Raz Ben Amí, liberada en noviembre después de 54 días en manos de Hamás, habló este martes en una reunión del Comité de la Knéset sobre los derechos de la Mujer, informó Arutz Sheva.
“¿Conocen esa sensación de querer dormir sin lograrlo? Dar vueltas sobre el estómago, la espalda, un lado y luego el otro. Pero nada ayuda porque en el momento en que cierras los ojos, aparece una imagen que perturba tu sueño. Intentas parpadear varias veces para que desaparezca o piensas en otra cosa, pero no desaparece. Así es como he estado durmiendo durante 152 noches”, dijo Raz Ben Amí al Comité de la Knéset sobre la Condición de la Mujer.
“Durante las primeras 54 noches, no dormí nada porque un terrorista se sentaba con un arma y me miraba toda la noche o recitaba el Corán en mi habitación para que escuchara árabe en mi cabeza y no duerma. 152 noches que imagino la imagen de mi marido, Ohad, antes de irme a dormir, y no puedo cerrar los ojos porque tengo miedo de ver la expresión de sufrimiento en su rostro y saber que no tengo forma de ayudarlo”.
“152 noches atormentada por dolores mentales y físicos porque sé lo que están pasando y sé que no puedo ir a salvarlos”, continuó.
“Mi amado Ohad, el padre de mis hijas, fue arrancado de mi vida y está en un bucle interminable de sufrimiento que no tengo manera de hacer que termine. Me preocupo por él y, sobre todo, lo extraño. Extraño su abrazo. Extraño sentirme segura con él, extraño su aliento y saber que él está a mi lado y que todo estará bien”.
“Vivo en una incertidumbre infinita; ya no tengo aire para respirar. No tengo un hogar; mi familia está dispersa por todo el país y no tengo el espacio seguro que me brinda Ohad. Si yo regresé hace 152 días y estoy mal de salud, en un estado mental muy difícil y no puedo mantener la cabeza fuera del agua, ¿cómo estará mi marido después de medio año allí? ¡Basta! ¡Lloro lo suficiente! Ayúdenme, sáquenlo de allí. Cualquier acuerdo que esté sobre la mesa, tómenlo y salven a quien pueda salvarse”, exclamó Ben Amí.
“Hay chicas que tienen que salir de allí. Miro a Ela, mi hija, no podría soportarlo si ella estuviera allí. No sobreviviría si todavía estuviera allí, durante seis meses, Necesitamos un acuerdo”, suplicó.
En respuesta a la presidenta del comité, la diputada Pnina Tamano-Shete, Ben Amí dijo que recibe 1,350 shekels al mes del gobierno como “cautiva redimida”.
“Recibo mucho apoyo de la gente, no tanto del Estado. Hay organizaciones, Lev Haotef, Lev Ejad, de todo tipo, que ayudan. No puedo decir que reciba mucha ayuda del Estado, ni siquiera económica”, dijo.
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