El Tehilim es uno de los libros más bellos de la historia, escrito por el Rey David y con una poesía que ha cautivado los corazones de millones. El Salmo 150 es uno de los más bellos.
De acuerdo a varias fuentes bíblicas, cada uno de los salmos tienen una función específica, que ayuda a su orador con ciertas dificultades que vivimos normalmente y en este caso, el salmo 150, sirve especialmente para agradecer a Dios.
También existen salmos para purificar el corazón, tener éxito en el trabajo, curar y mejorar la vista, así como conseguir milagros.
Este Tehilim (Salmo) proviene de la traducción del Tanaj de Editorial Sinai y contiene la traducción más fidedigna del Tehilim de la Torá.
Salmo 150
(1) ¡Aleluya! Alabad a Dios en Su Santuario. Alabadle en el firmamento de Su poder.
(2) Alabadle por Sus poderosos hechos. Alabadle conforme a Su grandeza.
(3) Alabadle con el son de la trompeta. Alabadle con el arpa y la lira.
(4) Alabadle con el tamboril y la danza. Alabadle con instrumentos de cuerda y la flauta.
(5) Alabadle con resonantes platillos. Alabadle con címbalos sonoros.
(6) Alabadle al Eterno todo lo que tenga aliento. ¡Aleluya!
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