Rab Menachem Ziemba, rabino del gueto de Varsovia

Efraim Palvanov – Menachem Ziemba (1883-1943) nació en un suburbio de Varsovia (Polonia) y fue criado por su abuelo, un rabino jasídico. De joven, Ziemba demostró rápidamente que era un genio de la Torá y un maestro jasídico. A los 18 años ya estaba casado, y durante las siguientes décadas se dedicó por completo a los estudios judíos, escribiendo más de 10,000 páginas de sus pensamientos relacionados con la Torá y enseñando en la Yeshiva Mesivta. Por humildad y devoción a la Torá, se negó a asumir funciones más prestigiosas de liderazgo rabínico, incluida una oferta para ser Gran Rabino de Jerusalén. Sin embargo, en 1935, a petición de su propio rabino, Ziemba empezó a asumir funciones y obligaciones comunitarias.

Pronto adquirió fama mundial por su sabiduría y ocupó un puesto clave en Agudas Yisroel, la organización central de los judíos askenazi-ortodoxos. Tras la invasión nazi de Polonia, Ziemba fue puesto en cuarentena en el gueto de Varsovia junto con 400,000 judíos, en un área de menos de kilómetro y medio cuadrado. A pesar de que perdió a su esposa en el gueto, el rabino Ziemba trabajó constantemente para inspirar esperanza y optimismo entre los judíos. Trabajó incansablemente para garantizar que los judíos pudieran seguir observando la la Torá en el gueto, introduciendo de contrabando provisiones (incluidos artículos kosher para la Pascua judía) y artículos religiosos, estableciendo en secreto áreas de estudio de la Torá y continuando enseñando el judaísmo en silencio. Incluso rompió el tejado de su propio apartamento para poder construir una sucá adecuada para la comunidad.

El rabino Ziemba tuvo múltiples oportunidades de abandonar el gueto (incluida una de la Iglesia católica), pero se negó a abandonar a su pueblo. Aunque en un principio era partidario de la resistencia pasiva, tras las deportaciones de 1942, que mataron a cientos de miles de judíos, el rabino Ziemba estaba convencido de que los judíos tenían que luchar. Fue un importante defensor del Levantamiento del Gueto de Varsovia de 1943, y él mismo fue el primero en donar fondos para comprar armas. Para sofocar el levantamiento, los nazis empezaron a destruir e incendiar el gueto. El rabino Ziemba quedó atrapado en uno de esos incendios y fue tiroteado por las tropas de las SS cuando intentaba escapar.

Con gran conmoción y tristeza, fue asesinado. Tras el levantamiento, el resto de su familia fue reunida y llevada a Treblinka, donde también fueron asesinados. La gran mayoría de sus escritos y enseñanzas fueron quemados en el gueto de Varsovia, aunque sobrevivieron tres libros que aún se estudian. En 1958, el cuerpo del rabino Ziemba fue exhumado y trasladado a Israel, donde finalmente recibió sepultura.

Fuente: Jew of the Week