Las Fuerzas de Defensa de Israel anunciaron este viernes que dos altos oficiales fueron destituidos y otros altos comandantes fueron formalmente censurados tras el ataque con drones contra los trabajadores humanitarios de World Central Kitchen en el centro de la Franja de Gaza a principios de esta semana, informó The Times of Israel.
La investigación del incidente del lunes por la noche, que dejó siete trabajadores humanitarios muertos, fue realizada por el Mecanismo de Evaluación de Investigación del Estado Mayor, un organismo militar independiente responsable de investigar incidentes inusuales en medio de la guerra.
La investigación encontró que el ataque fue ordenado contra el convoy de vehículos de World Central Kitchen debido a que los oficiales en el terreno sospecharon que se encontraban terroristas de Hamás en los vehículos, a pesar de no tener información de inteligencia, y en contra de las normas del ejército. Según la investigación, los oficiales no identificaron a los vehículos como pertenecientes a World Central Kitchen cuando se ordenó el ataque.
Los hallazgos fueron presentados el jueves por el general de división (res.) Yoav Har-Even al jefe del Estado Mayor de las FDI, Herzi Halevi, World Central Kitchen y embajadores de los países cuyos ciudadanos fueron asesinados.
Halevi ordenó la destitución del coronel (res.) Noji Mendel, jefe de personal de la Brigada Nahal en medio de la guerra, y del oficial de coordinación de potencia de fuego de la brigada, que tiene el rango de mayor, quien estuvo involucrado en la orden del ataque.
Además, Halevi reprendió al comandante del Comando Sur, mayor general Yaron Finkelman, por su “responsabilidad general por el incidente”, así como al comandante de la 162 División, general de brigada, Itzik Cohen y el comandante de la Brigada Nahal, coronel Yair Zukerman.
Según la investigación, el incidente comenzó alrededor de las 22.00 horas. del lunes, cuando un barco que transportaba unas 300 toneladas de ayuda de World Central Kitchen fue descargado en un embarcadero improvisado en el centro de la Franja de Gaza. Poco después, un convoy de camiones que transportaban los suministros comenzó a avanzar hacia una bodega donde se almacenarían los suministros.
La investigación de las FDI encontró que las tropas identificaron a un hombre armado que subió al techo de uno de los camiones y abrió fuego. Un video mostrado por las FDI a periodistas extranjeros parecía mostrar a una persona disparando con un rifle automático desde lo alto de un camión.
El convoy continuó su ruta acordada y se detuvo en el almacén conocido como “Hangar A”, donde, según el ejército, el hombre armado se bajó.
En ese momento, el comandante de la división de las FDI en el área intentó contactar a World Central Kitchen, dijo Har-Even a la prensa extranjera. Pero el oficial de seguridad de la organización benéfica en Europa no logró contactar al equipo en el terreno.
Después de que los camiones de ayuda y las camionetas que los escoltaban llegaran al “Hangar A”, un dron de la Fuerza Aérea de Israel detectó entre 15 y 20 personas fuera del almacén, y al menos dos fueron identificadas como armadas, según la investigación.
Uno de los oficiales concluyó que eran terroristas de Hamás, pero el comandante de la división le ordenó no atacar debido a su proximidad al convoy de ayuda.
Alrededor de las 23.00 horas, las camionetas comenzaron a alejarse del almacén, luego de descargar la ayuda humanitaria. Un vehículo se dirigió hacia el norte hasta el Hangar B, donde Har-Even dijo que dos o cuatro hombres armados fueron identificados entrando al almacén.
Justo antes de que las otras tres camionetas comenzaran a dirigirse hacia la costa, uno de los comandantes creyó erróneamente que un terrorista de Hamás había entrado en uno de vehículos. No había evidencia que indicara que el sospechoso estaba armado, y las imágenes de drones revisadas como parte de la investigación parecían mostrar que sostenía una bolsa, no un arma.
Las FDI dijeron que las tropas no identificaron los vehículos de escolta como asociados con World Central Kitchen, y al creer erróneamente que al menos en uno de ellos se encontraba un terrorista de Hamas, se llevó a cabo un ataque con drones alrededor de las 11:09 p.m.
