El mundo vive su peor crisis de desplazados desde la II Guerra Mundial. Una organización judía les ayuda a rehacer sus vidas

Enlace Judío México e Israel – Más de 100 millones de personas se encuentran desplazadas en el mundo actualmente. Una organización judía estadounidense busca brindarles ayuda para que puedan rehacer sus vidas.

Se trata de HIAS, y conversamos con tres de sus miembros para saber más sobre cómo lleva a cabo su misión.

Hace más de 140 años, judíos estadounidenses fundaron HIAS, con la misión de rescatar y acoger a otros judíos que venían huyendo de la persecución en Rusia y Europa del Este. Desde entonces, la organización ha logrado asistir a 4.5 millones de personas en todo el mundo.

Las cifras las comparte Noah Gottschalk, director senior de Relaciones Judías Internacionales de HIAS, en entrevista exclusiva con Enlace Judío.

“Todo este trabajo está basado en nuestros valores y nuestra historia judía”, agrega y enumera: acogimiento, justicia, empatía, compañerismo, resiliencia…

“Tras estos años hemos llegado a un punto en que, gracias a Dios, no había tantos judíos que necesitaban la ayuda de HIAS para salir de sus países. (Entonces) tuvimos un momento para tomar la decisión: cerrarnos como organización o aumentar nuestra misión para también ayudar a los no judíos. Y hace como 20, 30 años eso es lo que hicimos, decidimos aumentar la misión y empezar a trabajar con gente de otras religiones.”

HIAS tiene presencia en 22 países y México es uno de ellos

La directora de HIAS México, Blanca Lomelí, quien también se encuentra presente en esta entrevista que se realiza por videoconferencia, nos cuenta un poco sobre la historia y la misión de esta representación.

“Estamos en México apenas desde agosto de 2019. Somos una organización relativamente joven en el país. Empezamos en ese año con trabajo de protección legal, con un equipo legal de abogados, abogadas paralegales, con un equipo de psicología también, que atiende temas de salud mental y apoyo psicosocial, y también con un equipo de violencia basada en género.”

HIAS México, nos cuenta Lomelí, trabaja “para para atender, pero también para prevenir y mitigar los riesgos de violencia basada en género. También tenemos trabajo en emergencias. Hemos atendido algunas emergencias en el país, sobre todo cuando se forman los campamentos de migrantes, y de inclusión económica, es un componente muy pequeño que tenemos de otorgar fondos a personas vulnerables, sobre todo a personas sobrevivientes de violencia de género.”

En apenas tres años de vida, “creo que nos hemos consolidado como una de las organizaciones, yo diría más importantes de trabajo con personas migrantes y desplazadas. Atendemos a población extranjera, sobre todo, que viene a México a buscar refugio o que viene a México a tratar de llegar a la frontera de Estados Unidos para luego buscar asilo en ese país.”

Pero en México también hay desplazados. “También atendemos a población local mexicana, que son desplazados internos por temas de violencia o por desastres naturales o por un tema económico. Ahorita tenemos presencia en 14 ciudades del país, o sea, crecimos de cuatro, cuando iniciamos, en agosto del 2019, a 14 en la actualidad.”

Los derechos de los migrantes

Con equipos pequeños pero comprometidos, dice Lomelí, HIAS México tiene entre sus tareas proveer a los desplazados y a los migrantes de la información legal que necesitan para poder ejercer sus derechos básicos, que no se pierden con el cruce de una frontera.

“Muchas veces (los desplazados) no saben qué derechos tienen (…). El Programa de Protección Legal incluye desde orientaciones, o sea, donde hacemos pláticas grupales para personas. Nosotros vamos a los albergues donde se concentran o vamos a las plazas donde se concentran, a los espacios públicos donde están presentes y hacemos información general sobre lo que son los derechos, sobre lo que es el acceso a refugio y sobre lo que es el contexto.”

Previsiblemente, “una de las orientaciones más frecuentes que hacemos es sobre el contexto en la frontera norte. Qué es lo que está pasando, si está la frontera cerrada, si no está cerrada. Además de eso, además de hacer esta orientación, hacemos asesorías individuales también, cuando las personas tienen más preguntas o quieren exponer algún caso en particular.”

Pero no solo ofrecen orientación general: “por supuesto, también hacemos representación, apoyamos con temas de refugio en el país. Igual hay muchas personas que deciden que México es el país donde desean quedarse, ya sea porque aquí quieren estar o porque vieron sus sueños de cruzar la frontera frustrados y deciden quedarse acá. Entonces, nosotros le damos la orientación necesaria para saber cómo pasar por este proceso de refugio en México.”

