Enlace Judío – Ultraortodoxos y agentes de la Policía de Israel chocaron violentamente durante la noche del jueves y madrugada de este viernes en la ciudad de Bnei Brak tras infringir las pautas del confinamiento por COVID-19.
Los enfrentamientos se produjeron después de que una turba en la ciudad predominantemente ultraortodoxa hiriera a una oficial de policía que patrullaba la zona en un vehículo, informó The Times of Israel.
La turba rompió las ventanillas del coche, cortó los neumáticos, arrojó piedras y trató de abrir las puertas, según los reportes. Uno de los atacantes aparentemente huir con una bolsa arrebatada del interior del vehículo.
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Los oficiales viajaban en un automóvil sin identificación y algunos reportes los identificaron como detectives policiales. No quedó claro de inmediato si vestían uniformes de policía durante el incidente.
La multitud se había reunido previamente como parte de una protesta contra el cierre de una Yeshivá en la ciudad, la cual se había abierto en violación a las restricciones por COVID-19.
Aproximadamente una hora después del ataque inicial, una fuerza de la unidad de policía especial Yasam allanó una Yeshivá en la ciudad, aparentemente la misma escuela involucrada en el incidente anterior.
La entrada de los oficiales de Yasam provocó disturbios generalizados en la ciudad, con algunos residentes bloqueando carreteras y quemando botes de basura y neumáticos. Algunos residentes de Bnei Brak llamaron a los agentes de policía “nazis” y los agentes utilizaron métodos de dispersión antidisturbios, incluidas granadas aturdidoras.
Los ultraortodoxos involucrados en los alborotos pertenecen a una facción extremista de la secta jasídica Vizhnitz, reportes. Múltiples videos captados en el lugar de los hechos mostraron tanto las acciones de los ultraortodoxos como de los de los agentes de la policía.
Al menos seis personas fueron arrestadas por alterar el orden público y la policía dijo que en total, siete agentes terminaron por resultar heridos.
La violencia fue condenada por el primer ministro Benjamín Netanyahu, quien prometió actuar con “mano dura” contra quienes violen el confinamiento y agredan a la policía, pero sus aliados políticos ultraortodoxos arremetieron contra las fuerzas del orden.
אני מגנה בכל תוקף את האלימות כלפי כוחות משטרת ישראל שפעלו בבני ברק ומחזק את ידי גורמי האכיפה שדואגים לשמור על תקנות משרד הבריאות שמצילות חיים.
אנו נפעל ביד קשה נגד מפרי החוק, בראש ובראשונה נגד מי שהרים את ידו נגד השוטרות והשוטרים שלנו
— Benjamin Netanyahu – בנימין נתניהו (@netanyahu) January 21, 2021
“Lo que vimos esta noche en Bnei Brak es una campaña de venganza salvaje y agresiva por parte de oficiales incitados”, dijo en un comunicado el ministro de Vivienda, Yaakov Litzman, quien encabeza el partido religioso Yahadut Hatora.
Acusó a la policía de “castigo colectivo” contra los aproximadamente 200,000 residentes de Bnei Brak, pero dijo que toda la violencia debe ser condenada, incluso contra la policía.
“Sin embargo, condeno enérgicamente la orden de enviar una compañía de oficiales para descargar su enojo con los peatones con macanas, uso de granadas aturdidoras y cañones de agua. Durante todas las horas de la noche muchos estuvieron en peligro”, dijo.
Pidió al ministro de Seguridad Pública, Amir Ohana, y al jefe de la policía, Yaakov Shabtai, que buscaran “aclaraciones” sobre la conducta de los agentes.
Haciéndose eco de Litzman, el viceministro de Yahadut Hatora, Meir Porush, dijo que la policía se comportó “como si se tratara de una violenta campaña de venganza”.
El alcalde de Bnei Brak, Abraham Rubinstein, dijo que habló con Shabtai y exigió una investigación policial interna sobre el uso de granadas aturdidoras. También acusó a la policía de actuar con un “impulso de venganza” y afirmó que las acciones de los agentes no estuvieron ligadas en hacer cumplir el confinamiento..
“Bnei Brak no es una tierra de nadie donde se le permite enloquecer indiscriminadamente”, dijo Rubinstein al sitio de noticias Ynet.
Posteriormente, la policía emitió un comunicado rechazando las críticas y diciendo que sus agentes fueron “brutalmente atacados”.
“La escalada de violencia anoche en Bnei Brak equivale a un comportamiento criminal e imprudente”, dijo la policía.
La fuerza se comprometió a perseguir la “aplicación inflexible” del confinamiento y actuar contra cualquier violencia hacia los agentes.
La policía también dijo que los alborotadores estaban “avergonzando a todo un público” y dañando la salud de los israelíes ultraortodoxos al burlar el confinamiento y atacar a la policía.
“Desafortunadamente, este no es el único caso esta semana en el que los oficiales que hacen cumplir las ordenanzas sobre el coronavirus fueron atacados y el fenómeno solo está creciendo”, dijo Shabtai en un comunicado separado.
Shabtai prometió que la policía responderá “de manera decisiva” a los ataques a los policías para continuar haciendo cumplir las restricciones del confinamiento.
“La intensidad de la aplicación de la ley será determinada por el alcance de las violaciones y el comportamiento de los infractores y de acuerdo con la ley”, dijo.
El comisionado de policía también pidió aumentar las multas para las instituciones que desacaten el confinamiento y para que “toda persona que respete la ley” denuncie a los alborotadores de Bnei Brak.
“Si a uno le gustan o no las directrices sobre el coronavirus, el papel de la policía es hacerlas cumplir”, escribió Ohana en Twitter.
Ohana, miembro del partido Likud de Netanyahu, dijo que cualquier ataque a los oficiales “no puede pasar en silencio”. Agregó que la mayoría de los residentes de Bnei Brak respetan la ley y dijo que sufrieron una “injusticia” de la noche a la mañana.
La declaración se produjo después de un tuit anterior en el que Ohana condenó la violencia como un “crimen despreciable y la profanación del nombre de Dios por parte de sinvergüenzas” y prometió una respuesta rápida.
Aunque la mayoría de la comunidad ultraortodoxa en Israel acata las restricciones, algunos sectores y líderes suyos han desobedecido las instrucciones sanitarias gubernamentales desde inicios de la pandemia, generando constantemente choques con la policía.
Los críticos han acusado a Netanyahu de evitar tomar medidas enérgicas contra el público ultraortodoxo para no molestar a sus socios de coalición gobierno que provienen de este sector poblacional.
Reproducción autorizada con la mención siguiente: ©EnlaceJudío
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