Temen que a algunos rehenes no les quede mucho tiempo de vida

Se presume que algunos de los rehenes que Hamas aún mantiene vivos en Gaza se encuentran en estado grave y no podrán sobrevivir mucho más tiempo en cautiverio, dijo un alto funcionario de seguridad al Canal 12.

“Sabemos que algunos de los rehenes no sobrevivirán mucho más tiempo en las condiciones en las que están detenidos, y a la luz de su salud física y mental”, dijo el alto funcionario a la cadena.

La fuente subrayó que no se trata de una evaluación o una suposición, sino de un asunto sobre el que Israel tenía información clara.

“La idea de que están detenidos en condiciones relativamente buenas, como Noa Argamani y los rehenes liberados en la operación [de las fuerzas especiales], es incorrecta”, añadió, refiriéndose a una misión de rescate en junio en la que se liberaron a cuatro rehenes en condiciones notablemente buenas en relación con haber vivido en cautiverio durante ocho meses.

“Y el argumento de que ‘están sufriendo pero no muriendo’ no resiste el escrutinio”, continuó la fuente, refiriéndose a los comentarios atribuidos al primer ministro Benjamín Netanyahu durante una reunión de gabinete en julio.

Los comentarios anónimos se producen un día después de que Estados Unidos, Egipto y Catar, los mediadores en las conversaciones sobre el alto el fuego de los rehenes, emitieran una declaración conjunta en la que pedían que se finalizara un acuerdo sin demora.

La oficina del primer ministro Benjamín Netanyahu publicó más tarde una declaración diciendo: “Tras la propuesta de Estados Unidos y los mediadores, Israel enviará la delegación negociadora el 15 de agosto al lugar decidido para ultimar los detalles para la implementación del acuerdo marco”.

El acuerdo propuesto prevé tres etapas. Durante la primera etapa, que durará seis semanas, Hamás liberaría a todas las mujeres rehenes, incluidos los soldados, además de los hombres mayores de 50 años y los civiles enfermos y heridos.

A cambio, Israel liberaría a cientos de prisioneros de seguridad palestinos que tiene en su poder. También comenzaría una tregua en los combates.

Durante esa fase, se iniciarían negociaciones indirectas sobre los detalles del intercambio que tendría lugar en la segunda fase, cuando se liberarían a los soldados y a los hombres restantes, también a cambio de prisioneros palestinos.

El alto el fuego continuará durante las negociaciones. En la segunda fase, Israel se retiraría de la Franja de Gaza y se anunciaría un fin permanente de las hostilidades. La tercera etapa se ocupa de la liberación de los restos de los rehenes fallecidos por Hamás y de la reconstrucción de Gaza.

Un punto clave de fricción ha sido el deseo de Hamás de que el acuerdo ponga fin a la guerra, mientras que Israel exige el derecho a volver a luchar después de la primera etapa si es necesario.

“Si quieren llegar a un acuerdo parcial, no hay problema en reanudar la lucha con todas las fuerzas después de los 42 días de la primera etapa”, dijo un alto funcionario de seguridad a los líderes políticos israelíes, según el Canal 12, al tiempo que argumentó que “el público israelí no entiende la magnitud del golpe que recibió Hamás“.

“Aparte de [Yahya] Sinwar, casi todo el liderazgo militar, desde [Muhammad] Deif hasta [Marwan] Issa, pasando por los comandantes de brigada y batallón, ya no existe”, añadió el funcionario.

El ministro de Finanzas, Bezalel Smotrich, un miembro de extrema derecha del gabinete de seguridad, emitió una declaración oponiéndose al acuerdo propuesto.

“Realmente no es el momento para una trampa peligrosa que ve a los ‘mediadores’ dictarnos una ‘fórmula’ y obligarnos a un acuerdo de rendición que hará que se vaya por el desagüe la sangre que hemos derramado en esta guerra tan justa que estamos librando”, dijo.

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