Exjefe del Mossad pide la renuncia de Netanyahu

Enlace Judío – El exjefe del Mossad, Tamir Pardo dijo en una entrevista a la emisora pública Kan que el primer ministro Benjamín Netanyahu debe dimitir por el bien del país y pidió a “cada ciudadano israelí” unirse a las protestas antigubernamentales, informó Haaretz.

Afirmó que la mayor amenaza para Israel es la polarización. “Existe una profunda angustia de que nos estamos acercando al abismo. No soy la única voz, en mi opinión es la mayoría”.

Explicó que la ruptura en la sociedad israelí se debe a tres factores. El primero es el deseo de Netanyahu de anular su juicio.

“El primer ministro quiere cancelar su juicio y continuar en su cargo. No puedo entender cómo una persona que fue primer ministro durante mucho tiempo no comprende que lo único que debe hacer ahora es dimitir y dejar que su partido nombre a otra persona”, apuntó.

El gobierno de Netanyahu ha manifestado su intención de promulgar leyes que permitan a la Knéset anular las decisiones de la Corte Suprema de Justicia por una escasa mayoría de 61 votos en el Parlamento, así como iniciativas para dar el control de la selección de jueces al gobierno.

Esto ha provocado un amplio rechazo de la sociedad civil y del sector tecnológico israelí, así como de empresas de capital riesgo que ya han anunciado su intención de retirar sus fondos de Israel.

“Si [Netanyahu] quiere que el Estado de Israel siga prosperando, lo correcto sería que deje su cargo y vuelva a sus asuntos privados”, dijo Pardo, y añadió que, en su opinión, el mandatario debería haberlo hecho antes de la primera ronda de las cinco elecciones nacionales en los últimos años.

“Cada ciudadano israelí, sin excepciones debe salir a protestar. Todos los israelíes, judíos y no judíos, deben comprender el peligro que corre el país”, enfatizó.

Pardo fue nombrado jefe del Mossad, por Netanyahu en 2010 y trabajó en estrecha colaboración con el primer ministro.

Durante su servicio en la unidad de élite Sayeret Matkal, Pardo estuvo bajo el mando de Yoni Netanyahu, hermano mayor del primer ministro, y fue el último en verlo con vida antes de que fuera asesinado durante la Operación Entebbe en Uganda en 1976.

Pardo ha manifestado abiertamente su oposición al gobierno actual y participó, junto con otros generales retirados, en la manifestación de reservistas de las Fuerzas de Defensa de Israel frente a la Corte Suprema de Justicia la semana pasada.

En su opinión, otra causa de la ruptura es la visión de los ministros Itamar Ben Gvir y Bezalel Smotrich de que Israel debe ser un Estado desde el mar Mediterráneo hasta el río Jordán, “un Estado racista y terrible que no puede existir”, dijo.

Calificó la demanda de Smotrich de transferirle la Administración Civil en Judea y Samaria (Cisjordania) como “lo más torcido y el mayor generador de ira y anarquía que pondrá en peligro a Israel”.

Incluso si la división del ministerio fuera apropiada, dijo, “esto no es algo que se concluye con un acuerdo de coalición a medianoche. Hay muchos factores involucrados: el mundo que nos rodea, los derechos humanos. Es absolutamente claro para cualquiera con el coeficiente intelectual de un gato callejero que esto no puede funcionar”.

Nuestros “enemigos creen que nos hemos vuelto locos, [que] este país se destruirá a sí mismo”, agregó. “Vi un artículo publicado en Jordania muy acertado y dice que este país ha decidido destruirse a sí mismo”.

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