Los kibutzim del norte celebran Shavuot mientras los cohetes de Hezbolá explotan en el cielo

Shavuot es una de las fiestas más celebradas entre los kibutzim, expresada a través de animadas procesiones que muestran su orgullo agrícola, bailes y cantos. Mientras decenas de kibutzim celebraban la festividad el martes, las incesantes sirenas en el norte interrumpieron las festividades de los residentes.

Los kibutzim celebraron Shavuot con festividades tradicionales en medio de cielos inquietantemente animados llenos de cohetes y misiles disparados por Hezbolá, con niños que exclamaban asombrados: “Como fuegos artificiales”.

En el kibutz Kfar Szold, situado a unos 5 kilómetros de la frontera con el Líbano, los celebrantes vestían ropas blancas como es costumbre en Shavuot. En medio de música alegre, sonaban incesantes sirenas y el cielo se llenaba de misiles y cohetes.

La disonancia era evidente, especialmente en la visión surrealista de los niños riendo.

“Como fuegos artificiales, qué bonito”, exclamaron mostrando asombro en medio del caos. Los celebrantes de todas las edades parecían casi indiferentes a la agitación de arriba, permaneciendo en el lugar, documentando, filmando y riéndose de las manifestaciones un tanto espeluznantes en el cielo publicó The Jerusalem Post.

La situación era completamente diferente cuando se miraba el kibutz Neot Mordejai. Allí también se llevaron a cabo fiestas y los residentes también se vistieron de blanco. Sin embargo, el sonido de las sirenas y las numerosas explosiones en el cielo hicieron que todos corrieran asustados.

Los padres buscaban a sus hijos gritando sus nombres. Gritos de pánico de “mamá, papá” resonaron por todas partes. La extraña visión de misiles y cohetes en el cielo cambió la atmósfera festiva en cuestión de momentos.

Celebraciones de Shavuot en medio de amenazas

“Nos reunimos todos como familia en el kibutz Amir, en la casa de mi hermano, después de las celebraciones tradicionales en el comedor del kibutz”, compartió Yoram Even-Zur, miembro del Consejo Regional de la Alta Galilea. “En el camino empezaron a sonar las sirenas. Los cohetes en medio de las celebraciones subrayan la importancia de vivir en Galilea. Ya llevamos ocho meses viviendo aquí bajo una amenaza tangible”.

Alrededor de 250.000 personas participaron el martes, y se espera el mismo número de participantes el miércoles, en la celebración de Shavuot en los kibutzim. En todas las ceremonias se hicieron llamados para el regreso de los rehenes. Decenas de desplazados celebraron la festividad en los kibutzim fronterizos, a pesar del ataque de Hamás a Israel el 7 de octubre, donde los residentes de 56 kibutzim en el Néguev occidental y la frontera norte se trasladaron a hoteles y alojamientos temporales.

Shavuot es una festividad importante en los kibutzim, marcada por reuniones en los jardines centrales y el desfile tradicional. Además del habitual atuendo festivo blanco, este año se añadió el amarillo, el color de la campaña de las familias por la liberación de los rehenes. Resonó un llamado unificado para aprobar el ‘Acuerdo Netanyahu’ para traer a los rehenes a casa.

También en Metula tuvo lugar una procesión tradicional. A diferencia de años anteriores, sólo los estudiantes restantes de la clase preparatoria viajaron en tractores decorados, que simbolizan la esperanza por el regreso de los rehenes de Gaza, junto con dos cohetes Katyusha del Líbano que impactaron en dos casas la noche anterior.

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