“No duraré mucho más”: Abogada israelí clama al gobierno desde cárcel de Bielorrusia

Enlace Judío.- Una mujer israelí encarcelada durante más de un mes en Bielorrusia bajo sospecha de intentar contrabandear una pequeña cantidad de marihuana medicinal al país ha implorado a los funcionarios israelíes que intervengan en su nombre, diciendo que es posible que no sobreviva tras las rejas por mucho más tiempo.

Maya Rayten-Stol, atrapada con 2,5 gramos de marihuana medicinal en el aeropuerto de Minsk, dice que sufre un dolor insoportable y se enfrenta a duras condiciones en la prisión del castillo de Pishchalauski.

“Mi salud está menguando. Ya no puedo quedarme aquí y no duraré mucho más”, dijo Maya Rayten-Stol, una abogada que fue detenida en el aeropuerto de Minsk el 4 de noviembre con unos 2,5 gramos (menos de una décima de onza) de cannabis medicinal.

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Tras su arresto, según los informes, insistió a las autoridades bielorrusas que la marihuana que tenía en su poder estaba autorizada por el Ministerio de Salud y trató de mostrar documentos para probar su afirmación, pero fue ignorada. Ella sufre de varias condiciones no especificadas, según una carta de otros abogados enviada a funcionarios israelíes en su nombre.

Según la ley bielorrusa, podría enfrentar de tres a cinco años de prisión, publicó The Times of Israel.

מצילים את הישראלית, מאיה רייטן-סטול, עם מוגבלות, שמוחזקת במעצר בתת-תנאים בבלארוס, כי החזיקה קנאביס רפואי ברשיון ממדינת ישראל!

היא נעצרה לפני חודש בבלארוס, כי נמצאו אצלה כ-2.5 גרם של קנאביס. היא הצהירה שהוא ברישיון משרד הבריאות הישראלי.

איך מה שישראל נותנת ברשיון-מוגדר עבירה?! pic.twitter.com/30nn6s1nom

— אורן הלמן (@orenhelman) December 7, 2021

Retenida en la famosa prisión del castillo de Pishchalauski, conocida como el principal centro de detención de nuevos juicios del país, donde están detenidos los activistas políticos arrestados, Rayten-Stol escribió en su carta que su celda tiene solo 12 metros cuadrados (129 pies cuadrados) de tamaño y que la comparte con otras tres mujeres que solo hablan ruso. No se le permite salir de su celda, excepto durante una hora y media en el frío exterior.

“Cada día aquí se siente como un año que pasa”, escribió. “La comida aquí no es kosher y no la toco”.

Rayten-Stol escribió que le administran inyecciones diarias para los dolores en la pierna, pero que no es suficiente sin los medicamentos adicionales que le recetan en Israel, junto con la marihuana medicinal.

“Estoy sufriendo aquí, experimentando una agonía insoportable y estoy loca de preocupaciones por mis hijos, por mis amados padres ancianos… y por mi oficina, debido a mi responsabilidad con mis clientes”, escribió.

Rayten-Stol dijo que había visitado Minsk varias veces en los últimos meses sin incidentes antes de su arresto.

“Extraño inmensamente a mis queridos hijos Ido y Lia y oí que han mostrado fuerza y ​​madurez extraordinarias dadas las circunstancias”, agregó. “Me dan la fuerza para seguir aquí, pero mi resiliencia también tiene límites y esos límites se acercan”.

“Les suplico un doloroso grito para que los funcionarios del gobierno actúen con todo su vigor para poner fin al infierno por el que estoy pasando aquí”, escribió Rayten-Stol.

A fines del mes pasado, el Ministerio de Relaciones Exteriores dijo que había estado en contacto directo con la familia de la detenida y que el embajador de Israel en Bielorrusia, Alon Shoham, había visitado a Rayten-Stol en la cárcel.

En enero de 2020, las autoridades rusas acordaron liberar a una viajera israelí que había sido atrapada con nueve gramos de marihuana en su equipaje mientras esperaba un vuelo de conexión, luego de una intensa campaña diplomática y mediática.

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