Enlace Judío México e Israel – Con la presión para poder lograr una formación de gobierno, el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, pidió este viernes a los votantes israelíes de derecha no dar ni un voto al partido radical Otzma Yehudit.
En un mensaje de video publicado en sus redes sociales, Netanyahu advirtió al electorado que un voto por Otzma Yehudit, es un voto perdido.
“No tiren su voto con los partidos pequeños que no cruzaran el umbral electoral”, alecciona el mandatario al lado de un encuestador israelí ligado al Likud. Afirma que en vista de encuestas analizadas por el partido, “está claro sin duda alguna que Otzma no pasará el umbral electoral”.
La ley israelí exige a todo partido conseguir al menos el 3.25 por ciento de la votación válida emitida el día de las elecciones para poder ingresar a la Knéset. Dicho porcentaje corresponde al mínimo 4 escaños en la cámara legislativa.
Si bien el partido ha logrado cruzar el umbral electoral por el mínimo en algunas encuestas desde el jueves de la semana pasada, otras a la par indican lo que fue firme y claro por semanas: Otzma Yehudit no logrará llegar a Givat Ram tras el 17 de septiembre.
“De acuerdo a las últimas encuestas, no hay ninguna posibilidad de que cruzarán el umbral electoral. Esto es seguro”, insiste Netanyahu en el video. “No tiren su voto a la basura”, concluye.
A pesar de que el Likud podría ser el partido con más escaños ganados, arriba de 30, el bloque de derecha no la tiene fácil para poder formar un gobierno luego de las elecciones, según las encuestas. Que electores israelíes de derecha voten por partidos de este espectro sin posibilidad para entrar a la Knéset, representa por ello una amenaza para los partidos grandes que se disputan hasta un escaño en una situación como la actual en la política israelí.
En su mensaje, Netanyahu también recalcó su voluntad de que no se establecerá un gobierno de izquierda en Israel, y advirtió sobre la posibilidad de la llegada al poder del partido árabe Lista Conjunta. “Solo hay un único camino para evitar esto: voten por mí. Voten Majal”, dijo, nombrando la palabra de la boleta del Likud.
Con este pronunciamiento de Netanyahu parece culminar la historia de acercamiento del Likud a Otzma Yehudit, partido acusado de racismo e incitación al odio.
En febrero pasado, semanas antes de las primeras elecciones para la Knéset de este año, Netanyahu empujó al partido de derecha Habait Hayehudi a acoger a Otzma Yehudit con el fin de evitar la pérdida de votos en la derecha. La medida atrajo críticas dentro y fuera de Israel a Netanyahu por aliarse tácitamente con el partido liderado por herederos ideológicos del occiso rabino Meir Kahana.
De esta alianza surgió la Unión de Partidos de Derecha, que tras dichas elecciones obtuvo 5 escaños, de los cuales ninguno provino de Otzma Yehudit. Sin embargo, tras la disolución de la Knéset en mayo y la nueva convocatoria a comicios, Otzma Yehudit decidió salir de la alianza y correr por su cuenta.
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