencia de que el activismo político representa un peligro para los palestinos de Cisjordania.
“Mo, como lo entendí, no estaba comprometido políticamente, su familia trató de mantenerlo alejado de la política“, dijo Raskin sobre Ahmad. “Me conmovió: Mo nunca antes había estado en Estados Unidos. Dijo que era un sueño trabajar en el Congreso de los Estados Unidos“.
Raskin, cuyos padres fueron prominentes en el movimiento por los derechos civiles, rutinariamente lleva a palestinos e israelíes a su oficina para trabajar juntos en negocios o empresas sin fines de lucro, en parte para mostrarle a su personal que se puede hacer.
“Soy un hijo intermedio y siempre me atraen los esfuerzos para unir a las personas“, dijo el legislador.
A principios de este año, encabezó una reunión a puerta cerrada entre los demócratas judíos en el caucus y las representantes Rashida Tlaib de Michigan e Ilhan Omar de Minnesota, dos congresistas musulmanas que respaldan el movimiento de boicot, desinversión y sanciones contra Israel.
“Es bastante fácil descubrir las razones por las cuales un grupo odia a otro“, dijo Raskin. “El verdadero desafío es encontrar un terreno común para construir un futuro positivo“.
Ese pensamiento, dijo, informó su voto, como progresista, por la reciente resolución no vinculante que condena el movimiento BDS.
“No necesitamos mutuos boicots y hostilidad, sino más bien compromiso y organización y trabajo común“, dijo Raskin, profesor de derecho constitucional. “Soy el académico y siempre me he opuesto a la idea de que progresaremos aislándonos unos de otros“.
New Story Leadership, financiado principalmente por pequeñas donaciones de la zona de Virginia-Maryland-D.C., ha graduado a cerca de 100 pasantes en la última década, todos colocados con demócratas, a pesar de lo que su director, Rawan Odeh, dijo que fue un esfuerzo concentrado para traer a un republicano a bordo. Un destacado miembro del Partido Republicano estaba programado para traer a un pasante este verano, dijo, pero se retiró en el último minuto debido a la óptica de comprar un programa de diálogo en un momento en que la administración Trump ha reducido los fondos para los programas tradicionales de convivencia.
Está inspirado en un programa más antiguo de Irlanda e Irlanda del Norte que ha producido al menos un famoso graduado: Leo Varadkar, taoiseach de Irlanda o primer ministro. Odeh, quizás quijotescamente, tiene esperanzas similares para el programa israelí-palestino, y señala que los ex alumnos se mantienen en contacto para ayudar a seleccionar pasantes y ejecutar una serie de programas en Israel. Uno de los programas es un estudio de yoga mensual que reúne a israelíes y palestinos en Beit Jallah, el pueblo entre Jerusalén y Belén.
Un evento de New Leadership Story con ocho pasantes contando sus historias llenó una sala de conferencias de Hill en una noche inundada de tormentas.
“Tendemos a atraer a los israelíes más izquierdistas, aquellos que tienen conciencia y comprensión de lo que la ocupación representa para el pueblo palestino“, dijo Odeh.
Los legisladores participantes que pudieron tomarse un tiempo de una concurrida noche de votación en el Hill prodigaron elogios a sus pasantes; entre ellos estaban Tlaib y Omar. Los palestinos, particularmente, estaban enamorados de Tlaib, cuya familia es de Cisjordania.
“Por primera vez en mi vida, pude ver a alguien que se parece a mí, que habla como yo, que soy yo, en el poder“, dijo Thawra Abukhdier, un interno de Jerusalén.
Ahmed y Nissan se unieron como pasantes, asumiendo las tareas que se espera de los pasantes del Congreso: lo más estimulante (asistir a la gran cantidad de sesiones informativas que llenan el calendario de verano) y lo menos, como responder llamadas de los constituyentes, donde encontraron curiosidad por sus acentos.
Nissan recordó una reunión con una delegación de Christians United for Israel, un grupo que apoya la política israelí más agresiva, a una distancia considerable de sus propios puntos de vista políticos.
“Fue fascinante escuchar cómo la gente habla sobre el conflicto“, dijo.
Fue durante la preparación para el evento de Capitol Hill que Nissan y Ahmad descubrieron su conexión más profunda.
“Recorrimos la sala y nos presentamos“, recordó Nissan en esa sesión. Cuando Ahmad relató su historia de incursiones nocturnas, Nissan se dio cuenta de que “yo fui ese soldado docenas de veces“. Israel dice que tales incursiones son necesarias para defender a los civiles israelíes y atrapar a quienes intentan dañarlos.
“Eran me dijo que pudo haber sido uno de los soldados detrás de las puertas“, recordó Ahmad. Azzun es un pueblo cerca de Qalqilya en el norte de Cisjordania.
Un miembro de la audiencia en el evento de Capitol Hill le preguntó a Ahmad, inevitablemente, ¿cómo te hizo sentir eso?
“Estar enojado no es la solución“, dijo.
De la traducción (c)Enlace Judío México
Prohibida su reproducción
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