Líder de 7000 iglesias cristianas apoya a Israel desde México. Arturo Farela y CONFRATERNICE

Enlace Judío México e Israel – En entrevista exclusiva, el pastor evangélico Arturo Farela, cercano al presidente de México, explicó los motivos por los que los cristianos aman a Israel.

Arturo Farela es teólogo, activista y líder religioso. Encabeza CONFRATERNICE, organización que agrupa a más de 7000 iglesias de 800 asociaciones religiosas evangélicas, y ha sido considerado uno de los 300 líderes mexicanos más influyentes por la revista Líderes mexicanos.

Farela es conocido por su activismo jurídico en favor de indígenas chiapanecos perseguidos por sus creencias religiosas, así como por ser un amigo cercano del presidente de México, Andrés Manuel López Obrador.

En entrevista exclusiva para Enlace Judío, Farela habló de su amor por Israel, país al que viajó para maravillarse ya desde el aeropuerto, sorprendido por las fuentes de las que brota el agua, un recurso tan escaso en el desierto. También estuvo en el Monte de los Olivos, donde recordó la ascensión de Cristo.

Dice que en México hay entre 35 y 40 millones de cristianos evangélicos, “en el mundo somos decenas de millones que amamos a Israel y estamos dispuestos a dar la vida por el pueblo judío. No lo dudamos.”

¿Por qué los cristianos evangélicos aman a Israel?

En primer lugar, porque Jesucristo fue judío. Él es de la tribu de Judá. El león de la tribu de Judá. Sus apóstoles, todos fueron judíos. Jesucristo vivió 33 años y medio ahí, en Israel; él caminó un territorio más o menos como de 40 kilómetros y durante tres años y medio estuvo enseñando las buenas nuevas de salvación, porque de tal manera amó Dios al mundo que ha dado a su hijo unigénito para que todo aquél que en él cree no se pierda, mas tenga vida eterna.

Otra, que es igual de importante, en el libro del Génesis Dios le da una bendición especial a Abraham y le dice ‘el que te bendiga yo le bendeciré y el que te maldiga yo le maldeciré. Y en ti serán benditas todas las naciones de la Tierra’.

¿Qué papel tuvieron los cristianos en el reconocimiento de los Estados Unidos de Jerusalén como capital de Israel?

En primer lugar damos gracias a Dios de que Jerusalén haya sido reconocida como la capital de Israel y, con todo respeto, en la próxima reunión que Dios me permita reunirme con el presidente Andrés Manuel López Obrador, repito, con todo respeto, yo le recomendaría que también la embajada de México se trasladara a Jerusalén.

Para nosotros es muy importante que Israel haya renacido el 14 de mayo de 1948. Israel está cumpliendo 72 años. Es una profecía impresionante. Jesucristo, el señor de todo dice: ‘y de la higuera aprende. Cuando veáis que su rama reverdece, el verano está cerca’. La higuera representa al pueblo judío. Y el 14 de mayo de 1948 David Ben-Gurion dio un mensaje inolvidable de cómo Israel nuevamente renacía ante las amenazas de los pueblos vecinos, especialmente los árabes. Nosotros bendecimos a Dios por los 72 años que acaba de cumplir Israel como una nación libre, soberana.

¿Desde cuándo conoce a AMLO?

Aproximadamente hace 20 años. En las tres campañas que ha tenido lo he apoyado porque es un hombre íntegro, es un hombre justo, es un hombre que ama a los pobres, ayuda mucho a los pobres y siempre está en contra de la corrupción y está a favor de la verdad, de la justicia, de la equidad, y tengo poco más de 20 años de conocerlo, desde que era el jefe de gobierno en la Ciudad de México.

Usted ha estado repartiendo la Cartilla Moral, lo han señalado como un instrumento del Presidente…

Bueno, la Cartilla Moral es una publicación de Alfonso Reyes sintetizada que habla de principios y valores como el amor a la patria, el amor a la naturaleza, el amor a la familia, el amor a las leyes, al estado de derecho y bueno, tuve oportunidad de repartir la Cartilla Moral físicamente y electrónicamente, dentro de los miembros de CONFRATERNICE.

