Una de las cosas más bellas del judaísmo es lo multifacético que es y las numerosas capas de significado que se encuentran dentro de una misma tradición. Eso ocurre con las festividades, cada una de ellas involucra al hombre desde los múltiples ángulos que lo distinguen. En ellas se unen el año agrícola con los sucesos históricos y la determinación idividual de crecimiento. Todas nos van a hablar de qué se le exigía a Israel como nación, qué al individuo, qué se recuerda en el pasado judío y cuál era el tiempo agrícola del momento. Por eso es importante poner atención a los nombres, por que en ellos se encuentra mucho de lo que podemos aprender. Si bien, hoy conocemos como “Rosh Hashaná” a la festividad que ocurre el primero de tishrei, tanto la Torá, el Talmud y la liturgia le dan una gran variedad de nombres. Exploraremos tres de los principales.
Rosh Hashaná y las berajot
Rosh Hashaná sucede en la época del año que se realizaba la siembra de los cultivos por ende marca el inicio del año para una gran variedad de eventos. Por ejemplo en Rosh Hashaná empieza la cuenta de shmitá (cada siete años se deja reposar la tierra), todo el ciclo agrícola, la cuenta civil de los años y la cuenta del Jubileo (la liberación de los esclavos que se hacía cada 50 años). “Rosh” quiere decir “cabeza” y “Shaná” – “año”, “Rosh Hashaná” literalmente quiere decir “la cabeza del año” que también se usa para decir “el inicio del año”. Hay otros tres años nuevos dentro de la tradición judía, sin embargo, fue éste el que prevaleció como festividad en la tradición a lo largo de los siglos.
¿Qué hacemos?
Como era la época de lluvia y siembra se tiene la noción de que Rosh Hashaná no sólo determina las materias civiles, sino que la suerte de este día también determina la bonanza material y espiritual de todo el año. Por eso dentro de la cena ritual que caracteriza a toda fiesta, en Rosh Hashaná acostumbramos hacer berajot (plegarias bendiciones) con “simanim” (símbolos) pidiendo por buena suerte y abundancia para el siguiente año. Por ejemplo comemos un poco de la cabeza de carnero o pescado para pedir “que seamos cabeza y no cola” o comemos granadas para pedir “que estemos llenos de méritos como la granada tiene granos”. Dicha tradición se estima que existe desde tiempos Talmúdicos, pero no aparece registrada en la Mishná como tal, pues es una tradición y no un mandato.
Yom HaDin, maljuyiot y teshuvot
Las plegarias hechas para el festejo de Rosh Hashaná también le dan otros nombres a la festividad. Le llaman “Yom HaDin” – “día del juicio”, “Hatarat Olam” – “día de la creación del mundo” y “Yom HaZikaron” – “Día del recuerdo”. Así como se piensa que en la tierra de Israel, de este día depende la cosecha del año entero, también existe la tradición de que en este día D-os juzga al hombre y a todas las criaturas y que de ese juicio individual que hace a todo ser creado depende el bienestar de la persona. Se le conoce como el día del recuerdo porque le pedimos a D-os ser recordados por Él e inscritos en el Libro de la Vida.
¿Qué hacemos?
Por esta carga de Juicio es que Rosh Hashaná se ha convertido en un día de gran espiritualidad. Se le conoce como un día de teshuvá. Antes de que llegue esta fecha tratamos de enmendar los errores que hemos cometido y tratamos de perfeccionarnos como personas para llegar siendo mejores a esta fecha. En nuestros rezos hablamos de la teshuvá (arrreglo o arrepentimiento) y pedimos que D-os vea ese cambio en nosotros.
También es un día en que recordamos a D-os como creador y lo coronamos como Rey, es decir tratamos de interiorizar el hecho que de él depende el destino de todas las cosas y tratamos de volver la espiritualidad el centro de nuestras vidas.
Yom Teruá y el shofar
El nombre que la Torá le da a Rosh Hashaná es el de “Yom Teruá” y se refiere al sonido de Rosh Hashaná.
¿Qué hacemos?
El shofar es un instrumento hecho del cuerno de un carnero. Escucharlo es la mitzvá (el mandato) que distingue a esta festividad de las demás, es la tradición más importante del día. Mucho se ha dicho de su significado, usualmente se habla de que representa tanto las trompetas de la Torá como el llanto. Es un llamado a la Redención y un recuerdo de la Atadura de Isaac.
Comunidad Enlace Judío
¿Nuestro periodismo es importante para ti?
¿Confías en Enlace Judío para una cobertura precisa y oportuna en este momento?
En ese caso, únete a la comunidad Enlace.
A partir de $100.00 MXN al mes, podrás:
- Apoyar a nuestros periodistas independientes que trabajan las veinticuatro horas del día
- Ser reconocido como parte de nuestra comunidad una bendición semanal
- Acceso a contenido exclusivo
- Acceso a eventos exclusivos, en caso de haberlos
- Servicio de noticias instantáneas sobre Israel y el mundo judío a tu celular, así como a nuestras transmisiones en vivo.