Después del ataque inicial, se identificó a personas que salían corriendo del vehículo atacado y se metían en otro. Luego se llevaron a cabo ataques aéreos adicionales uno tras otro contra las otras dos camionetas de escolta de World Central Kitchen, a pesar de que no había información que indicara que había hombres armados en ellas, lo que constituyó una violación de los procedimientos de las FDI.
“El ataque a los tres vehículos se llevó a cabo en grave violación de las órdenes e instrucciones pertinentes”, dijeron las FDI.
El convoy de World Central Kitchen, había sido coordinado con las FDI, aunque la información sobre su ruta no fue transmitida por los altos comandantes a los oficiales en el terreno, quienes finalmente ordenaron el ataque.
Las FDI concluyeron que los hallazgos de la investigación muestran que el incidente “podría haberse evitado y, al mismo tiempo, quienes aprobaron el ataque estaban convencidos de que estaban atacando a hombres armados de Hamás y no a miembros de World Central Kitchen“.
“El ataque a los vehículos de ayuda es un error grave, que surgió de una grave falla, como resultado de una identificación errónea, un error en la toma de decisiones y un ataque contrario a las órdenes y normas de apertura de fuego”, dijo el ejército israelí..
“Expresamos nuestro profundo pesar por la pérdida y compartimos el dolor de las familias y de la organización World Central Kitchen. La vital actividad humanitaria de las organizaciones internacionales de ayuda es de suma importancia”.
“Continuaremos trabajando para coordinar y ayudar en sus actividades, garantizando al mismo tiempo su seguridad y salvaguardando sus vidas”.
“Las FDI enfatizan una vez más su compromiso de luchar sin concesiones contra Hamás, además de defender los valores de las FDI, las normas de la guerra y evitar dañar a inocentes. Las FDI aprenderán las lecciones del incidente y las implementarán”.
Como resultado, se decidió marcar los vehículos de ayuda con pegatinas especiales visibles con cámaras térmicas. El vehículo de World Central Kitchen tenía una pegatina con el logotipo de la organización, aunque no era visible para los drones de las FDI por la noche.
El incidente provocó indignación a nivel internacional, especialmente en los países cuyos civiles fueron asesinados.
Tras el ataque, World Central Kitchen anunció que suspenderá sus operaciones en Gaza, lo que marcó un serio revés en los intentos de Israel de acelerar la ayuda a la Franja.
Estados Unidos y otros aliados dejaron claro a Israel que el apoyo continuo a la guerra contra Hamás depende de que permita y facilite la ayuda a la población civil de Gaza.
Tras la publicación de la investigación por parte de las FDI el viernes, World Central Kitchen exigió una comisión independiente para investigar los asesinatos, diciendo que el ejército israelí “no puede investigar de manera creíble su propio fracaso”.
La organización elogió a Israel por asumir responsabilidad del ataque mortal y tomar medidas disciplinarias contra quienes estaban al mando, pero afirmó que las FDI han “desplegado fuerza letal sin tener en cuenta sus propios protocolos, cadena de mando y reglas de enfrentamiento”.
“Exigimos la creación de una comisión independiente para investigar los asesinatos de nuestros colegas de World Central Kitchen. Las FDI no pueden investigar de manera creíble sus propias fallas en Gaza“, dice el comunicado.
Las víctimas del ataque de las FDI contra un convoy de en Gaza: Saifeddin Issam Ayad Abutaha, Lalzawmi (Zomi) Frankcom, Damian Soból, Jacob Flickinger, James Kirby, James (Jim) Henderson y John Chapman. (World Central Kitchen )
En el ataque aéreo murieron tres ciudadanos británicos, un australiano, un polaco, un ciudadano estadounidense-canadiense y un palestino. Algunos viajaron por todo el mundo y participaron en esfuerzos de ayuda después de guerras, terremotos e incendios forestales.
World Central Kitchen identificó a las víctimas como Saifeddin Issam Ayad Abutaha, de 25 años, de los territorios palestinos; Lalzawmi (Zomi) Frankcom, 43 años, de Australia; Damian Soból, 35 años, de Polonia; Jacob Flickinger, 33 años, de Estados Unidos y Canadá; John Chapman, 57 años, del Reino Unido; James (Jim) Henderson, 33 años, del Reino Unido; y James Kirby, 47 años, del Reino Unido.
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