Bennett a Hamás: “Nuestra paciencia se ha agotado”

Enlace Judío – En una ceremonia conmemorativa anual este domingo por los caídos de la Operación Margen Protector de 2014, el primer ministro de Israel, Naftali Bennett, lanzó una advertencia al grupo terrorista Hamás de la Franja de Gaza.

En la ceremonia también estuvieron presentes el ministro de Defensa, Benny Gantz, el líder de la oposición Benjamín Netanyahu, los presidentes entrante y saliente Yitzhak Herzog y Reuven Rivlin, respectivamente, el jefe del organismo Yad Labanim, así como familiares de víctimas mortales, de acuerdo con Ynet.

“Han pasado casi 7 años y la guerra por nuestra existencia continúa”, expresó Bennett durante la ceremonia estatal.

“No tenemos la intención de hacer daño a quienes no nos atacaron para matarnos y no odiamos a quienes son rehenes de un grupo terrorista cruel y violento”, dijo Bennett en alusión a los palestinos gazatíes.

“A veces las mismas personas sirven como un escudo humano para esa máquina de matar. Pero al mismo tiempo, nuestros enemigos conocerán las reglas: no toleraremos la violencia, no toleraremos los ataques esporádicos con cohetes. No entenderemos ni aceptaremos sobre rebeldes.

“Nuestra paciencia se ha agotado. Los residentes de las cercanías a Gaza no son ciudadanos de segunda clase. Los que viven en Sderot, Ashkelón, Kfar Azza o Alumim tienen derecho a vivir en paz y seguridad como todos los ciudadanos del Estado de Israel“, agregó.

Gaza, enfatizó Bennett, “deberá de acostumbrarse a una aproximación israelí diferente, una de iniciativa, ofensiva e innovación”.

Bennett prometió que su gobierno hará todo lo posible por regresar a Israel los cuerpos de Oron Shaul y Hadar Goldin, soldados muertos durante la Operación Margen Protector, así como a los cautivos Avera Mengistu y Hisham al Sayed, quienes se cree están en manos de Hamás.

“Sé que han escuchado a lo largo de muchos años muchas promesas y declaraciones y las familias han sabido de decepciones y algunas de ellas muy amargas. Ahora es nuestro turno y son nuestros compromisos”, señaló.

Al elogiar a los soldados caídos por Israel, Bennett instó a la unidad nacional más allá de las desavenencias políticas. “Tenemos opiniones diferentes, eso está bien. Unidad es la palabra clave, unidad es la necesidad actual”.

Durante su intervención, Gantz aludió al caso del exsoldado Itzik Saydian y se comprometió a hacer todo lo posible por ayudar en su recuperación y rehabilitación a todos los veteranos israelíes afectados en el campo de batalla.

Sobre las Fuerzas de Defensa de Israel, Gantz aseguró que en los últimos años han reformulado sus capacidades y han alcanzado un poder ofensivo y defensivo sin precedentes, lo que ha dado lugar a grandes resultados operativos, como en la reciente Operación Guardián de los Muros.

Gantz aseguró que Israel continuará desarrollando las capacidades necesarias para defenderse de cualquier amenaza en coordinación con sus aliados, como EE. UU. y calificó a la elección de Ebrahim Raisi en Irán como una prueba esperada de la radicalización en ese país.

En su respectivo discurso, el presidente saliente Reuven Rivlin calificó a Hamás como un “grupo terrorista asesino, extremista y cruel que no dedica ni una piza de pensamiento al futuro y bienestar del pueblo de Gaza.

“Continúa teniéndolos como rehenes, continúa invirtiendo toda su energía en armamento militar, construyendo túneles y planeando ataques asesinos contra ciudadanos israelíes”.

No obstante, Rivlin advirtió: “No más. Se acabaron los días en que Hamás abre fuego y decide cuándo estará tranquilo. Tenemos un Ejército fuerte, moral y basado en valores… y cuando sea necesario, como vimos en la Operación Guardián de los Muros, golpeará a nuestro enemigo con mano dura, fuerte y decisiva”.

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