Las historias que el equipo de HIAS presencia o de las que se entera cotidianamente incluyen “una cantidad muy, muy larga de abusos, de robos, de violaciones a mujeres, a sus hijos, a sus hijas; de secuestros, de extorsiones y de fraude. O sea, la lista no termina. Y hay personas que son víctimas, vuelven a ser víctimas, luego vuelven a ser víctimas. Y hay veces que las autoridades no hacen lo suficiente para para apoyarles o para para prevenir estas situaciones de vulnerabilidad.”

Sin embargo, “también hay historias de éxito, hay historias buenas, hay solidaridad, hay acogida; siempre, en las tragedias, vas a ver lo bueno de las personas y lo malo de las personas, como en las emergencias. Y creo que sí somos testigos de ambos sucesos a lo largo del país en donde estamos trabajando.”

El Shabat de los Refugiados

Raquel Nuchi, quien representa a HIAS en Venezuela, interviene ahora para contarnos que “desde hace dos semanas participaron dos sinagogas de México apoyando en el Refugee Shabbat, que Noah te puede comentar con detalle, pero precisamente escogimos para el Refugee Shabbat la parashá de Shalaj, que tiene que ver con el milagro de la partición del mar.”

Dice que fue “una excusa muy bonita, como una manera de poder decir que de acuerdo precisamente a lo que está diciendo Blanca, que cada uno puede hacer el milagro de otro, en un momento, alzando su voz, defendiendo los derechos humanos, haciendo, dando el primer paso para que las cosas mejoren.”

Agrega: “Así como hubo el milagro de que a través de los cantos ese Shabat de los Yehudim agradecieron porque Dios permitió que pudieran salvarse, así mismo estamos comprometidos con la misión de, como pueblo judío, defender a aquellos que hoy pasan la misma situación que nosotros.”

Los milagros, dice, pueden ocurrir, pero es mediante “la conjunción de los esfuerzos que puedan hacer organizaciones como HIAS y cada uno de nosotros sensibilizando por los derechos de las personas, estando pendientes de poder conectar y hacer cadenas de solidaridad para aquellos que la están pasando mal.”

Sobre este Shabat de los Refugiados, Noah amplía: “HIAS inició este programa hace cinco años, para ofrecer una oportunidad de conectar nuestra experiencia judía y la experiencia de la historia de la salida de los israelitas de Egipto con el fenómeno del desplazamiento mundial.

Más de 100 millones de personas desplazadas en todo el mundo

“Sabemos que hoy en día tenemos más de 100 millones de personas desplazadas en todo el mundo, que es la cifra más grande desde la Segunda Guerra Mundial. Entonces, es un momento muy importante para pensar en esta situación y cómo podemos responder como judíos y como gente que ya ha tenido esta experiencia.”

Más de 400 sinagogas en todo el mundo celebraron el Shabat de los Refugiados.

Entre ellas, las de las comunidades Sefaradí y Monte Sinaí, que se unieron a comunidades de Estados Unidos, Canadá, Sudáfrica, Europa y Venezuela en este acto simbólico de sensibilización sobre el fenómeno del desplazamiento forzado.

Raquel Nuchi aprovecha el espacio para agradecer a los rabinos Abraham Tobal y Moisés Chicurel por sus sermones dedicados al tema de los refugiados, y adelantó que el rabino Leonel Levy, de la comunidad Bet El, abrirá un espacio “para que podamos compartir información sobre HIAS.”

Involucrar a las personas en una lucha tan importante como la de HIAS no siempre es fácil

Sin embargo, “cuando la gente escucha la magnitud de la operación, escucha que en el año 2021 se ayudaron a 1,200,000 personas, que 260,000 personas en Ucrania están siendo apoyadas por HIAS (…), son cifras que muestran la capacidad instalada en cada país para ayudar, para generar protección.”

Son muchas las formas de unirse al trabajo y la misión de HIAS, que busca vincular la historia del pueblo judío como una fuente de inspiración para solidarizarse con otras poblaciones perseguidas, desplazadas, humilladas o exiliadas por motivos diversos.

Las aportaciones económicas son fundamentales pero no exclusivas. También se puede formar parte de los comités de bienvenida para hacer sentir acogidos a quienes han debido dejar sus tierras atrás, o hacer voluntariado diverso para facilitarle un poco a los desplazados el tránsito hacia su nueva realidad.

Si deseas contribuir de alguna manera con la misión de HIAS, puedes ingresar a www.hias.org, donde obtendrás más información.

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