El primer ministro Benjamin Netanyahu ha decidido no buscar una posible normalización con Arabia Saudita antes de las elecciones presidenciales estadounidenses de noviembre, reportó el Canal 12.
Según el informe, Netanyahu tomó la decisión al mismo tiempo que se desarrollan rápidamente los acontecimientos políticos en Estados Unidos, considerando que podría valer la pena esperar para ver si Donald Trump regresa a la Casa Blanca en las próximas elecciones.
El informe sugirió que la decisión tiene importantes implicaciones, incluso para las conversaciones hacia un posible acuerdo con Hamás, ya que la normalización potencial habría constituido una “red de seguridad” para Netanyahu: si su coalición de derecha colapsara por un acuerdo con Hamás, la normalización con Arabia Saudita le habría dado una carta de triunfo para impulsar las elecciones y la oportunidad de asegurar un legado histórico.
El informe llega apenas una semana después de que un funcionario israelí dijera a los periodistas durante una reunión informativa en Washington que todavía era posible un acuerdo de normalización entre Israel y Arabia Saudita antes de las elecciones presidenciales de noviembre, y que Netanyahu discutió el asunto con el presidente estadounidense Joe Biden durante su reunión en la Casa Blanca.
Justo antes de que Netanyahu partiera hacia Washington, Biden anunció que ya no buscaría la reelección en noviembre, y desde entonces, la actual vicepresidenta Kamala Harris ha conseguido la nominación demócrata, preparándose para una feroz batalla contra Trump por la Casa Blanca.
Los esfuerzos de normalización entre Israel y Arabia Saudita han surgido repetidamente en los años transcurridos desde los Acuerdos de Abraham negociados por Estados Unidos en 2020, cuando Israel estableció relaciones diplomáticas con los Emiratos Árabes Unidos, Bahréin y Marruecos.
Los funcionarios de la era Trump han afirmado a menudo que las relaciones entre Jerusalén y Riad se habrían consolidado desde entonces si Trump hubiera sido reelegido ese mismo año.
Sin embargo, durante la administración Biden se dieron pasos importantes para lograr un acuerdo de ese tipo, y se dijo que la medida estaba al borde de concretarse justo antes del ataque de Hamás del 7 de octubre, que desencadenó la actual guerra israelí contra Hamás en Gaza, y dos ministros israelíes incluso visitaron Arabia Saudita unos días antes del ataque.
Sin embargo, incluso en los meses posteriores, los funcionarios estadounidenses indicaron que los saudíes seguían abiertos a seguir adelante con la normalización, y los funcionarios en Riad dejaron la puerta abierta.
Pero en las últimas semanas, cuando el Congreso de Estados Unidos concluyó su sesión de verano antes de las elecciones de noviembre, el esquivo acuerdo parece más lejano.
Arabia Saudita ha exigido que Israel acepte establecer una vía hacia un futuro Estado palestino, un marco que Netanyahu ha rechazado repetidamente y que podría hacer que sus socios de coalición de extrema derecha le tiraran el gobierno.
Mientras tanto, el príncipe heredero saudí Mohammed bin Salman tiene previsto recibir al presidente de la Autoridad Palestina Mahmoud Abbas esta semana en Arabia Saudita.
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