Hamás da confirmación positiva inicial a propuesta de acuerdo con Israel

Una delegación de altos funcionarios de Hamás llegó a El Cairo este jueves para conversar con funcionarios egipcios sobre un posible acuerdo con Israel para la liberación de los rehenes, informó The Times of Israel.

Según indicó el portavoz de la cancillería de Catar, Israel ha dado su aprobación a la propuesta de acuerdo y desde Hamás se ha recibido una inicial confirmación positiva al respecto.

La delegación está encabezada por el líder político de Hamás, Ismail Haniyeh, que vive en Catar, e incluye a los miembros de alto rango Mousa Abu Marzook y Khalil al-Hayya, informó el medio de noticias Al-Araby, con sede en Catar, citando una fuente egipcia anónima.

Los funcionarios de Hamás se reunieron con el jefe de la inteligencia egipcia, el mayor general Abbas Kamel, para discutir los detalles de una propuesta de acuerdo de rehenes que fue presentada al grupo terrorista de Gaza a principios de esta semana por mediadores qataríes y egipcios.

La propuesta del acuerdo fue elaborada durante una reunión en París la semana pasada en presencia de funcionarios israelíes y estadounidenses, así como de negociadores cataríes y egipcios.

La propuesta también fue discutida por el gabinete de guerra israelí a principios de esta semana y se discutirá nuevamente este jueves.

En El Cairo, las partes negociadoras deben discutir la duración de la posible tregua, entre otros detalles, incluido el número de prisioneros de seguridad palestinos que Israel deberá liberar a cambio.

Según Kan, los mediadores cataríes y egipcios están presionando para que se haga una pausa prolongada en los combates que duraría más de dos meses y que no terminaría antes del último día del mes sagrado musulmán del Ramadán, que será entre marzo y abril.

Se dice que los elementos clave del acuerdo no se han finalizado y que un punto central no identificado sigue sin resolverse.

Si bien Hamás ha dicho que no firmará ningún acuerdo a menos que Israel se comprometa a retirarse y poner fin permanentemente a la guerra, el primer ministro Benjamín Netanyahu ha prometido no retirar sus tropas hasta que se haya logrado una “victoria total”, que él define como la erradicación de Hamás.

Un funcionario palestino cercano a las conversaciones dijo el jueves que es poco probable que Hamás rechace la propuesta de alto el fuego en Gaza que recibió de los mediadores esta semana, pero no la firmará sin garantías de que Israel se haya comprometido a poner fin a la guerra.

“Espero que Hamás no rechace el documento, pero es posible que tampoco llegue a un acuerdo decisivo”, dijo el funcionario a Reuters, hablando bajo condición de anonimato.

“En cambio, espero que envíen una respuesta positiva y reafirmen sus demandas: para que se firme el acuerdo, debe garantizar que Israel se comprometerá a poner fin a la guerra en Gaza y a retirarse completamente del enclave”.

Es muy poco probable que Jerusalén esté de acuerdo con esto.

El acuerdo de rehenes previsto está diseñado para realizarse en tres etapas.

Citando un borrador del acuerdo propuesto leído por “funcionarios involucrados en las conversaciones”, The Wall Street Journal reportó que Estados Unidos está “presionando para lograr un acuerdo de alto el fuego que podría detener la guerra en Gaza el tiempo suficiente para paralizar el impulso militar de Israel y potencialmente preparar el escenario para una tregua más duradera”.

El acuerdo de tres partes que ambas partes están considerando comenzaría con una tregua de seis semanas en la que se exigiría a Israel que pusiera fin a todas las operaciones militares, incluida la vigilancia con drones.

Hamás liberaría a todos los rehenes civiles y los civiles palestinos de Gaza podrían moverse libremente por la Franja. La ayuda humanitaria, que actualmente prácticamente no puede llegar a la parte norte de la Franja, podría distribuirse sin limitaciones.

Durante la segunda etapa del acuerdo, las mujeres soldados de las FDI serían liberadas a cambio de una mayor ayuda humanitaria, asegurando que los hospitales, los servicios de agua y las panaderías pudieran reanudar sus operaciones con normalidad.

Hamás también ha exigido que Israel libere a 150 prisioneros de seguridad palestinos por cada rehén soldado liberado, según el informe, añadiendo que esa proporción es una de las cuestiones en discusión.

En la tercera y última etapa del acuerdo, Hamás devolvería a todos los hombres que considera soldados de las FDI, lo que incluye a todos los civiles cuya edad los haga elegibles para el servicio de reserva.

Hamás también devolvería los cuerpos de los rehenes muertos, de los que hay al menos 29, durante esta etapa final.

Hamás también exigirá a Israel que libere a un número indeterminado de prisioneros palestinos durante esta etapa final, y potencialmente exigirá que sean palestinos de alto riesgo que cumplan condenas por ataques asesinos, incluidos los capturados dentro de Israel el 7 de octubre.

Junto con la exigencia de Hamás de que la tregua conduzca a un alto el fuego permanente, se espera que la cuestión de los prisioneros palestinos sea una de las principales áreas de desacuerdo.

Netanyahu enfatizó el miércoles que Israel no aceptará un acuerdo “a cualquier costo” y que no pondrá fin a la guerra, no retirará a las FDI de la Franja de Gaza ni “liberará a miles de terroristas”.

Además, Hamás podría negarse a liberar a un pequeño grupo de rehenes y, en cambio, retenerlos como moneda de cambio futura o como escudos humanos.

El plan informado para una tregua de seis semanas sería la pausa más larga en los combates desde el 7 de octubre.

La única pausa en los combates que ambas partes acordaron con éxito desde el inicio de la guerra fue una tregua de una semana a finales de noviembre, durante la cual 105 civiles fueron liberados de su cautiverio a cambio de 240 prisioneros de seguridad palestinos, ninguno de ellos cumpliendo condena por asesinato o graves acusaciones de terrorismo.

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