El presidente Andrés Manuel López Obrador es un hombre espiritual. Eso tenemos que descubrirlo. Porque él no se rige por la ambición del poder, esa ambición que mata, vulgar, que genera guerras. Él es un hombre que está a favor del amor, de la justicia, él mismo se ha dicho, ‘yo soy cristiano porque Cristo amó a los pobres, amó a los niños’…

Usted piensa que las instituciones religiosas deben ser parte de la política. ¿Por qué?

El Artículo 130 constitucional habla de la separación histórica del Estado y las Iglesias. Pero tres párrafos más adelante habla de los derechos políticos que tenemos los ministros de culto y las limitantes que tenemos para hacer proselitismo político. Yo creo que los ministros de culto como los laicos, los que no son ministros de culto, los feligreses, debemos de involucrarnos en la vida política, la vida pública, con el objeto de servir a la sociedad más y mejor. México es un país que necesita liderazgos honestos, íntegros, y dentro de la comunidad cristiana evangélica somos, tanto los que representa y no representa CONFRATERNICE, como dice el presidente Andrés Manuel López Obrador, no robamos, no mentimos y no traicionamos. Somos personas de integridad, con autoridad espiritual y moral.

¿Cuál es el papel de las iglesias evangélicas en la defensa de los indígenas de nuestro país? Cuéntenos un poco sobre Chiapas.

Chiapas es el estado donde más expulsados ha habido de sus comunidades y, especialmente un municipio que se llama San Juan Chamula. Yo lo conocí hace como 30 años y conocí a 584 indígenas que estaban expulsados en la Oficina de Asuntos Indígenas en San Cristóbal de las Casas, y tuve el honor de acompañarlos en su retorno. El ingeniero Cuautémoc Cárdenas, que era candidato a la Presidencia de la república fue el único líder político que los visitó. Pero también en otros municipios con en el Puerto y Aguacatenango, otros municipios y muchos más, los cristianos evangélicos han sido perseguidos por su fe en Jesucristo.

En lo que respecta a un servidor, cuando acompañé a los 584, conocí a un jovencito entre los retornados que se llama Marcelino Patishtán de la Cruz. Y Dios puso en mi corazón que lo consagrara como pastor de una iglesia que no existía pero que en ese momento Dios puso en mi corazón que diera una cantidad grande de dinero, un donativo para construir el primer templo evangélico. Se llama Príncipe de Paz, en el paraje Arbenza 1 y 2, ahora se llama Agua Azul. Marcelino Patishtán de la Cruz es descendiente de los mayas, los chamulas son descendientes directos de los mayas. Y también tuve la bendición de Dios de patrocinar la primera escuela para niños indígenas ahí, en San Juan Chamula (….) porque tenía 15 años que los caciques católicos tradicionalistas no permitían que los niños cristianos evangélicos entrasen a la escuela y tomasen sus clases.

Muchos creen que los mayas son una de las tribus perdidas…

Pues nada más véalos danzar. Yo soy de los que creen que los mayas es una de las tribus perdidas de Israel. Vea las pirámides. Chichén Itzá, impresionante. Una pirámide con tantos misterios. Impresionante, su construcción, eso también nos recuerda que (el pueblo de) Israel también construyó pirámides en Egipto.

¿Cómo pueden las iglesias cristianas apoyar a Israel desde México?

Todos los días oramos por Israel. Yo tengo un altar donde tengo mis biblias y tengo una menorá judía, en ese altar, y tengo una bandera de Israel. Lo primero es que oremos por Israel, por la paz de Jerusalén. Y número dos, que visitemos a Israel. Es importante el apoyo económico que podamos dar. Las divisas a la comunidad judía.

¿Tienen relación con la Comunidad Judía de México? ¿Con la Embajada de Israel?

Hay un nuevo embajador de Israel en México. Tenemos pendiente una entrevista con él. Espero que pronto se concrete. En otras ocasiones me he reunido con embajadores de Israel. Con la comunidad judía no tengo un contacto directo. He asistido a foros donde han participado diferentes judíos pero yo soy egresado de la Universidad Hebraica, aquí en la Ciudad de México. He cursado dos diplomados en la Universidad Hebraica. Aquí está, por Santa Fe, que es una zona preciosísima. Así que estamos muy ligados al pueblo judío. El rector, mi maestro inolvidable, Daniel Fainstein, lo recuerdo con mucho cariño. Y todos mis maestros fueron judíos y los recuerdo con mucho cariño.”