Enlace Judío México e Israel – La variante Delta ha desplazado al resto a una gran velocidad, lo que sugiere que es mucho más contagiosa. ¿Siguen siendo efectivas las vacunas contra esta variante? De eso y más conversaron Francisco Moreno Sánchez y Carol Perelman, en exclusiva.
Lo que más llama la atención de la variante Delta del SARS-CoV-2, dice Francisco Moreno Sánchez, en una conversación con Carol Perelman para Enlace Judío, es la rapidez con que reemplazó, en Reino Unido, a la variante Alfa. En cuestión de semanas, esta variante ha comenzado a predominar y ya se encuentra también en México.
Como demostró un estudio publicado en Australia, la variante Delta del virus causante del covid-19 es tan contagiosa que bastan 10 segundos de contacto, algo tan sencillo como cruzarse en el camino de un infectado, para que el contagio se produzca.
“Sí es preocupante porque tenemos que empezar a pensar qué tan contagiosa es, cómo vamos a defendernos, cómo impacta en las vacunas…”, señaló Moreno Sánchez.
El Premio Nacional de Salud 2020 dijo que estas variantes constituyen una llamada de atención: “Si no nos apuramos a vacunar, estas variantes pudieran escaparse a la protección de las vacunas”. Carol Perelman usó datos oficiales para señalar que México tiene 12 millones de dosis de distintas vacunas que todavía no se aplican, por lo que Moreno Sánchez urgió a las autoridades sanitarias a acelerar el ritmo de vacunación.
También hizo un llamado a la gente a vacunarse. Es un tema de solidaridad, dijo, pues al vacunarse no solo se protege quien lo hace sino que protege a otras personas y disminuye la capacidad del virus de seguir replicándose y mutando.
Respecto a si la variante Delta es más virulenta que las anteriores, es decir, si provoca cuadros más graves, el médico señaló que no hay evidencia que lo pruebe todavía. Sin embargo, admitió que sí se trata de una variante más contagiosa, lo que podría llevar a más personas al hospital y causar más muertes en números absolutos.
“No necesitamos un brote como el de diciembre para ponernos en jaque”, dijo Moreno Sánchez, pues la reconversión inversa de hospitales a no-covid podría dejar a la salud pública mexicana en un estado de vulnerabilidad contra un rebrote de la pandemia, impulsado por esta variante, la Delta, que ha demostrado ser hasta 100% más contagiosa que las versiones previas del virus.
La variante Delta y las vacunas
Moreno Sánchez, quien es jefe de Medicina Interna en el Centro Médico ABC, dijo que algunos estudios han mostrado que las vacunas de Pfizer y AstraZeneca muestran menos efectividad después de una primera dosis contra la variante Delta del SARS-CoV-2 que la que mostraban contra las variantes previas. Lo que, para él, es un indicio de que el virus puede mutar hasta volverse elusivo a las vacunas existentes.
A decir del especialista, el uso del cubrebocas debe seguir siendo obligatorio. “Me preocupa mucho Estados Unidos que, por cuestiones políticas, ya está tomando decisiones de suspender el (uso del) cubrebocas en vacunados, cuando hemos visto que los vacunados se infectan.”
El problema de covid, dijo, es que “la transmisión ha sido, en la mayor parte de los casos, presintomática o asintomática. Lo que estamos haciendo con los vacunados, es aumentar el número de asintomáticos.”
Es decir, las personas vacunadas siguen siendo susceptibles a infectarse y a infectar a otros. Moreno Sánchez señaló que muchas de ellas no saben que se infectaron porque no desarrollan síntomas. Por lo tanto, si prescinden del uso de cubrebocas, pueden seguir transmitiendo el virus que, en consecuencia, seguirá mutando, produciendo nuevas variantes y poniendo en riesgo incluso a quienes ya están vacunados.
Moreno Sánchez dijo que entiende que el cubrebocas resulte incómodo e incluso que se haya convertido en una especie de símbolo que representa a la pandemia, por lo que mucha gente no quiere seguirlo usando. Sin embargo, señaló que, “después de la vacuna, (el cubrebocas) es la medida más importante para evitar que el virus se siga dispersando.”
El médico mostró una gráfica comparativa en la que se reporta la efectividad de las vacunas de Pfizer y AstraZeneca contra las variantes Alpha y Delta, después de una y dos dosis. El estudio se realizó en el Reino Unido y muestra cómo ambas vacunas han perdido efectividad para prevenir el covid sintomático provocado por la variante Delta.
En el caso de Pfizer, la protección ofrecida tras la segunda dosis era, para la variante Alpha, de 92% en Escocia y de 93% en Inglaterra, mientras que contra la variante Delta, la eficacia disminuye a 83 y 88%, respectivamente.
Por su parte, la vacuna de AstraZeneca tenía, contra la variante Alpha, una eficacia de 81% en Escocia y 66% en Inglaterra, luego de dos dosis aplicadas, para prevenir cuadros sintomáticos; contra la variante Delta, los números bajan a 61 y 60%.
¿Hacia una tercera ola?
“Estamos viviendo un repunte“, dijo Moreno Sánchez sobre el incremento de casos de covid que, en las últimas semanas, se ha reportado en diversas entidades federativas. “¿En dónde empiezan los repuntes? En las zonas turísticas: Baja California Sur, Quintana Roo, Yucatán… son zonas turísticas en donde hay un gran movimiento y, evidentemente, hay falta de uso de medidas preventivas. México nunca cerró fronteras, ya lo sabemos, y en muchos lugares creen que venir a México es estar de vacaciones y no usar el cubrebocas y no usar ninguna medida preventiva”, agregó.
“Me ha llamado la atención que el número de casos no sea mayor”, dijo. “Las vacunas han funcionado pero también ponen en evidencia a los jóvenes. Ha sido muy triste porque los jóvenes, en mayo, decidieron que se había acabado el covid junto con las (conferencias) vespertinas (y) dijeron: ‘Hay que hacer graduaciones, hay que hacer fiestas, hay que celebrar que se terminaron las vespertinas’ y veamos lo que está pasando.”
Como responsable del área de Medicina Interna del Centro Médico ABC, Moreno Sánchez ha librado la batalla contra la pandemia en primera fila. Y en las últimas semanas, ha visto como cada vez más pacientes jóvenes llegan a requerir internamiento. Eso, dijo, es una señal de que la vacuna funciona. El virus ha dejado de ser eficiente para contagiar a personas vacunadas (la población de mayor edad) y ha empezado a infectar a los jóvenes.
También aclaró que los jóvenes que se encuentran hospitalizados en el ABC presentan comorbilidades, por lo que no puede deducirse que el virus se haya vuelto más virulento o que haya cambiado su “afición” por causar daños principalmente a personas de edades avanzadas.
También hizo un llamado a no aplicarse una tercera dosis de la vacuna y a no mezclar biológicos. Dijo que, más que aprovechar que Estados Unidos tiene dosis de sobra, deberíamos de considerar que está mal que Estados Unidos tenga tantas vacunas, cuando a muchos países estas no han llegado.
Moreno Sánchez fue enfático: “La pandemia sigue y depende de nosotros que este repunte que tengamos no sea mayor. De 1100 casos que llegamos a tener, ayer tuvimos 5000. Entonces, ¿qué tan alto va a ser? No lo sé. Espero que sea poco pero vuelvo a insistir: un nuevo repunte grande, en México, sería terrible: el sistema de salud, cansado, sin recursos (…). Cuidémonos un poco más.”
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