Tisha B’Av: La raíz de los Exilios

Está por terminar Tisha B’Av, uno de los días más trágicos para los judíos. En el hacemos un luto por el Templo y que fue destruido y la masacre que ocurrió en Jerusalén con la invasión romana. Una de las preguntas más recurrentes sobre este día es: ¿por qué D-os permitió que ocurriera? Irónicamente frente a la tragedia cualquier respuesta suena banal. No importa que razón demos a lo ocurrido siempre preferiríamos haber recibido ese aprendizaje o ese bien desprovisto de dolor, por eso mismo cualquier razón que demos suena como un insulto mismo tanto a nuestro pensamiento como a nuestro dolor.

Aún así en el judaísmo creemos que “todo pasa por algo” y por dolorosa que sea una situación siempre hay algo que podemos obtener y aprender de ella. En el caso particular de Tishá B’Av se menciona la historia de rabí Akiva que al ver la destrucción que había ocurrido en el Templo aparte del llanto, rió enormemente de alegría, pues vio que las promesas de salvación y redención también serían cumplidas. Se nos dice que así como hoy Tishá B’Av es un día de dolor y tragedia en el futuro será un día de celebración. Pues la raíz de la Redención se encuentra en el mismo lugar que el inicio del Exilio.

Por eso se dan “razones” al Exilio, es decir aprendizajes históricos que el pueblo judío obtiene a través del tiempo o elementos que se encuentran en la base de lo sucedido y que traen un resultado positivo tanto a la nación como a la humanidad. Mucho se ha dicho de la unidad al interior del pueblo judío, de aprender a deshacerse del odio gratuito, de las plagas de rabí Akiva, de la idolatría que nos hablan de aprendizajes que la nación de Israel debía de aprender e implementar en su interior. Es decir de una reparación que ocurre al interior de la misma, sin embargo, cuando se habla de Redención, se habla de toda la humanidad, por ende Tisha B’Av también se entiende como un evento que afecta la relación que Israel guarda con las otras naciones. Se habla de una reparación que existe o que debe darse entre Israel y las naciones. Los siguiente elementos son algunas de las reflexiones que se hacen en Tisha B’Av alrededor de este tema.

Israel en las naciones, las naciones en Israel

Cuando se habla del final de los tiempos se habla de que muchas naciones viven a través de la nación de Israel. Por ejemplo, la nación egipcia, la constitución política, religiosa, ideológica e identitaria de los antiguos imperios egipcios dejo de existir. Hoy difícilmente se le hacen pirámides al dios Ra. Sin embargo, hay mucho de los egipcios que vive en nuestras sociedades modernas hoy y hay mucho de los egipcios que vive en la nación de Israel desde el momento en que Israel vivió en el Exilio bajo su gobierno. El ejemplo más claro son los tefillin, eran objetos egipcios.

El argumento es que cada vez que Israel es dominado por una cultura ajena absorbe parte de esa cultura y como tal ocurren simultáneamente dos eventos: tanto parte de ese cultura empieza a vivir en Israel como parte de Israel vive en esa cultura. A lo largo de los milenios eso lleva a ambas culturas a un aprendizaje mutuo a un camino que las acerca a la Redención a ambas.

Eso en cuanto a las culturas que persisten a lo largo del tiempo, en cuanto a las que desaparecen, lo mejor de ellas vive a través de Israel y de esa forma llegan también a la Redención.

Anti valores

Otra visión es exactamente la contraria, los imperios que invadieron a Israel fueron de los más sanguinarios que han existido a lo largo de la historia. Los cuatro imperios que produjeron los Exilios: Egipto, Babilonia, Grecia y Roma fueron considerados el epítome de la cultura en su momento. Sin embargo, los valores que promovían, la tecnología, el arte, la ciencia, la milicia, etc, lo hicieron a través de la fuerza se convierten en anti valores el momento en que no ven al prójimo como igual, que no consideran la vida humana como sagrada e incurren en invasiones y masacres. La nación de Israel al existir en el tiempo y al fomentar el amor al prójimo muestra la banalidad de dichos valores cuando carecen de una raíz humanista

Al mismo, esos anti valores se purgan dentro de Israel al haber estado tantos años en contacto con los mismos.

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Aranza Gleason: Aranza Gleason se define a sí misma como una judía en el exilio. Nació con una raíz dividida como sus poetas favoritos; busca y ama al judaísmo, pero como a los personajes que lee, éste, también se le escapa de las manos. Estudió Lengua y Literatura Inglesa en la UNAM y ha trabajado en Enlace Judío desde el 2017. Le gusta leer, viajar y experimentar el mundo de forma libre.