Biden invita a Netanyahu a cumbre virtual sobre cambio climático

US Vice President Joe Biden (L) and Israeli Prime Minister Benjamin Netanyahu sit down for dinner at the prime minister's residence in Jerusalem on March 9, 2010. Israel approved today building 1,600 new settler homes in east Jerusalem, announcing the move as Biden met top Israeli officials to boost renewed peace efforts. AFP PHOTO/DAVID FURST (Photo credit should read DAVID FURST/AFP via Getty Images)

Enlace Judío – El presidente de EE. UU., Joe Biden, anunció una de las primeras grandes conversaciones sobre el cambio climático bajo su presidencia, a la que ha invitado a 40 líderes mundiales, entre los que se encuentra el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu.

Entre los 40 líderes mundiales también se encuentran figuras como el presidente chino Xi Jinping, el presidente ruso Vladimir Putin, la canciller alemana Angela Merkel y el presidente mexicano Andrés Manuel López Obrador.

Biden busca revivir un foro convocado por EE. UU. con las principales economías del mundo sobre el clima que George W. Bush y Barack Obama utilizaron y que Donald Trump dejó a un lado.

Se tiene previsto que el evento virtual se realicé entre el 22 y el 23 de abril.

La celebración de la cumbre cumplirá un compromiso de campaña y una orden ejecutiva de Biden. La administración está sincronizando el evento con su propio anuncio próximo del objetivo de reducir drásticamente las emisiones de carbón, gas natural y petróleo.

La administración Biden miró intencionalmente más allá de sus socios internacionales para las conversaciones, dijo un funcionario de la administración citado por la agencia AP.

“Es una lista de los jugadores clave y se trata de tener algunas de las conversaciones difíciles y las conversaciones importantes”, dijo el funcionario, hablando bajo condición de anonimato para discutir los planos de EE. UU. para el evento.

“Dada la importancia… que este tema es para el mundo entero, tenemos que estar dispuestos a hablar de ello y tenemos que estar dispuestos a hablar de ello en los niveles más altos”, agregó.

Trump sacó a EE. UU. de los acuerdos climáticos de París de la ONU de 2015 como una de sus primeras acciones. Eso convierte a la cumbre del próximo mes en la primera gran discusión internacional sobre el clima de un líder estadounidense en más de cuatro años, aunque los líderes en Europa y otros lugares han mantenido conversaciones.

Otro funcionario de la administración de Biden dijo que EE. UU. aún está decidiendo hasta dónde llegará la administración para establecer un objetivo de emisiones estadounidense más ambicioso.

La administración de Biden espera que el escenario provisto por la cumbre climática del Día de la Tierra del próximo mes, planeado para ser todo virtual debido a COVID-19, alentará a otros líderes internacionales a usarla como una plataforma para anunciar sus objetivos de emisiones más estrictos de sus propios países u otros compromisos, antes de las conversaciones sobre el clima global de la ONU en Glasgow.

En términos más generales, la administración espera que la sesión ayude a impulsar a los gobiernos a avanzar hacia formas específicas y políticamente soportables de reestructurar sus sectores de transporte y energía y las economías en general ahora para cumplir con esos objetivos futuros más difíciles.

La cumbre de EE. UU. no se trata solo “se trata de comprometerse a nivel de los líderes… enviar una señal desde la perspectiva de EE. UU. sobre lo serios que somos y poner nuestras propias cartas sobre la mesa de manera significativa”, dijo el funcionario, refiriéndose al próximo anuncio de Biden sobre un objetivo de emisiones de EE. UU. más agresivo. “Y esperando que los países se unan a nosotros”.

Al igual que los foros climáticos de las principales economías de Bush y Obama, la lista de invitados de Biden incluye a líderes de las mayores economías y bloques del mundo.

China es el principal emisor mundial de contaminación dañina para el clima, mientras que EE. UU. es el número 2 y Rusia es el número 4.

Biden, como candidato, se comprometió a invertir 2 mil millones de dólares para ayudar a transformar a los EE. UU. en una economía de cero emisiones para 2050, mientras crea empleos de energía limpia y tecnología.

El presidente y otros funcionarios de la administración han estado enfatizando las intenciones climáticas de EE. UU. durante las primeras conversaciones individuales con líderes extranjeros, y el enviado climático de Biden, John Kerry, se ha centrado en acelerar los recortes de emisiones a nivel internacional en la diplomacia en el extranjero.

Reproducción autorizada con la mención siguiente: ©EnlaceJudío

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