Familiares de rehenes exigen acuerdo en protestas menores ante restricciones de emergencia

Las protestas por los rehenes en manos de Hamás y contra el gobierno de Benjamín Netanyahu tuvieron lugar a una escala limitada debido a las restricciones de reuniones tras el asesinato del jefe de Hezbolá Hassan Nasrallah, informó Haaretz.

Las manifestaciones se celebraron en Tel Aviv, Cesarea, Jerusalén, Be’er Sheva y otras ciudades. Las protestas previstas en Haifa y cruces centrales en el norte de Israel fueron canceladas debido a la situación de seguridad.

“No podemos permitirnos el lujo de detener nuestra lucha ni un segundo”, dijeron familiares de rehenes frente a la sede de las FDI en Tel Aviv.

Einav Zangauker, madre de Matán, se dirigió al primer ministro Benjamín Netanyahu: “Cuando debería haber estado viajando hacia los mediadores para negociar y traer a Matán y los otros secuestrados a casa, viajó a la ONU para hablar ante una sala vacía, con palabras huecas. No importa cuánto mienta sobre la victoria, perdimos por su culpa. Las familias están destrozadas por su culpa, la sociedad israelí está rota por su culpa. Ningún éxito en el norte puede compararse con la destrucción que usted nos ha traído”.

Agregó que los familiares de los rehenes seguirán luchando a pesar de la situación de seguridad. “Aún bajo el fuego de misiles del Yemen, de Hezbolá o Irán, seguiremos luchando por los secuestrados”, enfatizó.

En Kiryat Gat, en el sur de Israel, Nili Margalit, quien fue secuestrada en el Kibutz Nir Oz y liberada en noviembre, acusó a Netanyahu de rechazar un acuerdo por razones políticas. “Él los prefiere muertos”, dijo.

“Los rehenes muertos no pueden contar historias de horror y desesperación. Yo estuve allí. Conté cada segundo. Recuerdo todo: la desesperación, el hambre, la sed, la impotencia y la lucha por mantener la esperanza”.

“La gran mayoría del público israelí está dispuesta a pagar cualquier precio por el regreso de los secuestrados, y lo ha demostrado saliendo a las calles semana tras semana, incluso durante esta guerra terrible y desmoralizante, sin dejarse intimidar por la amenaza de los cohetes. Todos sabemos que esta es nuestra última esperanza de vivir aquí”, sostuvo.

Anteriormente, en una declaración con otros familiares de rehenes, Zangauker dijo: “Bajo el pretexto de operaciones militares exitosas y la escalada de la guerra en el norte, Netanyahu está tratando de ocultar el hecho de que actualmente hay un acuerdo sobre la mesa que Hamás ha aceptado”. Exigió al gobierno “aprovechar los logros militares en el norte para presentar una iniciativa diplomática que asegure el regreso de los rehenes”.

Itzik Horn, padre de los rehenes Yair y Eitan Horn, comentó sobre el discurso de Netanyahu ante la Asamblea General de las Naciones Unidas: “Con una mano, habla hermoso y con la otra, socava los acuerdos y condena a muerte a los rehenes. No mencionó la palabra ‘acuerdo’ ni una sola vez en su discurso porque no quiere un acuerdo”.

Ifat Kalderon, prima del rehén Ofer Kalderon, se dirigió a la administración Biden: “Si no ejercemos una presión personal sobre Netanyahu, él seguirá mintiendo y actuando como si le importaran los rehenes mientras los abandona a su suerte. Seguimos pidiendo su ayuda: ¡presionen de forma específica y efectiva a Netanyahu para que ponga fin a la guerra en Gaza a cambio de un acuerdo!”.

Varias organizaciones de protesta pidieron al público a adherirse a las instrucciones de emergencia del Comando del Frente Doméstico, que limitan las reuniones en el centro de Israel a 1,000 personas. Sin embargo, invitaron a todo aquel que desee mostrar solidaridad con los familiares de los rehenes a unirse a ellos frente a la sede de las FDI a las 8:00 p.m., hora local.

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