Enlace Judío – El contralor de Texas ordenó el jueves a su oficina determinar si la decisión de Ben & Jerry de cesar la venta de sus productos en los asentamientos israelíes en Judea y Samaria (Cisjordania) es una violación de las leyes estatales anti-BDS que requerirían sanciones.
“Si se determina que Ben & Jerry’s o Unilever se han involucrado en cualquier actividad proscrita bajo el Capítulo 808 del Código del Gobierno de Texas, mi oficina tomará todas las acciones apropiadas y requeridas de acuerdo con nuestras políticas y procedimientos”, dijo Glenn Hegar en un comunicado, de acuerdo con The Times of Israel.
En su decisión, que entrará en vigor a fines de 2022, Ben & Jerry’s dijo que sería “inconsistente con nuestros valores” continuar con las ventas en el “territorio palestino ocupado”, diferenciando entre los asentamientos que pretende boicotear e Israel propiamente dicho, donde espera continuar sus ventas.
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Pero el contralor señaló que la ley de Texas contra el boicot a Israel no hace tal diferenciación, definiendo la práctica como “negarse a tratar, terminar actividades comerciales o tomar cualquier acción que tenga la intención de penalizar, infligir daño económico o limitar las relaciones comerciales específicamente con Israel o con una persona o entidad que haga negocios en Israel o en un territorio controlado por Israel“.
La legislación citada, contra el movimiento de Boicot, Desinversión y Sanciones (BDS), fue aprobada en 2017 y requiere que Texas se deshaga de los fondos de pensiones de las empresas que boicotean a Israel o los asentamientos.
La empresa matriz de Ben & Jerry’s, Unilever, está incluida en la cartera de inversiones que asciende a 100 millones en fondos de pensiones, según datos de Bloomberg.
Esto parece alinear a Unilever para la desinversión como resultado de la decisión de Ben & Jerry’s, aunque Uniliver se ha distanciado de la decisión de la heladera.
La legislación anti-BDS de Texas también requiere la inclusión en una lista negra de las empresas que boicotean a Israel de los contratos más importantes con el estado, y Hegar dijo que su oficina examinaría si tiene algún contrato con Ben & Jerry’s o Unilever que deba anularse.
“Los tejanos han dejado muy claro que están con Israel y su pueblo. Estamos en contra de todos aquellos que desean socavar la economía de Israel y su gente”, dijo el contralor, y recomendó que los tejanos busquen otras opciones de helado en lugar de “las cosas caras y engreídas hechas por una empresa de propiedad extranjera que comenzó en Vermont”.
Un portavoz del gobernador republicano de Texas, Greg Abbott, dijo: “La decisión de Ben & Jerry’s de boicotear partes de Israel es vergonzosa y un insulto al aliado más cercano de EE. UU. en el Medio Oriente… Unilever, la empresa matriz de Ben & Jerry’s, debe revertir esta decisión mal concebida”.
Texas es el primero de 33 estados con leyes anti-BDS en anunciar que planea tomar medidas contra Ben & Jerry’s por su boicot a los acuerdos.
El anuncio del contralor se produjo 3 días después de que el embajador israelí en los EE. UU., Gilad Erdan, escribiera cartas a cada uno de los gobernadores de esos 33 estados, instándolos a actuar contra Ben & Jerry’s de conformidad con esas leyes.
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