Enlace Judío – La atleta israelí Lonah Chemtai Salpeter estuvo cerca de llegar al podio en el maratón femenino de 40 kilómetros de los Juegos Olímpicos de Tokio celebrado este viernes, sábado tiempo local, en el Parque Odori de la ciudad de Sapporo.
Salpeter, quien era una de las esperanzas de Israel para cosechar una medalla, arrancó en el liderato del maratón de 42 kilómetros y mantuvo el paso a la cabeza junto con las eventuales ganadoras hasta el kilómetro 38, cuando su cuerpo ya no aguantó más y aflojó el paso ante un desgaste que no quedó claro.
De mantenerse entre la posición 2 y 4 hasta ese momento, terminó en la posición 66 de 88, a 21 minutos de la ganadora del oro, la keniana Peres Jepchirchir, quien poco antes de la parada de Salpeter comenzó a despuntar hasta conseguir una ventaja final de 15 segundos sobre su connacional Brigid Kosgei, quien se llevó la plata.
Por su parte, la estadounidense Molly Seidel se llevó el bronce, a 26 segundos de la ganadora del oro.
Tras el maratón, Salpeter reveló al canal deportivo israelí 5SPORT la razón que la empujó a irrumpir su exitosa ruta: “A unos kilómetros de la final comencé a sentirme del estómago y no pude continuar, eso fue lo que me limitó.
“Me dije a mí misma que no me rendiría, que debería de cruzar la línea de meta. Soy una deportista, así que para mí era importante finalizar. Hice mi mejor esfuerzo… no fue el calor lo que me molestó, es solo algo que me sucedió. Si no hubiera sido por mi estómago, podría haber luchado por una medalla”.
Salpeter, quien pidió perdón a los israelíes que la apoyaron, detalló que tras descansar alrededor de 20 minutos luego de frenar la marcha en el kilómetro 38 por el malestar en el estómago, decidió continuar adelante sin presionarse. “Acepto lo que pasó como un hecho, no estoy decepcionada. Siempre quedas con la cabeza en alto y sigues adelante”.
También dentro de la lista general compitió la israelí Maor Tiyouri, quien quedó en la posición 48, a más de 10 minutos de la ganadora keniana.
En la competencia participaron las atletas mexicanas Úrsula Sánchez, quien quedó en el lugar 64, Daniela Torres, quien quedó en el 65, y Andrea Ramírez, quien abandonó la carrera.
Nacida en Kenia, Salpeter se mudó a Israel en 2011 y luchó por la ciudadanía durante años. Finalmente la recibió en marzo de 2016 después de ganar el maratón de Tel Aviv, lo que le permitió competir por Israel en los Juegos Olímpicos de Río de 2016 poco después del nacimiento de su hijo, Roy.
Sin embargo, no pudo completar el maratón en esos juegos después de sufrir dolores agudos en el pecho, probablemente debido a la leche materna que llevaba.
En marzo de 2020, Salpeter fue la primera mujer en cruzar la línea de meta en un maratón de Tokio.
Salpeter terminó esa carrera en 2:17:45, estableciendo un nuevo récord femenino para la carrera. La puntuación fue la octava mejor de todos los tiempos en el maratón femenino.
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