Madre de rehén de Gaza: la Cruz Roja actúa como “servicio Uber” para los liberados, no visita a los secuestrados

Rachel Goldberg, cuyo hijo, Hersh Goldberg-Polin, fue tomado como rehén por terroristas de Hamás en la rave del desierto Supernova el 7 de octubre, comparte varios detalles nuevos en una conferencia de prensa sobre el secuestro de su hijo.

Su marido, Jon Polin, fue al refugio de campo por primera vez esta semana para ver dónde Hersh y su amigo, Aner Shapira, intentaban esconderse junto con otras 27 personas.

“Veintinueve jóvenes fueron aplastados en este espacio”, dice Goldberg, describiendo la “pequeña habitación de hormigón”.

Los terroristas de Hamás primero lanzaron granadas de mano, luego lanzagranadas y luego dispararon con ametralladoras para matar al mayor número posible de personas en el refugio, afirma Goldberg. Shapira fue asesinado por una de las granadas, después de arrojarles de vuelta unas siete, publicó The Times of Israel.

Varias personas sobrevivieron escondiéndose debajo de los cadáveres y vieron que a Hersh Goldberg-Polin le volaron el brazo desde el codo hacia abajo, dice Goldberg. Esto fue confirmado en un video enviado a los padres de Hersh por Anderson Cooper de CNN.

Según les han dicho a ella y su marido, los rehenes son más valiosos si están vivos, y la sensación es que los rehenes heridos fueron llevados a hospitales.

“Sabemos que hay médicos y cirujanos muy capaces en Gaza“, dice Goldberg. “Lo que nos han explicado es que, aunque la lesión parece horrible, no es una cirugía complicada” y sólo implicaría que el cirujano amputara por encima de la parte irregular de la extremidad.

“Y luego necesitaría antibióticos, lo que por supuesto plantea la pregunta de si eso sucedió o sigue sucediendo”, dice Goldberg.

Goldberg también habla de la Cruz Roja, “haciendo un trabajo maravilloso como servicio Uber” para los rehenes liberados, pero la esperanza era que la organización médica internacional atendiera a los rehenes en cautiverio.

Goldberg dice que ver la liberación de los primeros grupos de rehenes es “el primer momento de respiro y un rayo de luz, un momento pequeño y esperanzador cuando vemos a estas personas regresar con sus seres queridos”.

Señala que ahora conocen a muchas de las familias de los rehenes.

“Conozco a estas madres”, dice. “Obviamente, me encantaría ver a Hersh ser uno de los liberados. Pero él no es una mujer ni niño.

“Es mi hijo, por supuesto”.

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